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Jair Bolsonaro veta la distribución gratuita de toallas higiénicas a mujeres de bajos recursos

El mandatario fue duramente criticado por su decisión.

15 de octubre de 2021
Bolsonaro cada vez mas sólo, pierde respaldo entre las iglesias evangélicas (Photo by EVARISTO SA / AFP)
Jair Bolsonaro, presidente de Brasil (Photo by EVARISTO SA / AFP) | Foto: AFP

El veto del presidente Jair Bolsonaro a una ley que busca la distribución gratuita de toallas higiénicas ha provocado un alboroto en Brasil, donde miles de mujeres pobres no tienen acceso a productos básicos de higiene durante su periodo.

La etiqueta “#LivreParaMenstruar” (Libre para menstruar) completa una semana en las redes sociales, con el apoyo de varias celebridades que se han unido a las críticas en contra del veto presidencial del 7 de octubre.

“¿En qué siglo estamos? ¿Por qué aún tenemos que desgastarnos por temas obvios? Hoy, una vez más, las mujeres fuimos irrespetadas. La pobreza menstrual está presente hace años en nuestro país”, escribió la cantante Preta Gil, hija de Gilberto Gil, en Instagram.

Autora de la iniciativa legislativa, que espera beneficiar a cinco millones de mujeres, incluidas estudiantes de barrios de clase trabajadora y reclusas, Arraes espera anular el veto en el Parlamento.

Pero el jueves en la noche, Bolsonaro dijo en su programa semanal de Facebook que, si se cancelaba su veto, los promotores de la ley tendrían que “arreglárselas” para encontrar los fondos para la distribución gratuita de las toallas sanitarias.

“No voy a crear ni a aumentar impuestos para financiar esto”, sostuvo.

Según la filial brasileña de Girl Up, una ONG fundada por la ONU en 2010, una de cada cuatro adolescentes del país debe ausentarse de la escuela varios días al mes por no poder “tener su periodo con dignidad”.

De acuerdo con un informe de Unicef sobre pobreza menstrual en Brasil, 713.000 niñas jóvenes no tienen baños ni duchas en casa y más de cuatro millones no “tienen acceso a la higiene necesaria en las escuelas”.

Decidió no vacunarse contra el coronavirus

Esta semana, el presidente brasileño decidió finalmente no vacunarse contra el coronavirus, después de repetir durante meses que sería “el último” brasileño en recibir el inmunizante.

“Decidí que ya no tomaré la vacuna. Estoy viendo nuevos estudios, mi inmunización está en lo más alto, ¿para qué voy a tomar la vacuna?”, declaró el martes por la noche el mandatario ultraderechista de 66 años, en una entrevista con la radio Jovem Pan.

“Sería lo mismo que jugar 10 reales en lotería para ganar 2. No tiene lugar eso”, dijo el mandatario, un escéptico del coronavirus que llegó a decir que la vacuna de Pfizer podía transformar a la gente en “caimán”.

Luego de contraer el virus en julio de 2020, Bolsonaro ha asegurado repetidamente que sus exámenes revelan un alto nivel de anticuerpos y que por ello no le fue necesario vacunarse, algo descartado por los expertos.

Muy criticado por su gestión de la crisis sanitaria en un país donde el virus ha dejado más de 600.000 muertos, Bolsonaro está en contra de la obligatoriedad de la vacuna y del pasaporte sanitario aplicado en varios países para acceder a determinados lugares.

“Para mí la libertad por encima de todo. Si el ciudadano no quiere tomar la vacuna, es su derecho y punto final”, agregó el mandatario durante la entrevista.

Por ahora, casi 100 de los 213 millones de brasileños están totalmente inmunizados y 150 tomaron por lo menos la primera dosis.

El rechazo de Bolsonaro a vacunarse le ha valido muchas críticas también en el exterior, especialmente durante su visita a Nueva York a finales de septiembre con ocasión de la Asamblea General de la ONU, que recomendaba la inmunización de los participantes.

En ese viaje, fue fotografiado cenando de pie un pedazo de pizza en una calle de Nueva York, una consecuencia, según la prensa brasileña, de no estar vacunado.

La caótica gestión del mandatario, en especial el retraso en la adquisición de vacunas, es objeto desde hace meses de una investigación en una comisión en el Senado, cuyo informe acusatorio final, a ser presentado el martes, podría ser otro golpe duro para el mandatario, que ya tiene abiertas varias investigaciones judiciales en su contra.

Con información de AFP