Salud
La inmunización pasiva contra la covid-19 es fundamental para personas inmunodeprimidas
Se estima que el 2 % de la población global puede seguir siendo vulnerable a la covid-19 tras no presentar una respuesta adecuada a la vacuna.
Dos años después de que la pandemia de covid-19 golpeara al mundo, la prioridad de los gobiernos sigue siendo la de inmunizar a su población contra el virus, de tal manera que se lleguen a controlar los contagios y las muertes por esta enfermedad.
Según la OMS, el 63 % de las personas de Latinoamérica y el Caribe están completamente vacunadas. En el caso particular de Colombia, más del 80 % de la población ha recibido, por lo menos, una dosis, y el 66,1 % ya tiene el esquema de vacunación completo, de acuerdo con el Ministerio de Salud y Protección Social.
Incluso con este panorama, el riesgo de mantener a la población inmunizada sigue siendo un reto, teniendo en cuenta las variantes que se descubren del nuevo coronavirus y el aumento de la demanda de vacunas para dosis de refuerzo.
En el marco de la emergencia sanitaria, las personas priorizadas para recibir la vacuna contra la covid-19 han sido los adultos mayores y los pacientes con comorbilidades preexistentes, como la diabetes, el asma o la hipertensión. Pero, ¿qué pasa con la población que no responde de manera efectiva a la vacunación?
Las personas inmunodeprimidas padecen de una condición que reduce su capacidad de combatir infecciones y otras enfermedades, debido a que su sistema inmunológico no funciona como debería. Esto puede ser causado por enfermedades como el cáncer, los pacientes dializados, el VIH/sida, a tratamientos farmacológicos inmunosupresores realizados para el trasplante de órganos o enfermedades autoinmunes.
Solo en Estados Unidos, alrededor del 2,8 % de la población está inmunodeprimida, por lo que se puede suponer que el porcentaje sea similar en países de las Américas.
En la actualidad, se sabe que las personas con un alto grado de inmunodepresión son más susceptibles a no responder de manera efectiva la vacuna contra la covid-19, por lo que están menos protegidos ante un posible contagio y tienen más posibilidades de tener complicaciones o infecciones graves relacionadas con la enfermedad.
Ciertos tratamientos y condiciones médicas impiden que el sistema inmunitario produzca una respuesta de anticuerpos adecuada a las vacunas, pero la inmunización contra el nuevo coronavirus sigue siendo fundamental para esta población. Se estima que el 2 % de la población global puede seguir siendo vulnerable a la covid-19 porque aún no ha formado una respuesta adecuada a la vacuna, y corren el riesgo de presentar un cuadro desfavorable en caso de que se infecten del virus. Por ello, existen opciones complementarias a la vacunación para la población vulnerable.
Un ejemplo de ello son los anticuerpos monoclonales, que son moléculas producidas en laboratorio que actúan como anticuerpos sustitutos y que pueden restaurar, mejorar o imitar el ataque del sistema inmunitario a las células. Estos anticuerpos, neutralizan e impiden que el virus de la covid-19 se adhiera a las células humanas, lo que debilita su capacidad de enfermar gravemente a los pacientes.
Según Diana Hernández, directora médica de AstraZeneca, “la inmunización pasiva representa una nueva esperanza para aquellos pacientes, que pese a la vacunación continúan en riesgo. Estos nuevos tratamientos funcionan proporcionando inmunidad de manera inmediata, a diferencia de la vacuna, que tarda mucho más en hacer efecto por lo que su aplicación a pacientes inmunodeprimidos es una gran oportunidad”.
De hecho, en diciembre de 2021 la farmacéutica reveló que la combinación de anticuerpos de acción prolongada para la prevención del virus de la covid-19 desarrollado por esta, denominada Evusheld, retuvo la actividad neutralizante contra la variante ómicron.
El estudio en cuestión demostró en dos pruebas confirmatorias estar dentro del rango de títulos neutralizantes encontrados en alguien que ha sido previamente infectado con el virus.
“Los primeros datos, generados por las pruebas de seudovirus del pico completo de la variante ómicron contra la combinación de tixagevimab con cilgavimab, los anticuerpos que componen Evusheld, se suman al creciente cuerpo de evidencia preclínica que demuestra que Evusheld conserva la actividad contra todas las variantes probadas de interés hasta la fecha”, reveló la compañía en un comunicado.
Alrededor del mundo, entidades como la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, por sus siglas en inglés) han aprobado diferentes opciones de inmunización pasiva, enfocadas en poder brindar una opción a personas inmunocomprometidas, que no han sido infectadas o expuestas recientemente al SARS-CoV-2.