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Huracán Ian y otras tormentas son resultado del cambio climático
Un mundo más cálido, explica el científico del clima Karthik Balaguru, está preparado para traer huracanes que se intensifican más rápido.
Los huracanes que se intensifican rápidamente como Ian se desarrollarán más rápido y se volverán más húmedos en un futuro marcado por la continua dependencia de los combustibles fósiles.
Es la conclusión de un estudio publicado en Geophysical Research Letters’por científicos del Pacific Northwest National Laboratory (PNNL).
En ese sentido, impulsados por las condiciones ambientales que engendran tormentas cada vez más severas, con el cambio climático como factor fundamental, el nuevo estudio concluye que los huracanes son cada vez más húmedos y se fortalecen más rápidamente cerca de la costa ya azotada por los huracanes.
Asimismo, al examinar los datos que describen las últimas cuatro décadas de actividad de los huracanes y las condiciones que les dieron forma, los investigadores descubrieron que el ritmo de fortalecimiento de los huracanes cerca de la costa atlántica de Estados Unidos ha aumentado desde 1979. En un futuro marcado por la continua dependencia de los combustibles fósiles, el equipo considera que es probable que esta tendencia continúe.
Un mundo más cálido, explica el científico del clima Karthik Balaguru, está preparado para traer huracanes que se intensifican más rápido y, con ellos, un mayor riesgo de inundaciones en la costa atlántica de Estados Unidos.
“Nuestras conclusiones tienen profundas implicaciones para los residentes de la costa y los responsables de la toma de decisiones y de las políticas, precisa Balaguru en un comunicado. Y esto no es específico del Atlántico. Y está ocurriendo en varias regiones costeras importantes de todo el mundo”.
El equipo de Balaguru descubrió que un fenómeno costero único está en el centro de la bulliciosa actividad de los huracanes. Una mezcla de condiciones ambientales provocada por este fenómeno hace que, en última instancia, el litoral sea más propicio para el desarrollo de huracanes.
La misma mezcla de condiciones favorables a los huracanes no aparece en el Golfo de México, que el equipo exploró, pero podrían formarse en muchas otras regiones, incluidas las cercanas a la costa de Asia oriental y el noroeste del Mar Arábigo.
Infecciones por bacteria “carnívora” tras el paso del huracán Ian
El devastador huracán Ian impactó el estado de Florida, Estados Unidos, el pasado 28 de septiembre, y aunque han pasado las semanas, los pobladores de las zonas más afectadas aún luchan por tratar de que su vida vuelva a ser como lo era antes del fenómeno natural.
Los multimillonarios daños dejaron a miles de personas sin un hogar habitable, por lo que a esta hora continúan los trabajos de remoción de escombros para así empezar a divisar un nuevo comienzo.
Cómo si no fuera poco, la comunidad afectada por Ian ahora debe enfrentar una nueva problemática, que una vez más puede comprometer su integridad gracias los peligros ambientales que representó el paso del huracán categoría 4.
Debido a las marejadas ciclónicas e inundaciones generadas por la fuerte tormenta, las autoridades sanitarias del estado reportan un aumento en el desarrollo de infecciones causadas por Vibrio vulnificus, una bacteria catalogada como potencialmente mortal debido a las consecuencias que puede generar en el cuerpo humano.
Según explica la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, a pesar de que el ingreso de esa bacteria se da con frecuencia por medio del consumo de productos marinos, también puede ingresar al cuerpo por medio de corte en la piel.
“Las bacterias ingresan al tubo digestivo y se multiplican rápidamente. Además de la ingestión, los individuos de alto riesgo pueden infectarse cuando cortes, quemaduras o llagas entran en contacto con agua de mar que contiene Vibrio vulnificus”, explica.
La Vibrio vulnificus es informalmente conocida como una bacteria “carnívora” debido a las infecciones que genera en la piel. Dicha infección puede llegar a evolucionar a fascitis necrosante, esta causa un daño grave de tejidos, por lo que de no llevar el tratamiento adecuado, puede culminar en la amputación de la extremidad afectada.
*Con información de Europa Press.