Kamala Harris: las palabras de amor a su esposo Doug y el apasionado beso que selló su discurso. “Feliz aniversario. Te amo muchisimo”

Kamala Harris comenzó su discurso lleno de emoción. Y en el primer lugar estuvo su esposo Doug. El abogado se encontraba sentado en el público y se veía también dichoso. La candidata abrió sus palabras así: “déjenme empezar por agradecerle a mi extraordinario esposo. Ha sido un esposo y un padre extraordinario. Feliz aniversario. Te amo muchísimo”.

Días antes, Doug Emhoff había contado como conoció a Kamala Harris en una cita a ciegas. En su discurso, el martes, intentó convencer a los estadounidenses de que su esposa es la persona adecuada para tomar las riendas del país.

El primer segundo caballero de la historia de Estados Unidos cortejó a la Convención Nacional Demócrata con un discurso que destacó el lado humano de la candidata demócrata en un momento crucial para impulsar la imagen pública de la vicepresidenta.

Emhoff, de 59 años, quien dejó su lucrativa carrera como abogado del sector del entretenimiento para apoyar a Harris en la Casa Blanca, contó la historia de cómo se conocieron y de cómo ella luego se convirtió en la madrastra de sus hijos. “Te amo y estoy tan orgulloso de cómo has dado un paso adelante por todos nosotros”, dijo un emocionado Emhoff.

“Te amo Dougie”

“Kamala Harris era la persona justa para mí en un momento muy importante de mi vida. En este momento, en la historia del país, ella es la presidenta adecuada”, agregó. “Ella lo hizo por mí y nuestra familia. Ahora que el país la necesita, está mostrando lo que nosotros ya sabíamos: está lista para liderar, toma esta tarea con alegría y fortaleza, y será una gran presidenta de la cual todos estaremos muy orgullosos”.

Harris publicó una foto de ella en el avión Air Force Two, viendo a su esposo dirigirse a la convención demócrata. “Te amo Dougie”, escribió. La campaña ve en Emhoff la oportunidad de familiarizar a la audiencia con Harris, quien entró a la carrera electoral hace menos de un mes, luego de la retirada de Joe Biden.

“Este jueves será nuestro décimo aniversario de bodas... esa misma noche escucharé a mi esposa, Kamala Harris, aceptar su nominación a la presidencia de los Estados Unidos”, anticipó el segundo caballero.

Él asumió un muy visible rol como el líder de la hinchada de Harris desde que Biden la eligió como compañera de fórmula en 2020. Más recientemente, este padre de dos se transformó en un perro de ataque contra Donald Trump a medida que el candidato republicano dispara ataques personales y racistas contra ella.

“Señor Trump, sé que le cuesta mucho trabajo pronunciar su nombre”, dijo Emhoff en un video reciente, refiriéndose a la pronunciación incorrecta que Trump hace de Kamala. “Después de la elección, puede llamarla apenas señora presidenta”.

“Un poco fuera de lugar”

Harris y Emhoff se conocieron en una cita a ciegas que organizó un amigo en 2013. Emhoff llegaba con una historia de amor no muy santa que ha sido objeto de publicaciones recientes. De acuerdo con un informe, publicado en exclusiva en Daily Mail, el “segundo caballero” de Estados Unidos le fue infiel a su primera esposa, Kerstin, con Najen Naylor, la niñera de su hogar, una mujer rubia que también enseñaba en la costosa escuela privada de sus hijos.

Su relación con Kamala, por el contrario, ha fluido desde el comienzo. Tras la cita, la pareja se casó al año siguiente. Ella dijo en una entrevista con CBS que Emhoff le dejó un mensaje “adorable” tras ese encuentro.

Con el matrimonio, Harris asumió el papel de madrastra de los dos hijos de Emhoff, Cole y Ella, quienes la bautizaron “Momala”. El apoyo es tal que la exesposa del abogado, y madre de sus hijos, Kerstin Emhoff, defendió a la “cariñosa” Harris de los “ataques sin fundamento” de los republicanos por no tener hijos propios.

Cole Emhoff grabó un video para presentar a su padre este martes, en el cual habla de la “cita a ciegas que dramáticamente cambiaría nuestras vidas, para siempre”. Dijo que la familia no estaba acostumbrada a lidiar con la política, pero cuando Harris se volvió senadora en California y luego vicepresidenta, se montaron en el barco.

“Era como si Doug estuviese un poco fuera de lugar en el Capitolio. Pensé ‘¿qué va a hacer mi torpe papá ahí?’ Pero se adaptó”. Para Emhoff no fue fácil, ha admitido, al considerar además que esto implicó dejar su trabajo en la firma de abogados en el que ganaba cerca de un millón de dólares por año.

Desde entonces, Harris llama a Emhoff su sostén a medida que conquista hitos en su carrera. Pero Emhoff también se ha hecho un espacio en esta nueva vida, con una agenda que va desde luchar contra el antisemitismo hasta acompañar a la delegación estadounidense en los Juegos Olímpicos de París.

*Con información de AFP.