Joe Biden prepara reforma migratoria favorable para los indocumentados

El próximo 20 de enero tomará posesión Joe Biden como nuevo presidente de los Estados Unidos y ya se anuncia una reforma migratoria que, entre otras cosas, busca otorgar la “green card” a los indocumentados en el país y disminuir los tiempos de espera por la residencia.

El mandatario presentará un proyecto ante el Congreso de mayoría demócrata en el que se incluirán varios puntos que beneficiarían a los indocumentados, a quienes buscan asilo y a los residentes que pidan la ciudadanía norteamericana.

La vicepresidenta electa, Kamala Harris, indicó en varias entrevistas que el proyecto busca otorgar “green cards” inmediatas a los beneficiarios del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (Daca por sus siglas en inglés); así como a inmigrantes indocumentados, que estén protegidos por programas como el Estatus de Protección Temporal (TPS).

También se conoció que la reforma buscará aumentar la planta de jueces de inmigración para que puedan tramitar más rápidamente las solicitudes de asilo. Aunque aún no se conoce cuándo se presentaría el texto ante el Congreso, Biden se comprometió en campaña a hacerlo durante sus primeros 100 días de mandato, por lo que se esperaría que esté radicado antes del 30 de abril de este año.

Datos oficiales de ese país indican que hay cerca de 11 millones de personas indocumentadas que podrían verse beneficiadas con esta medida. Además, reduciría el tiempo de espera, que puede tomar varios años, ya que primero deben convertirse en residentes legales permanentes.

“Es una manera más inteligente y humana de abordar la inmigración”, señaló Harris, de origen indio y jamaiquino, a distintas cadenas de televisión, en las que confirmó también que los llamados “dreamers”, es decir los niños y jóvenes que llegan al país con sus padres indocumentados, recibirán más protección por parte del Gobierno.

En el mismo sentido, los inmigrantes amparados por el programa de Tratados de Protección Temporal podrían obtener automáticamente la residencia permanente bajo esta nueva norma.

En cuanto a la inmunización contra la covid-19, Harris indicó el plan de la nueva administración es que “las personas reciban vacunas independientemente de su estado migratorio”.

Algunas de las medidas migratorias de Trump

En la campaña presidencial de 2015, el ahora presidente Donald Trump aseguró que cambiaría varias de las políticas migratorias de Estados Unidos, para volverlas más fuertes y evitar, entre otras cosas, que “delincuentes”, como él los calificó, llegarán al país.

Trump acusó a quienes llegaban de México de traer problemas como drogas y crimen e incluso prometió construir una muralla en la frontera sur del país, en la cual hizo varios avances; sin embargo, el número de personas que se encuentran viviendo en EE.UU. y nacieron en el extranjero ha subido alrededor de un 3 %, de 43,7 millones el año anterior a la elección de Trump a unos 45 millones el año pasado.

El presidente también defendió una política de “tolerancia cero” con los inmigrantes indocumentados, que en 2018 llevó a separar a miles de niños de sus padres en la frontera con México, lo que cesó ante reclamos domésticos e internacionales.

A mediados de junio de 2020, el gobierno de Trump decidió extender las restricciones para la inmigración legal hacia Estados Unidos hasta finales del año pasado. Esta medida incluyó un tipo de visas muy utilizadas por la industria tecnológica, con el objetivo de combatir el desempleo generado por el coronavirus, explicó en su momento la Casa Blanca.

Un alto funcionario de la administración señaló que esa restricción liberaría cerca de 525.000 empleos para los estadounidenses. “El presidente Trump está enfocado en que los estadounidenses vuelvan a trabajar tan pronto como sea posible”, indicó la persona, que pidió no ser identificada.