Mundo
La ONU alerta de la “desesperación” que se vive en un Haití asolado por la violencia
Haití es escenario de protestas, bloqueos de vías y saqueos desde el pasado 11 de septiembre.
Saqueos, escasez de combustible, hospitales cerrados, entre otros problemas, describen una “catástrofe humanitaria” en Haití, según funcionarios de la ONU, que destacaron la situación de “desesperación” ante el Consejo de Seguridad, que tomará medidas contra la violencia en ese país.
Haití es escenario de protestas, bloqueos de vías y saqueos desde que el 11 de septiembre el primer ministro, Ariel Henry, anunció el aumento del precio del combustible ante la falta de recursos del Estado para mantener las subvenciones vigentes.
“En lugar del progreso que esperábamos y con el que soñábamos, hoy la situación en Haití alcanzó tristemente nuevos niveles de desesperación”, señaló por su parte Valerie Guarnieri, directora ejecutiva adjunta del Programa Mundial de Alimentos (PMA), denunciando ataques contra varios depósitos de ayuda alimentaria de la ONU y de otras agencias y oenegés.
“Estimamos que se han perdido al menos 6 millones de dólares en ayuda humanitaria en estos ataques, lo que hubieran podido aprovechar más de 410.000 personas”, agregó Guarnieri.
Dado que el precio de la canasta básica promedio aumentó 52% en un año “creemos que la seguridad alimentaria empeorará aún más este año, superando el récord de 4,5 millones de personas en un nivel crítico de inseguridad alimentaria o peor, incluyendo 1,3 millones en situación de emergencia”, dijo la funcionaria.
Un panorama aún más dramático debido al saqueo de los almacenes que albergaban las reservas preparadas para la temporada de huracanes.
El trabajo de las agencias humanitarias en Haití se ha vuelto cada vez más peligroso. La ONU, además, ordenó el retiro de personal no esencial, según un documento conocido por la AFP.
“Una crisis económica, una crisis de pandillas y una crisis política convergieron para crear una catástrofe humanitaria”, declaró la representante de la ONU en Haití, Helen La Lime.
¿Embargo a las armas cortas?
La terminal petrolera de Varreux, la más importante del país, se encuentra “sitiada desde hace más de una semana” por pandillas y ha generado “escasez en todo el país”, lo que ha conducido al cierre de hospitales, agregó La Lime.
Ante la falta de combustible, el parque industrial de Caracol anunció “el cese de sus operaciones”, lo que podría provocar la pérdida de “12.000 empleos”, según el ministro de Exteriores, Jean Victor Geneus, agregando que varias empresas extranjeras amenazan con dejar el país y que la vuelta a clases, aplazada hasta el 3 de octubre, “es hipotética”.
Geneus hizo además un llamado a un “acompañamiento robusto de la comunidad internacional” para apoyar a la policía local en la lucha contra las pandillas.
Una resolución del Consejo de Seguridad, adoptada en julio, pide a los estados miembros de la ONU la prohibición de la transferencia de armas cortas que terminan en manos de las pandillas, sin llegar a decretar un embargo, como lo pedía China.
“Es necesario transformar esta medida voluntaria en una medida obligatoria”, insistió el lunes el embajador chino, Geng Shuang.
Estados Unidos y México, que redactaron dicha resolución, trabajan en un nuevo texto para “permitir al Consejo de Seguridad responder a los múltiples desafíos que encara la población haitiana”, indicó el embajador estadounidense ante la ONU, Jeffrey DeLaurentis.
“Tenemos el deber de redoblar los esfuerzos para ayudar a Haití”, apuntó DeLaurentis.
“Si la violencia de las pandillas no se detiene, no será posible estabilizar el país”, agregó el embajador mexicano, Juan Ramón de la Fuente.
La ONU estima que al menos “1,5 millones de personas han sido impactadas directamente por la reciente violencia de las pandillas”, según La Lime, “con violencias de género y en particular la violación utilizadas de forma sistemática”.
*Con información de AFP.