Importante hallazgo sobre el impacto de los videojuegos durante la pandemia

Un estudio, realizado por investigadores de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, de Colombia, y de la Universidad Católica del Perú, buscaba determinar el impacto como medio de comunicación y socialización.

“Gracias al cada vez más difundido acceso a la internet, los videojuegos han pasado a ser uno de los medios de entretenimiento que más ha aprovechado de ella para conectar a millones de personas geográficamente dispersas a través de espacios lúdicos digitalmente mediados”, según expuso la investigación.

El estudio tenía como enfoque el conocer la manera en que la práctica lúdica del videojuego online multijugador Team Fortress 2 influye en las interacciones sociales de los jugadores provenientes de Lima y otras provincias del Perú.

A través de cuestionarios online y entrevistas a profundidad, se buscaba investigar las características que presentan los jugadores de la comunidad peruana, tales como el uso de canales de comunicación dentro y fuera del juego, las motivaciones de sus prácticas lúdicas, y el involucramiento y participación dentro de la comunidad.

Entre los principales hallazgos, se determinó que los videojuegos han podido cambiar la forma de comunicación de las personas, por lo que se han creado comunidades virtuales, para acercar a los jugadores con sus amigos.

Además, se encontró que los niños entran a estas plataformas no sólo a jugar, sino a encontrarse con amigos o familiares, entablando una relación a través del juego, sumado a que se crean relaciones por medio de intereses que tienen los interlocutores en común.

En el caso de los dos países, objetos de estudio, se vio que cuando se crean estos espacios en horarios de estudio, los jóvenes tienden a hablar de videojuegos, lo que impulsa que creen reuniones a ciertas horas del día para jugar.

Adicionalmente, se encontró que se refuerza la interacción social, la cooperación y el trabajo en equipo, debido a la opción que tienen para superar ciertos niveles, dificultades y obstáculos, y los grupos destacan cuando deben colaborar dentro de uno de estos videojuegos.

El estudio dio a conocer que los niños cuentan con cierto tipo de libertad cuando están jugando, pues tienen sus propias reglas sin que haya un adulto supervisándolos, pues a diferencia del mundo real, “el videojuego es un espacio de libertad. Cuando son libres para hacer lo que quieren, entonces optan por jugar”.

Y la creación de los avatares, impulsa al niño a verse como alguien que soluciona problemas desde la perspectiva de una determinada criatura de fantasía, en línea con lo dicho en 2004 por el investigador James Paul Gee.