Indignante: Olvidan a sus perros en el baúl del carro y mueren a causa del calor

Indignación causó en España la muerte de dos mascotas que fueron dejadas por sus propietarios en el baúl del carro en momentos que se presenta una oleada de calor.

Otro perro, un pastor belga de 9 meses, se salvó luego de que fuera auxiliado, tras ser reanimado por su dueño, mientras los otros dos no alcanzaron a ser salvados pese a que intentaron reanimarlos, tras ser trasladados a una veterinaria.

De acuerdo con la información oficial, el hecho se presentó en el parqueadero de un restaurante, cuando los tres animales fueron dejados en el interior del baúl del carro, con las ventanillas subidas y a pleno sol.

La Guardia Civil indicó que los dueños dejaron a los perros en el vehículo varias horas e incluso comieron en un establecimiento cercano, haciendo caso omiso de los avisos que se dieron a través de los parlantes del lugar, alertando sobre la situación.

Se indicó que cuando llegaron al vehículo, observaron a varios ciudadanos y agentes que trataban de reanimar a los animales, que estaban en un habitáculo mal ventilado y sin agua, expuestos al sol y con el tiempo suficiente para causarles un golpe de calor y la muerte.

Al sitio se hicieron presentes agentes de la Guardia Civil, quien se encargaron de dar instrucciones a las personas que intentaron salvar a los perros, que fueron atendidos en la calle, pero solo uno de ellos logró sobrevivir, luego de que uno de los dueños le practicó boca a boca.

También acudieron al lugar agentes de seguridad privada, personal veterinario y varios ciudadanos que apoyaron las labores de salvamento.

El Servicio de Protección de la Naturaleza, Seprona, indicó que el caso sucedió en Urdax, Navarra y que varios de sus funcionarios ayudaron a gestionar asistencia veterinaria, para lo cual realizaron una primera asistencia y trataron de estabilizar a los animales.

Luego de varias horas de cumplir los procedimientos establecidos y que no se lograra su mejoría, las tres mascotas fueron trasladadas a una clínica veterinaria de Irún (Guipuzkoa) a la que llegaron aún con vida, pero en estado muy crítico.

Allí se les realizaron pruebas diagnósticas para comprobar su estado y darles el tratamiento adecuado. Sin embargo, un pastor belga malinois llamado Thai, de nueve meses, falleció poco después de llegar a la clínica por un edema pulmonar grave, mientras que el otro perro, de la misma raza, de un año llamado Narco, murió por un fallo multiorgánico.

El único que sobrevivió fue un mastín italiano de nombre Taiga, de solo cinco meses, que recuperó la consciencia y evolucionó positivamente hasta recibir el alta ocho días después.

De acuerdo con la información oficial, la mascota quedó bajo custodia del alcalde de la localidad a la espera de que la autoridad judicial, defina su futuro.

Las autoridades indicaron que los tres dueños de las mascotas, de nacionalidad francesa de 61, 41 y 36 años, fueron vinculados a un proceso como presuntos responsables de un ilícito penal relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos de maltrato animal por abandono cuya audiencia será prevista para los próximos días.

De acuerdo con las leyes vigentes, estas personas podrían enfrentar una pena de hasta 18 meses de prisión e inhabilitación especial de dos a cuatro años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y su tenencia.

Un caso similar

Un caso parecido se presentó en Argentina a finales de noviembre de 2022, cuando un hombre fue detenido por las autoridades luego de que guardó a sus perros en un baúl y en el interior del carro mientras veía un partido de fútbol de la selección.

Las autoridades indicaron que el hecho se presentó en la localidad de Rafaela, donde se produjo la captura de Roberto Ojeda dueño de ambos perros que murieron asfixiados en el interior de un auto.

El hecho se produjo en inmediaciones del Parque Hipólito Yrigoyen cuando el hombre encerró a sus mascotas en un VW Gol Country, mientras observaba el partido entre Argentina y México.

Luego de que el caso se denunciara en redes sociales, efectivos policiales arribaron a una vivienda ubicada en calle Los Maitenes, donde se encontraba Ojeda y posteriormente, procedieron a detenerlo.

El personal de Investigaciones inmovilizó el vehículo, mientras que los perros fueron sepultados en el patio de la vivienda.

De acuerdo con las leyes argentinas, el hombre afronta una pena de entre 1 y 15 años de cárcel por maltrato animal.