Nicaragua
“Las noticias que llegan de Nicaragua me han entristecido”: papa Francisco, preocupado por monseñor Rolando Álvarez
El religioso, quien fue sentenciado a 26 años de cárcel y señalado de menoscabar la integridad nacional, se negó a abandonar el país en una avión lleno de presos políticos que fueron excarcelados.
En medio de su tradicional mensaje dominical, este 12 de febrero de 2023, el papa Francisco expresó desde el Vaticano su preocupación por la grave crisis social y política que vive Nicaragua, manifestando especial preocupación por la persecución que vive la Iglesia Católica por parte del régimen de Daniel Ortega, y la situación que atraviesa el obispo de la diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez.
En su mensaje, el pontífice, máxima cabeza de la Iglesia Católica, se confesó ‘entristecido’ por la situación que atraviesa esa nación centroamericano, marcado por la persecución a los sectores disidentes o contrarios al régimen Ortega, donde la semana que finaliza fueron deportados cerca de 222 líderes opositores que fueron excarcelados y enviados a Estados Unidos.
Cerrando su tradicional mensaje del Ángelus desde el balcón del Palacio Cardenalicio, ante miles de feligreses en la Plaza de San Pedro en Roma, y seguido por millones de católicos a través de los medios virtuales del Vaticano, Francisco advirtió que “las noticias que llegan de Nicaragua me han entristecido mucho”, añadiendo que ha orado mucho por la situación del obispo Álvarez, quien hacía parte de la lista de deportados, pero quien se negó a abordar el avión y por eso fue enviado tras las rejas de nuevo.
En su mensaje, además de recordar al religioso Álvarez y afirmar que está en sus afectos, el papa también lamentó la situación de las decenas de líderes opositores que fueron sacados de su país y despojados de su nacionalidad por Ortega, en medio de un acto que, si bien despertó aplausos en el sentido de que los entonces reos no tendrán que seguir aguantando atropellos a sus Derechos Humanos al interior de las cárceles de Nicaragua, sí plantea una cada vez más difícil situación para los nicaragüenses gobernados por el dictador sandinista.
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Al referirse a las ‘noticias que llegan desde Nicaragua’, el papa hizo referencia precisamente a la situación de Álvarez, quien hasta la fecha había permanecido en prisión domiciliaria, pero que ahora fue sentenciado a pagar 26 años de cárcel, señalado del delito de ‘menoscabo a la integridad nacional’.
Mientras que en Nicaragua Daniel Ortega tildó a monseñor Álvarez de ser un religioso “desquiciado” por haber preferido una cárcel en el país y no la libertad en Estados Unidos, desde el Vaticano, el papa realizó una exhortación para pedir oración a favor del religioso, los excarcelados y el país, advirtiendo que es importante que los políticos avancen en la “búsqueda sincera de la paz”, y enfatizando en la necesidad de que esta gire en torno a “la verdad, la justicia, la libertad y el amor”, poniendo como pilar fundamental el diálogo.
Al igual que monseñor Álvarez, señalado de terrorismo, otros dos religiosos, señalados de delitos comunes y que iban a ser excarcelados y enviados a Estados Unidos, se abstuvieron de abordar el avión y también se quedaron en su país.
Por el contrario, otro grupo de religiosos sí decidió acogerse al ‘beneficio’ otorgado por el régimen de Ortega, y partió con destino a Estados Unidos.
Sobres los señalamientos que determinaron la condena de 26 años de cárcel en contra de monseñor Álvarez, estos se fundamentan en el papel jugado por el religioso en su comunidad, donde el gobierno apunta que el sacerdote se sirvió de los medios de comunicación que otrora se encontraban bajo el dominio de las congregaciones religiosas, además de sus redes sociales, las cuales alcanzaron un amplio alcance tras las primeras denuncias de atropellos de las autoridades en su contra.
De igual modo, cerca de un año atrás, por las autoridades civiles dispusieron el cierre de varios medios de comunicación que se encontraban bajo administración de grupos religiosos, y expulsaron del país a una orden de monjas.
La persecución a los religiosos por el régimen Ortega se desprendió luego de que, en 2018, la Iglesia cumpliera un papel importante en la protección de grupos de manifestantes y atención de personas que resultaron heridas durante jornadas de protestas en contra del gobierno del exlíder sandinista.
Sobre el particular, el gobierno Ortega ha señalado que dicho movimiento de protesta realmente respondía a un intento de golpe de Estado y, al participar la Iglesia en la protección y atención de heridos, asumieron que la institución eclesial cumplía un rol de cómplice.
Los excarcelados
Sobre los excarcelados por parte del régimen de Ortega el pasado jueves, medios internacionales han destacado la presencia de al menos 7 excandidatos presidenciales, entre los que figuran Cristiana Chamorro, quien fue liberada en compañía de su hermano, el exministro Pedro Joaquín Chamorro, y otro miembros de la misma familia ligados al ejercicio del periodismo a través del diario La Prensa, el cual es objeto de múltiples persecuciones y vetos por parte de la dictadura.
País dividido
Mientras que algunos sectores siguen viendo con preocupación la situación actual de Nicaragua con la expulsión de sus principales líder opositores, otros, afectos al régimen de Ortega, se tomaron las calles el pasado sábado para manifestarse en respaldo de la decisión de sacar del país a los que oponen resistencia al gobierno del exguerrillero sandinista.
En medio de la manifestación, algunos participantes incluso ondearon banderas de Cuba y Venezuela junto con la de Nicaragua, otros de los países que actualmente se ven con recelo en el escenario intencional por cuenta de sus gobiernos.