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La comunidad LGTBQ de Israel teme perder derechos con el auge de partidos homófobos
En el gobierno anterior las minorías LGBTQ avanzaron en temas como la prohibición de terapias de conversión, con la nueva coalición podrían perder de nuevo varios derechos.
La comunidad LGTBQ de Israel teme un retroceso de sus derechos ante la posibilidad de que entren al gobierno figuras religiosas y de extrema derecha conocidas por posiciones homófobas, como comparar homosexuales y animales o anular el Orgullo.
La lista de extrema derecha Sionismo Religioso y los dos partidos ultraortodoxos consiguieron 14 y 18 escaños en las legislativas del 1 de noviembre, asegurando la mayoría parlamentaria del bloque de derechas liderado por el ex primer ministro Benjamin Netanyahu.
Netanyahu debería recibir el encargo de formar un gobierno en el que probablemente estén presentes sus aliados ultraortodoxos, tradicionalmente hostiles al reconocimiento de los derechos LGTBQ, y los líderes de Sionismo Religioso.
Estos últimos expresaron abiertamente su aversión a los miembros de esta comunidad y amenazan incluso con tomar medidas contra ella.
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“Vamos a estudiar las posibilidades jurídicas de anular el Orgullo Gay”, dijo el jueves a la radio militar Avi Maoz, jefe de la pequeña facción Noam de esta lista.
Ya en 2006, los dirigentes de esta alianza, Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich, organizaron la “Beast parade” (El desfile de las bestias) en Jerusalén en la que hacían un símil con el Orgullo pero marchando con asnos.
Listos para luchar
En 2015, Smotrich, que aspira al Ministerio de Defensa, calificó a los homosexuales de “anormales” y se jactó de ser un “homófobo orgulloso”, aunque terminó retractándose.
Más recientemente, en agosto de 2021, vinculó un aumento de las infecciones de covid-19 a la marcha del Orgullo que hubo dos meses antes en Tel Aviv.
Israel es el país mejor situado de Oriente Medio en cuanto al respeto a los derechos LGTBQ y reconoce los matrimonios gays llevados a cabo en el extranjero.
La coalición creada por el centrista Yair Lapid impulsó otras medidas desde su llegada al poder en junio de 2021, como la prohibición de terapias de conversión para homosexuales y la apertura de la gestación para todos.
En declaraciones recogidas por el Jerusalem Post, Lapid recientemente dijo que todos esos avances podrían irse al piso tras la victoria de varios grupos de derecha extrema: “Hay una cosa que no debemos olvidar. Todo lo que hemos hecho en el último año, todo el cambio que empezó aquí, puede borrarse en un día”.
Los militantes también temen una involución en estos aspectos.
“No sabemos en este momento preciso quién estará en el gobierno, pero si nuestros derechos se ven amenazados, no dudaremos en luchar, estamos listos”, dice Or Keshet, que milita en la organización más importante de defensa de derechos LGTBQ en Israel, Agouda.
“Ha habido coaliciones de derecha y conservadoras, pero lo que se dibuja es una coalición ultraconservadora y hay temores porque Israel nunca ha conocido este escenario”, se alarma.
Para él, las posiciones de los diputados de Sionismo Religioso amenazan “los valores liberales que reposan sobre los principios de igualdad y libertad”.
Vida compleja
La perspectiva del gobierno más a la derecha en la historia de Israel suscitó inquietud internacional.
“Esperamos que todos los responsables gubernamentales israelíes continúen compartiendo los valores de una sociedad abierta, democrática y portadora de tolerancia y respeto para toda la sociedad civil, en particular los grupos minoritarios”, declaró el departamento de Estado estadounidense tras los primeros resultados electorales.
Según medios israelíes, Netanyahu, que empezó las negociaciones sobre la distribución del gobierno con sus aliados, dijo en conversaciones privadas que no tocarán la marcha del Orgullo.
Itamar Ben Gvir, conocido por su diatriba antiárabe y aspirante al Ministerio de Seguridad Interior, quiso mostrarse conciliador asegurando que velará por la seguridad de los participantes en esta marcha “incluso si no está entusiasmado” con la iniciativa.
“He madurado, he adoptado posiciones más moderadas y he comprendido que la vida es compleja”, escribió en una tribuna dirigida a sus “hermanos de izquierda” publicada el lunes en el diario de derecha Israel Hayom.
Pero Keshet sigue preocupado. Para él, “es responsabilidad de Benjamin Netanyahu preservar la identidad democrática del país y los derechos LGTBQ”.
Con información de AFP.