Indignación en Argentina: hombre que contactó a niña por redes sociales, la abusó sexualmente y le contagió una ETS

Indignación ha despertado en Argentina el caso de una menor de edad que fue objeto de un depravado sexual que, además de abusarla, le contagió una enfermedad de transmisión sexual, según reveló la oficina regional de la Fiscalía de ese país en la provincia de Puerto Madryn.

A través de un comunicado expedido a través de sus redes sociales, el ente investigativo de Argentina reveló que en días pasados conoció de una denuncia que versa sobre el caso de una menor de edad, cuya edad no fue confirmada, quien, en medio del descuido de sus padres, y a través de una plataforma digital de citas, o aplicación, fue contactada por un hombre de 46 años, quien valiéndose de engaños, la convenció de conocerse personalmente, y una vez reunidos, la abusó sexualmente.

Si bien el hecho de abuso sexual en sí ya es un delito, en el caso puntual de la provincia de Puerto Madryn, en Argentina, lo sucedido presenta dos agravantes, pues además de tratarse de una menor de edad, en el encuentro sexual sostenido el hombre contagió a su víctima con una ETS, o enfermedad de transmisión sexual, hecho que a la luz de la legislación local, su Código Penal, también tiene una pena o implicación jurídica mayor.

Tras conocer del caso, la Fiscalía de Argentina, más precisamente el despacho a cargo de una fiscal identificada como María Angélica Carcano, dispuso a comienzo de la presente semana la orden de captura en contra del hombre señalado de las punibles conductas, quien logró ser detenido la noche del pasado martes, con el objetivo de ser puesto a disposición de las respectivas instancias judiciales para que responda por su delito.

De acuerdo con el comunicado de la Fiscalía Argentina, durante la orden de allanamiento ejecutada por efectivos de la Policía el pasado 15 de noviembre de 2022, además de lograr la detención del hombre, cuya identidad no fue revelada, también se adelantó una orden de confiscación de algunos elementos electrónicos de su propiedad, los cuales serán examinados en busca de pruebas que puedan sustentar las conductas del señalado, e incluso puedan dar luces sobre eventuales nuevos casos.

Tras ser capturado, el hombre fue presentado ante un juez para legalizar la apertura de la investigación en su contra, y se le notificó los cargos de los que es señalado.

Aunque las autoridades judiciales dispusieron que el hombre debe permanecer privado de la libertad como garantía procesal, un aspecto que ha generado indignación en Argentina es que el juez, identificado como Horacio Yalguela, concediera al hombre la posibilidad de permanecer privado de la libertad bajo modalidad de prisión domiciliaria.

El juez se defiende

En medio de la polémica suscitada por el no envío a la cárcel del hombre, también se han conocido versiones entregadas por el juez, quien justificó su decisión en la actual condición elevada de hacinamiento carcelario.

En ese mismo sentido, y teniendo en cuenta que el hombre padece una enfermedad de transmisión sexual, la oportunidad de enviarlo a la cárcel también representaba poner en eventual riesgo a otros detenidos y al mismo señalado.

A la luz de la legislación argentina, el hombre podría, como parte de la actual investigación y proceso, estar sujeto a una pena que podría oscilar entre 8 y 20 años de cárcel según precisaron medios locales, teniendo en cuenta los agravantes señalados en el caso.

Sobre el lugar en que ocurrieron los hechos, la localidad de Puerto Madryn, está contenida en la provincia de Chubut, cerca a la Patagonia argentina.

Tras conocer que el hombre, pese a haber sido procesado y tener una investigación importante en su contra, se encuentra libre, los familiares de la víctima manifestaron preocupación por la seguridad de ella y otros miembros de su núcleo cercano, advirtiendo que en medio de lo sucedido, la justicia ha expuesto a la menor y allegados a un estado de indefensión.

Tras lo ocurrido, y pese a que no se ha entregado mayor información sobre la enfermedad de transmisión sexual que padece el hombre, y que contagió a la menor, y dadas las decisiones del juez, medios locales de Argentina han abierto la puerta a una serie de interrogantes, pues declaran que la justicia debería determinar el camino a emprender en caso de que el hombre sea en efecto hallado culpable y deba ser condenado por el hecho, indagando así entonces por si en ese caso, el hombre también podría disfrutar de la pena domiciliaria, o cómo buscarían las autoridades hacer frente al riesgo de tenerlo encerrado, ante una inminente condena por los hechos aberrantes cometidos.