MUNDO
Israel, cerca de cantar victoria contra el coronavirus: “se acerca el fin”
Marcos Peckel, director de la comunidad judía en Colombia, reportó cómo el hospital más grande de Tel Aviv ya se dio el lujo de cerrar su pabellón contra el covid-19.
Unos 4,6 millones de israelíes, es decir más de la mitad de la población de Israel, recibieron las dos dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech, según los datos del Ministerio de Salud publicados este jueves. Israel, país de 9,2 millones de habitantes que lleva a cabo desde fines de diciembre la más intensa campaña de vacunación del mundo, salió progresivamente de su tercer confinamiento a inicios de febrero.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, concluyó un acuerdo con el gigante farmacéutico estadounidense Pfizer que permitió a Israel obtener rápidamente millones de dosis de vacunas contra el covid-19 a cambio de datos biomédicos sobre sus efectos. Desde entonces, la tasa de contaminación de la población no ha dejado de disminuir. El jueves era del 1,1%, frente al 6% a finales de febrero, según el Ministerio de Salud.
Desde el inicio de la pandemia, 6.157 israelíes murieron de un total de más de 830.000 contaminados con el coronavirus. De su lado, la Autoridad Palestina empezó el domingo en Cisjordania ocupada la vacunación de personas de más de 75 años y de algunos enfermos, días después de haber recibido un lote de vacunas del dispositivo Covax destinado a las regiones desfavorecidas.
La Autoridad palestina espera igualmente la entrega de 100.000 dosis de la vacuna china Sinopharm. En la Franja de Gaza, más de 20.000 de las 60.000 dosis del dispositivo Covax fueron transferidas la semana pasada. Algunos habitantes de Gaza ya habían podido vacunarse después de haber recibido unas 60.000 dosis de la vacuna rusa Sputnik V de Emiratos Árabes Unidos.
El Ministerio de Salud palestino ha registrado cerca de 170.088 enfermos en Cisjordania ocupada, de los cuales 1.910 han muerto. En la Franja de Gaza se han detectado oficialmente 60.848 personas infectadas, de las cuales 593 fallecieron.
En Colombia, Marcos Peckel, director de la comunidad judía en Colombia, reportó cómo el hospital más grande de Tel Aviv ya se dio el lujo de cerrar su pabellón contra el covid-19. “Se acerca el fin”, dijo a través de su cuenta en Twitter.
El factor político
La baza de Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, para su campaña electoral fue el acuerdo alcanzado con el gigante farmacéutico Pfizer que permitió a Israel obtener rápidamente, desde finales de diciembre, millones de dosis de la vacuna contra el covid-19 a cambio de los mencionados datos biomédicos sobre sus efectos.
Pese al desconfinamiento y la reapertura de los comercios, los partidos políticos no pudieron celebrar grandes mítines en las elecciones legislativas y la campaña se desarrolló en las redes sociales.
El primer ministro apostó por su campaña de vacunación y la tímida recuperación económica y la oposición intentó sacar provecho del juicio de Netanyahu por “corrupción”, “malversación” y “abuso de poder”, que comenzó hace unos meses y que alimenta un movimiento de protestas cada sábado en todo el país, desde hace 39 semanas.
El sábado por la noche miles de personas se congregaron en Jerusalén al grito de “Yalla (vamos) lárgate Bibi” o “Bye Bye Bibi” (Adiós Bibi). Pero para sus partidarios es “Bibi, el rey de Israel”. Desde la Franja de Gaza palestina se disparó un cohete contra una ciudad israelí donde se encontraba Netanyahu, pero cayó en un terreno baldío y no estropeó la noche electoral.
En represalia, de madrugada, el ejército israelí bombardeó posiciones del movimiento islamista Hamás en el territorio, según un equipo de la AFP en el lugar. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reivindicó este martes por la noche una “inmensa victoria para la derecha” en las elecciones legislativas, las cuartas en casi dos años en Israel, pero por el momento carece de escaños suficientes para formar gobierno.
Con información de AFP