Hong Kong
Incautan carne de perro y gato que iban a vender para consumo humano en una tienda de Hong Kong
Tras la redada, los trabajadores de la tienda serán procesados al quedar en evidencia frente a la grave anomalía.
Una redada adelantada en conjunto por funcionarios del Departamento de Agricultura, Pesca y Conservación y el Departamento de Alimentos e Higiene Ambiental de Hong Kong, realizada el pasado jueves en ese país, permitió a las autoridades confirmar que un establecimiento estaría ofreciendo productos alimenticios que realmente estaban siendo producidos con carne de gato y de perro, en medio de una situación que viola todas las normas sanitarias de ese país.
Según detalla el South China Morning Post, medio de la región, tras la redada que tuvo lugar el pasado jueves, la noticia de los resultados positivos sobre la presencia de carne de perro y gato en los productos ofrecidos fue dada a conocer este martes, en medio de un anuncio en el que también se reveló que, como consecuencia de los hallazgos, se dispuso una investigación en contra de todos los funcionarios que trabajan en la tienda.
La confirmación de la presencia de carne de perro y gato se logró gracias a la realización de exámenes de ADN a la comida incautada el pasado jueves, y que fue el resultado de una serie de pesquisas e investigaciones previas por parte de delegados del Departamento de Agricultura, Pesca y Conservación.
En su pronunciamiento oficial, directivos del referido departamento advirtieron que la entidad “no tolerará tener carne de perro o gato para el consumo y hará un seguimiento serio”, añadiendo que, tras el hallazgo, se dispuso un fortalecimiento de las operaciones de control a esta clase de negocios en Hong Kong.
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La tienda en cuestión, según refieren medios locales, está ubicada en una zona de Hong Kong conocida como Yau Ma Tei.
Sobre los cargos a imputar a los responsables del negocio que estaba vendiendo carne de estas dos especies prohibidas, las autoridades advirtieron que se verán expuestos a ser imputados con los delitos de “almacenar y poseer carne congelada o refrigerada para la venta sin permiso”.
En medio de la investigación, también se reveló que parte de las pesquisas han llevado a determinar que parte de la carne de estos animales había llegado a través del contrabando desde China Continental, por lo que también se anunció trabajo conjunto con el cuerpo responsable del control de aduanas, reforzando la revisión de vehículos que atraviesan la frontera y que serían tildados de ‘sospechosos’.
Información sobre el presunto contrabando de este tipo de carne había circulado, según precisa el South China Morning Post, a través de una cadena de mensajes de la plataforma WeChat, donde se denunciaba que estos productos procedían de la ciudad de Kaiping en la provincia de Guangdong desde donde eran enviados a Hong Kong.
Se calcula que la carne era comercializada a un precio de aproximadamente 12,7 dólares estadounidenses por una lata de 600 gramos.
Tras consultar a habitantes de la zona, estos indicaron que no esperaban que esa tienda incurriera en ese tipo de irregularidades, afirmando que la información que tenían era que esa lugar expedía carne de pollo, afirmándose desconcertados al enterarse del origen de la carne que se comercializaba en el lugar.
A comienzo del presente año, en Francia, las autoridades sanitarias de ese país, informaron la detección de una organización encargada de venta de carne de caballo en ese país, haciéndola pasar como carne de res.
Dicha situación es tachable en tanto esto no solo representaba un hecho fraudulento, sino también con alto riesgo sanitario, si se tiene en cuenta que esos animales no son sacrificados en espacios que cuenten con todas las medidas sanitarias requeridas y, además, dicha carne representa un riesgo salubre al no ser apta para el consumo humano.
En medio de la investigación, según recogen medios internacionales, las autoridades también precisaron que dentro del grupo de responsables de dichas prácticas peligrosas no solo se encontraban personas de nacionalidad francesa, sino que la organización criminal también está conformada por nacionales belgas y neerlandeses.
En ese sentido, el grupo de sindicados, reconocidos en el sector de la producción de productos cárnicos, es señalado de haber adelantado prácticas que resultan violatorias de las reglas sanitarias establecidas en el marco europeo común, referidas a la prohibición de la venta de carne de caballo.
Según refieren medios locales en Francia, este caso se corresponde con el mayor escándalo de venta de carne equina en la última década, pues en 2013 existía un precedente, en el que miles de bandejas de carne, al parecer de caballo, también tuvieron que ser retiradas del mercado en toda Europa tras una investigación que determinó la existencia de trazas de carne de caballo en productos que se prometían fabricados con carne de res.