Brasil

Jair Bolsonaro, el mal perdedor

El actual presidente perdió en las urnas contra Lula da Silva. Sin embargo, se niega a admitir la derrota e incentiva a sus fanáticos para que protesten por los resultados.

GoogleSiga las noticias internacionales en Discover para conocer los hechos globales de hoy

5 de noviembre de 2022, 4:55 a. m.
El mandatario no ha aceptado de manera explícita su derrota en la reelección, proceso que ganó Lula da Silva. Mientras tanto, ocurren protestas a favor del presidente.
El mandatario no ha aceptado de manera explícita su derrota en la reelección, proceso que ganó Lula da Silva. Mientras tanto, ocurren protestas a favor del presidente. Foto: getty images

Hace años, Jair Bolsonaro emergió en la escena brasileña como una figura totalmente fresca para el país. Un capitán militar retirado que copó los debates televisivos hasta obtener la suficiente popularidad para subir los peldaños de la política brasileña. Fue concejal, luego diputado y en 2019 se convirtió en presidente.

Su mandato estuvo lleno de polémicas, duras declaraciones contra sus contradictores, constantes peleas con la prensa y un trato más que cuestionado de la pandemia, la cual le costó la vida a más de 700.000 brasileños. Todo eso provocó que el presidente de derecha perdiera la reelección el pasado domingo en un reñido resultado con Luiz Inácio Lula da Silva, quien volverá al poder después de dejar el cargo en 2010.

El presidente Biden elogió la fortaleza de las instituciones democráticas brasileñas luego de elecciones libres, justas y creíbles.
Joe Biden y Luiz Inácio Lula están dispuestos a entenderse

A pesar de la diferencia de más de 2 millones de votos, las dudas y el mutismo llenan el ambiente de Bolsonaro. El mandatario permaneció en un silencio total durante todo el domingo y el lunes. El martes dio una corta declaración de menos de cinco minutos en la que se definió como un “defensor de la democracia” y ser alguien “apegado a las reglas electorales”, pero no se atrevió a aceptar la derrota.

El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, no extendió ninguna felicitación a su adversario, pero sí dijo que continuaría cumpliendo con la Constitución y autorizó una transición de poder.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, no extendió ninguna felicitación a su adversario, pero sí dijo que continuaría cumpliendo con la Constitución y autorizó una transición de poder. Foto: Reuters / Autor: Adriano Machado

Desde entonces, los fanáticos de Bolsonaro, alimentados por teorías de conspiración del mandatario, salieron a las calles reclamando un supuesto fraude electoral de Lula sin ninguna prueba. Pero lo más alarmante fue que durante las manifestaciones le pidieron de rodillas al Ejército que intervenga y no deje que el líder de izquierda tome de nuevo el mando de Brasil.

El presidente brasileño, mientras tanto, ha copiado la postura de uno de sus aliados políticos más cercanos, Donald Trump. Cuando el entonces mandatario estadounidense perdió las elecciones con Joe Biden, se dedicó a impugnar los resultados diciendo que hubo un fraude, que nunca pudo probar. Bolsonaro, consciente de los problemas judiciales de Trump por dicha actuación, prefiere apoyar las protestas, pero por debajo de la mesa.

Jair Bolsonaro espera dar la sorpresa que le permita reelegirse.
Brasil: Tras su derrota electoral, ¿puede Jair Bolsonaro terminar en la cárcel?

Lo único que les ha pedido a sus seguidores es que reabran cuanto antes las carreteras bloqueadas, pues “perjudican el derecho de ir y venir” y a la economía. A las demás manifestaciones, Bolsonaro las defendió enfáticamente a pesar de la naturaleza radical de estas. “Las otras protestas, las manifestaciones que están ocurriendo por todo Brasil, son bienvenidas, son parte del juego democrático”, dijo el mandatario en una declaración.

El presidente brasileño y candidato a la reelección, Jair Bolsonaro, emite sus votos durante la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, en un centro de votación en Río de Janeiro, Brasil, el 30 de octubre de 2022. - Después de una campaña amargamente divisiva y una primera vuelta no concluyente, Brasil elige a su próximo presidente en una segunda vuelta de suspenso entre el titular de extrema derecha Jair Bolsonaro y el veterano izquierdista Luiz Inacio Lula da Silva. (Foto de Bruna Prado / PISCINA / AFP)
El presidente brasileño y candidato a la reelección, Jair Bolsonaro, emite sus votos durante la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Foto: AFP

Si bien el gobierno de derecha ha aceptado iniciar el proceso de transición del poder y sus ministros ya se reúnen con el equipo de Lula da Silva, no significa, ni mucho menos, que Bolsonaro esté claudicando a pesar de la derrota. Las presiones de su círculo cercano, del gabinete y de sus aliados políticos no dejan que un atornillamiento al poder ocurra, así lo quiera tanto el presidente como sus fanáticos más radicales.

La policía antidisturbios toma posición para despejar un bloqueo realizado por simpatizantes del presidente Jair Bolsonaro en la carretera Castelo Branco, en las afueras de Sao Paulo, Brasil, el 2 de noviembre de 2022. - Los simpatizantes bolsonaristas se manifestaron nuevamente este miércoles en Brasil, aunque el número de Los cortes de ruta disminuyeron, luego del anuncio de que Jair Bolsonaro autorizó la transición a un nuevo gobierno de Luiz In cio Lula da Silva. (Foto de Miguel Schincariol / AFP)
Tras 5 días de protestas en Brasil, la Policía anuncia desbloqueo de todas las carreteras del país

El mandatario declaró en su momento que, sí perdía las elecciones, se retiraría de la vida pública para siempre, algo bastante improbable dada la gran cantidad de congresistas aliados que ayudó a elegir. Pero también tendrá que lidiar con la Justicia, que lo acusa de filtración de información confidencial, intentar interferir en la Policía Federal y múltiples declaraciones falsas.

Las dudas que el mandatario sembró durante el proceso electoral han provocado que el ambiente en el país esté en su punto más tenso. Aún le quedan dos meses de presidencia al líder de derecha, que parece querer seguir el mal ejemplo de Trump y quedarse en el poder a como dé lugar. Brasil le dijo que no, y eso aún no le cabe en la cabeza a Bolsonaro, que, entre pataletas, quiere seguir dando largas a la realidad: perdió en democracia contra Lula.


Más de Mundo



Noticias Destacadas