¿Se propagaría como el coronavirus? Miles de personas enfermas en China tras fuga de bacteria de un laboratorio
Identifican 10.000 nuevos casos de contagio por extraña bacteria en China | Foto: Foto AP

MUNDO

Identifican 10.000 nuevos casos de contagio por extraña bacteria en China

La bacteria se fugó en 2019 de un laboratorio chino y ahora los contagiados relacionados se cuentan en miles.

4 de diciembre de 2020

Más de 10.000 personas en el noroeste de China se enfermaron de brucelosis después de que en 2019 se escapara una bacteria de una planta biofarmacéutica que produce vacunas para animales, dijeron las autoridades.

La brucelosis es una enfermedad transmitida por el ganado o los productos animales. Generalmente no es contagiosa entre los humanos, pero puede provocar fiebres, dolor en las articulaciones y dolores de cabeza.

A mediados de septiembre, un total de 3.245 personas dieron positivo en las pruebas a esta bacteria, cifra establecida en su momento tras los análisis realizados desde el incidente, según las autoridades sanitarias de Lanzhou, la capital de la provincia de Gansu, que indicaron que no se ha producido ninguna transmisión de humano a humano.

La cifra aumentó considerablemente en pocas semanas, pues con corte al 30 de noviembre “hay 79.357 pruebas locales para la brucelosis, incluidas 10.786 pruebas repetidas y 68.571 pruebas reales. Hubo 10.528 personas que dieron positivo al anticuerpo confirmado por el CDC de Gansu”, de acuerdo con la Comisión de Salud de Lanzhou, citada por CNN.

Un laboratorio estatal de la ciudad usó un desinfectante caducado en julio y agosto de 2019 en la producción de vacunas contra la brucelosis para animales, dijeron las autoridades hace semanas.

Como resultado, la esterilización fue incompleta y las bacterias todavía estaban presentes en las emisiones de gas de la compañía, la planta biofarmacéutica de Lanzhou para cría de animales.

Según autoridades chinas, un laboratorio estatal de ese país usó un desinfectante caducado en julio y agosto de 2019 en la producción de vacunas contra la brucelosis para animales.

El gas contaminado se propagó por el aire hasta el cercano Instituto de Investigación Veterinaria, donde infectó a casi 200 personas en diciembre pasado.

La Oficina de Salud de Lanzhou dijo el viernes que la bacteria suele proceder de ovejas, vacas o cerdos.

El laboratorio se había disculpado este año y se le había revocado la licencia para producir vacunas contra la brucelosis.

Los pacientes recibirán una compensación económica a partir de octubre, según las autoridades de Lanzhou.

La cifra de contagios es una actualización del conteo hecho por el Gobierno chino desde el mes de septiembre. El 8 de noviembre el gobierno del gigante asiático realizó pruebas a 55.725 personas en la provincia de Gansu, en Lanzhou, de las cuales para la fecha 6.620 habían dado positivo a brucelosis.

Esto indica que, en apenas dos meses, la cifra de nuevos contagiados representa un gran salto con respecto a los 3.245 casos positivos de brucelosis que habían sido registrados el 14 de septiembre, cuando se descubrió el brote.

A diferencia del coronavirus, al cual se le atribuye su origen también en China, la brucelosis no es una enfermedad desconocida ni nueva. Sin embargo, los brotes de enfermedades altamente contagiosas transmitidas a través de animales -o zoonosis- continúan siendo un problema.

Quienes están principalmente expuestos a esta bacteria son aquellos profesionales que trabajan en granjas o veterinarios, que mantienen contacto directo con animales. Los síntomas son similares a los de la gripe, con fiebre, dolor de cabeza, disminución del apetito. En algunos casos estas molestias pueden volverse crónicas.

El período de incubación es de cinco a 60 días. Sin embargo, el diagnóstico es difícil porque la mayoría de los casos son subclínicos, con síntomas clínicos muy leves o subliminales. La brucelosis suele tratarse con una combinación de diferentes antibióticos. En el caso de un curso agudo, la terapia dura de seis a doce semanas. En el caso de un curso crónico, el tratamiento con antibióticos se extiende hasta seis meses. El éxito de la terapia se controla mediante análisis de sangre regulares.

Con información de DW, CNN y AFP.