Los ‘cubos’ que salvan vidas y desplazaron a las pandillas en El Salvador

En la lucha frontal contra las pandillas en El Salvador, el gobierno del presidente Nayib Bukele implementó una estrategia de asistencia social que incluye educación, entretenimiento y compañía. Mientras tanto, los criminales se esconden de la justicia.

Los Centro Urbanos de Oportunidad Social o Cubos, fueron construidos en las colonias o barrios más afectados por las pandillas, ofrecen un espacio de reencuentro social y solución a necesidades básicas de educación y entretenimiento para niños, jóvenes y adultos mayores.

SEMANA estuvo en una de las colonias más golpeadas por la criminalidad en El Salvador. Se trata de San José, ubicada en el municipio de Soyapango, a unos 40 minutos de la capital de este país. En este punto las pandillas del Barrio 18 tenían asustada a la población. Los niños y jóvenes debían permanecer escondidos y los delincuentes decretaban toques de queda, era quienes mandaban.

Tras decretar el estado de excepción, el gobierno de Bukele logró la captura de más de 65.000 pandilleros, la mayoría estaban justamente en las colonias donde hoy se construyeron los Cubos. El impacto social es significativo para la comunidad que antes veían en el mismo escenario grupos de jóvenes consumiendo estupefacientes.

“Teníamos todas las oportunidades cerradas, teníamos todas las puertas cerradas, también todo lo que es tema de oportunidades y juventudes. Antes era algo desconocido y el tema de la delincuencia también era muy complicado para nosotros porque vivíamos con ese temor constante de que nos pudiese pasar”, dijo Alexander Guillén, un líder juvenil del Barrio 18.

Los Cubos ofrecen salas de internet, de videojuegos, lectura y actividades lúdicas asociadas a la música, el deporte y el arte. Cientos de jóvenes que se salvaron de terminar reclutados por las pandillas ahora aprovechan esos espacios que le arrebataron a la criminalidad.

“El Cubo es una herramienta muy fundamental para todos los chicos, la aceptación se está viendo, los padres los están dejando salir, le dicen a los papás que van a estar en el Cubo, por ejemplo, toda una tarde haciendo tareas, incluidos en algún taller de manualidades, talleres educativos, refuerzos académicos”, explicó Guillén.

La comunidad que habló con SEMANA se mostró satisfecha con los logros alcanzados a través de la construcción de estos Cubos e incluso a algunos se les quiebra la voz al recordar cómo tenían que sobrevivir mientras las pandillas sembraban el terror en la comunidad.

“Ha sido una cosa tan maravillosa que nuestro Dios padre que está en los cielos y a nuestro presidente Bukele ha mandado esto, pero si se viera cómo se tienen a los niños aquí. Es una gran ayuda para todos, aquí nadie podía salir, por la situación en la que estábamos. Nadie podía salir a las calles, ahora podemos salir a la hora que todos queramos”, señaló una vecina de la Colonia.

Advierten que ahora los niños y jóvenes salen sin ningún temor a recorrer los parques y disfrutar de los Cubos como un escenario de educación y diversión, todo mientras tratan de olvidar una temporada de terror a cargo de las pandillas.

Son en total 19 Cubos los que construyó el gobierno de Bukele en diferentes colonias de El Salvador y se espera ampliar la cobertura de estos espacios a más lugares, donde gracias a la intervención de la Fuerza Pública lograron erradicar las pandillas.