MUNDO
Un panorama alentador para Libia
Luego de que Haftar se abstuviera a firmar el alto al fuego, el líder libio anunció su participación en la conferencia internacional sobre Libia en Berlín. Su opositor Fayez al Sarraj también asistirá. ¿Finalmente se logrará un acuerdo para acabar el conflicto?
Inicialmente, el mariscal Jalifa Haftar se abstuvo de firmar el alto al fuego propuesto por los mandatarios de Rusia y Turquía, Vladimir Putin y Recep Tayyip Erdogan, respectivamente. Este, con el fin de ponerle fin al conflicto que lleva más de nueve meses, por confrontaciones entre Haftar y el primer ministro de Libia, y su opositor, Fayez al Sarraj. El encuentro se llevó a cabo en Moscú, el 13 de enero, pero no prosperó. De ambos líderes, el único que firmó fue al Sarraj, reconocido por la ONU, mientras que el general libio pidió 48 horas más para pensarlo.
Sin embargo, este jueves el líder del Gobierno de Acuerdo Nacional de Libia confirmó que Haftar sí asistirá a la conferencia internacional en Berlín y respetará el alto al fuego, lo cual es un avance en el proceso. La ciudad alemana fue propuesta por la canciller Angela Merkel como sede para iniciar un proceso de paz entre ambos líderes.
Temiendo una internacionalización del conflicto en Libia y un aumento en las llegadas de migrantes, los europeos redoblaron esfuerzos para solucionar la situación en ese país, principalmente con la organización de una conferencia en Berlín auspiciada por la ONU.
En la capital libia, Trípoli, Fayez al Sarraj confirmó el jueves, a través de su gabinete de prensa, que acudirá a la conferencia. De igual forma, su rival, el mariscal Haftar, confirmó su asistencia en la reunión que tuvo con el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas.
Haftar "dejó en claro que quiere contribuir al éxito de la conferencia libia en Berlín y, en principio, está dispuesto a participar en ella", confirmó el ministro alemán tras reunirse con él.
Previamente a esa conferencia en Berlín, Haftar viajó este jueves a Atenas para reunirse con el presidente y el primer ministro griegos, que le apoyan.
Impedir las injerencias
Varios países estarán representados en Berlín, incluyendo Rusia, Turquía, Estados Unidos, China, Italia y Francia.
El objetivo principal de la conferencia consiste en consolidar la tregua sobre el terreno y, sobre todo, impedir injerencias extranjeras en Libia, especialmente a través de un apoyo militar. En este sentido, se propondrá un embargo a las armas, según Berlín.
Libia, que cuenta con las reservas de petróleo más importantes de África, está sumida en la violencia y las luchas de poder desde la caída del régimen de Muamar Gadafi en 2011, tras una revuelta popular y una intervención militar dirigida por Francia, el Reino Unido y Estados Unidos.
En abril de 2019, las fuerzas pro-Haftar lanzaron una ofensiva para conquistar Trípoli. Más de 280 civiles han muerto desde entonces, así como más de 2.000 combatientes, según la ONU. Además, el conflicto ha dejado 146.000 desplazados.
El alto el fuego se respeta relativamente pese a que ambos bandos se acusan mutuamente de violarlo.
El martes, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, denunció "la implicación militar" de Moscú y Ankara en Libia y comparó ese conflicto con el de Siria.
"Decimos que no hay solución militar para el conflicto. Pero eso ya lo dijimos para la guerra siria. ¿Y a qué hemos asistido en Siria? A una solución militar. La misma situación podría reproducirse en Libia", advirtió.
Turquía desplegó militares en enero para apoyar al gobierno reconocido de Fayez al Sarraj y hoy anunció el envío de más tropas para apoyar el acuerdo entre ambos bandos. Rusia, por su parte, es sospechosa de respaldar las tropas del mariscal Haftar a través del suministro de armas y la llegada de mercenarios. Aunque Putin ha negado rotundamente estas acusaciones.
El futuro de Libia todavía es incierto. Las conversaciones en Berlín son un gran avance pero a largo plazo resulta difícil saber si los líderes respetarán los acuerdos y el alto el fuego. Sobre todo, si las condiciones no los favorecen para ganar poder e influencia en el país. Además, es un conflicto que involucra a varios actores, como Rusia y Erdogan, quienes están luchando por ganar terreno en el norte de África y repartirse el poder ante la ausencia de Estados Unidos.
Por lo pronto, basta esperar los resultados de la conferencia de Berlín y augurarle un buen futuro a este conflicto que lleva años y ha cobrado la vida de miles de personas solo por el poder.
*Con información de AFP