Javier Milei llega a la portada de ‘The Economist’: “Mi desprecio por el Estado es infinito”

Ad portas de que Javier Milei cumpla un año como presidente de Argentina, el mandatario libertario habló en el prestigioso medio británico The Economist. En una entrevista, el líder liberatario de la nación gaucha explicó a que se ha debido el éxito económico y popular de su mandato y a los duros desafíos que ha tenido que enfrentar en su periplo en el poder.

“Javier Milei es presidente de Argentina desde hace un año. Hizo campaña con una motosierra, pero su programa económico es serio y una de las dosis más radicales de medicina de libre mercado desde el thatcherismo. Tiene sus riesgos, aunque solo sea por la historia de inestabilidad de Argentina y la personalidad explosiva de Milei. Pero las lecciones también son impactantes”, dice el artículo para presentar al mandatario.

El artículo señala que internacionalmente la izquierda lo detesta y la derecha trumpista lo apoya, pero que en realidad el mandatario argentino no pertenece a ninguno de los dos grupos. Esto debido a que ha demostrado que la expansión continua del Estado no es inevitable y es una crítica de principios al populismo oportunista, como el que practica Donald Trump en los Estados Unidos y que lo ayudaron a volver a la Casa Blanca.

“Milei cree en el libre comercio y los mercados libres, no en el proteccionismo; en la disciplina fiscal, no en el endeudamiento imprudente; y, en lugar de contar fantasías populares, en la brutal verdad pública”, dice el texto que señala que Argentina tenía un problema brutal que curar, pues tenía un Estado que repartía favores, políticos que mentían y un banco central que imprimía dinero para tapar las grietas. Para controlar la inflación, sus gobiernos recurrieron a una avalancha de controles de precios, tipos de cambio múltiples y controles de capital.

En cuanto a los resultados de Milei, el medio no escatima en mostrar como han sido un éxito en materia de números. “Los resultados son alentadores. La inflación ha caído del 13 % mes a mes al 3 %. La evaluación de los inversores sobre el riesgo de impago se ha reducido a la mitad. Una economía maltrecha está mostrando signos de recuperación”, citan como algunos de los éxitos del mandatario.

Pero también se destaca como dichos números han afectado a los argentinos en su diario vivir, ya que la economía entró en recesión este año y el desempleo se disparó. La proporción de argentinos pobres aumentó al 53 %, frente al 40 % en 2023. Pero la recesión parece haber tocado fondo. El crecimiento debería ayudar a aliviar la pobreza y el desempleo, aunque añadirá presión inflacionaria.

“Si yo no hacía algo muy abrupto, terminaba en una hiperinflación. Y eso implicaba hacer algo abrupto tanto en el Tesoro como en el Banco Central. Porque no había acceso al financiamiento y tampoco había demanda de dinero. Por lo tanto, ya estábamos al borde de una catástrofe”, dice Milei en diálogo con el medio británico. “Con lo cual nadie se puede sorprender de lo que estoy haciendo, porque lo prometí en campaña y lo estoy haciendo”, asegura.

Sobre el recorte estatal, Milei cuenta que las medidas que usó fue bajar a la mitad la estructura del Estado, eliminar la obra pública, las transferencias discrecionales a provincias, se redujo el número de empleados públicos, donde la gran mayoría de los contratos que van venciendo no son renovados. Y además, también se quitó de tajo la intermediación en lo que es la gestión de los programas sociales.

“Eso es una cuestión de política doméstica y que tiene que ver también, digamos, con cuánto desprecio sientas por el Estado. En mi caso, el desprecio por el Estado es infinito”, dice en cuanto al tema de recortes estatales que ha adelantado su gobierno durante el año en que ha estado en el poder en Argentina.

El mandatario también habló de su relación con el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump. Ya que si bien dijo que tenían un vínculo cercano, discrepaba con algunos temas. “Yo tomo mucha distancia de lo que dice y hace Trump respecto a cómo lo informan los medios. El ejemplo más emblemático fue cuando él era presidente y subió los aranceles a China. Y eso no fue una medida de proteccionismo. Eso es una lectura incorrecta de no entender cómo funciona el mundo”.

“La campaña nuestra era bastante simple. La política económica. Motosierra, ¿hubo motosierras? Sí. Desregulación, sí. Reformas estructurales, sí. Avanzar hacia la competencia de moneda, Claro. La consecuencia de todo esto es que baja la inflación, ¿no? O sea, bajo el riesgo país. La otra es la inseguridad. Por ejemplo, era imposible terminar con los piquetes (manifestaciones). No hay más piquetes. O la cantidad de homicidios, que cayó un 70%”, asegura sobre como ha logrado ser tan popular.