Según la denuncia de la joven. su exnovio no aceptó que hubieran terminado la relación, y arremetió contra ella.
Según la denuncia de la joven. su exnovio no aceptó que hubieran terminado la relación, y arremetió contra ella. | Foto: Twitter / @MarcioNakashima

Brasil

Hombre tatúa a la fuerza su nombre en el rostro de su exnovia de 18 años

La joven señala que su victimario violó una medida de caución impuesta en su contra, por lo que el joven fue detenido.

25 de mayo de 2022

Indignación y sorpresa despierta en Brasil el caso de una joven de 18 años que se convirtió en víctima de un deleznable hecho ocurrido en días pasados en la localidad de Taubaté, cuando, un exnovio decidió arremeter en contra de ella, producto del rompimiento amoroso, y según la víctima, decidió ‘marcarla’, tatuándole el nombre de él en el rostro.

Como si fuese la primera página de un cuaderno del colegio, o el hierro que los ganaderos imponen a su ganado, según la denuncia, recogida por medios locales, el joven, de 20 años de edad, habría marcado a su expareja, en un acto que no encuentra lógica ni explicación por parte de la denunciante y sus personas cercanas.

De acuerdo con la recolección de los hechos, el suceso acaeció luego de que el joven violara una medida judicial o caución que lo obligaba a mantenerse alejado de su expareja, y tras ubicarla, la abordó, obligándola, según reza en la denuncia, a subirse a un vehículo para ser transportada con un destino indefinido, donde juntos pasaron la tarde.

En medio de dicho encuentro, el joven, identificado como Gabriel Henrique Alves Coelho, habría obligado a la mujer a someterse al procedimiento antes mencionado, quedando la mitad de su cara marcada con el nombre que suele emplear su expareja “Gabriel Coelho”.

Según recogen medios locales, tras ser presuntamente raptada la joven, su victimario había alertado de la situación a los familiares de su exnovia, quienes incluso habían clamado al joven por su liberación, en un hecho que habría quedado consignado a través de un servicio de mensajería instantánea.

Tras el rapto y ser tatuada, la mujer fue regresada a su casa, con las secuelas del que es un acto aparentemente derivado de un estado de celos y posesión del joven, pues la mujer afirma que fue tatuada por la fuerza.

Tras percatarse de lo ocurrido, la joven dio parte a las autoridades, con el propósito de que el agresor y eventuales cómplices del joven, pudieran ser aprehendidos y se hiciera justicia después del daño hecho a la mujer, en un acto que claramente afectó su estética.

Luego de que Tayane interpusiera la denuncia, las autoridades brasileñas abordaron al presunto agresor, enviándolo a la cárcel, inicialmente como una medida que responde a la violación de la medida de caución que tenía impuesta contra la joven.

Tras la exposición del caso, que ha alcanzado alta visibilidad en su país, el joven ha afirmado que no es responsable de dicho acto, negando que la tatuada se hubiese realizado de forma forzosa, afirmando que, por el contrario, el grabarse el nombre de “Gabriel Coelho, derivó de un “acto consensuado”, revelando a su vez que no era la primera vez que la joven opta por tatuarse, advirtiendo la existencia de un tatuaje similar en la zona de la entrepierna.

Tras interponer la demanda, el joven, presuntamente responsable del hecho, fue detenido por las autoridades brasileñas, en una operación que también contempló la detención del padre del victimario, al ser responsabilizado de estar tras el volante la tarde que su hijo raptó a la joven.

En su comparecencia, el padre de Gabriel Coelho, explicó que la mujer no había sido raptada, ni mucho menos obligada a tatuarse; y que, por el contrario, los hechos ocurrieron en común acuerdo, y que la chica accedió voluntariamente a subirse al

Luego de conocerse la denuncia en Brasil, el hecho ha despertado la empatía de diversos sectores sociales, teniendo eco incluso en instancias legislativas, donde diputados se han pronunciado públicamente exigiendo acompañamiento para la víctima, y un castigo ejemplar para el presunto responsable.

En el caso del diputado por el Estado de Sao Paulo, Márcio Nakashima, este afirmó que el hecho es ‘lamentable’, y acusó al victimario de ser “otro de los “machos”, misógino, vengativo, que no acepta el fin de la relación.

También se conoció que, como medida para evitar el impacto físico dejado por el tatuaje, la mujer acudió a especialistas para que a través de tecnología especial, fuera retirado el tatuaje del rostro.