Ecuador
Lenín Moreno, expresidente de Ecuador, dice ser víctima de “persecución y venganza” por los ‘Ina Papers’
La Justicia de Ecuador se negó a revisar las medidas cautelares ordenadas sobre Moreno, por lo que se ratifica su orden de presentarse cada quince días ante el Tribunal Nacional de Justicia en Quito.
El expresidente de Ecuador Lenín Moreno denunció ser víctima de una “feroz persecución y venganza” en su contra, y defendió su inocencia respecto al delito de cohecho que se le imputa en el marco del caso ‘Ina Papers’.
Los supuestos delitos cometidos por el exmandatario habrían acarreado un perjurio económico de unos 76 millones de dólares entregados por la constructora china Sinohydro y “canalizadas a través de terceras personas”.
Ahora, Moreno publicó un video en sus redes sociales donde recalcó que, en tiempos del expresidente Rafael Correa, de quien fue ‘número dos’, “todos los sectores estratégicos estaban encargados a Jorge Glas”, también vicepresidente de Correa y del propio Moreno, además encarcelado por el caso Odebrecht.
“Yo me hice cargo de llevar adelante la misión Manuela Espejo y tuvimos mucho éxito en eso. Además, toda obra que venía con financiación china, venía ya con la empresa atada que debía construirla”, manifestó Moreno, desvinculándose así de los delitos de los que se le acusa.
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Es por eso que manifestó que se trata de una persecución. “No tuve ninguna injerencia en el financiamiento de la empresa Sinohydro”, señaló el expresidente Moreno en el mencionado video, donde también desmintió tener “responsabilidad, atribuciones ni capacidad” alguna a la hora de “influir sobre los proyectos estratégicos”.
Mi exclusiva competencia cuando fui vicepresidente fue realizar con éxito la misión Manuela Espejo.Nunca tuve responsabilidad, atribuciones ni capacidad de influir sobre los proyectos estratégicos durante el gobierno de Rafael Correa. Me enfrento a su feroz persecución y venganza pic.twitter.com/rYpzsqz5Dj
— Lenín Moreno (@Lenin) March 24, 2023
La Justicia de Ecuador negó el miércoles revisar las medidas cautelares ordenadas sobre Moreno, por lo que se ratifica su orden de presentarse cada quince días ante el Tribunal Nacional de Justicia en Quito. El expresidente había pedido presentarse en la oficina diplomática de Paraguay (país donde vive y trabaja) aludiendo cuestiones de salud.
El caso que lo involucra
El caso ‘Ina Papers’ estalló en 2019, cuando se conocieron supuestas irregularidades relacionadas con empresas offshore y con personas del entorno cercano de Moreno, entonces presidente del país y quien en aquel momento ya negó su participación en la presunta trama de corrupción.
Descartó pedir asilo
El expresidente ya había descartado pedir asilo político a Paraguay, donde reside actualmente, para escapar de un proceso que le inició la Fiscalía de su país por corrupción.
“No tengo necesidad de pedir asilo al Paraguay”, dijo Moreno en Asunción.
“¿No podrían respetar acaso mis declaraciones [judiciales] que puedo hacerlas perfectamente en la Embajada del Ecuador en Asunción?”, cuestionó.
El tribunal que lleva el caso conocido como Sinohydro resolvió que el exmandatario se presente cada quince días ante la Corte Nacional de Justicia.
“Desearía ir a Ecuador”, pero “necesito primero el diagnóstico médico de que no voy a correr peligro de vida y que esto no sea más que un capricho, una vanidad de las autoridades”.
Moreno dijo haber estado hospitalizado en Asunción dos veces en el último semestre “con peligro muy grave de mi vida, por el estado de mis discapacidades”.
“Por eso, me asombra que me quieran obligar a regresar a mi país a presentarme cada quince días. Ese trajín me puede matar”, observó el político que gobernó a Ecuador entre 2017 y 2021.
De acuerdo con la Fiscalía, las 37 personas investigadas entre las que figuran también la esposa, la hija y hermanos de Moreno, habrían recibido sobornos por 76 millones de dólares de la firma china Sinohydro a cambio del contrato de construcción de la hidroeléctrica.
El ente acusador sostiene que ese es “el monto más alto judicializado por actos de corrupción en Ecuador”.
Moreno, que es comisionado de la Organización de Estados Americanos (OEA) para asuntos de discapacidad, insistió en que por razones de salud no puede viajar.
“Por mi discapacidad he tenido sangrados internos muy fuertes por esos movimientos bruscos que me han llevado en el límite de la septicemia, una infección generalizada de la sangre”, explicó.
“Tengo que consultar con los médicos que me atienden con el fin de que me puedan decir si puedo viajar o no, o en qué condiciones. Me advierten que la próxima vez que viaje lo tenga que hacer en un avión ambulancia”, declaró.
Desde el año pasado Moreno reside en Asunción, ciudad donde se encuentra la sede de la oficina de la OEA para las personas con discapacidades.
*Con información de la AFP y Europa Press.