Mundo
Los talibanes, satisfechos con reunión con diplomáticos de occidente en Oslo
En busca de reconocimiento internacional y de fondos para su país, los talibanes dijeron este lunes en Oslo que su primera visita a Europa desde que tomaron el poder.
La delegación de los talibanes, dirigida por su ministro de Relaciones Exteriores, Amir Khan Muttaqi, llegó el sábado a Noruega para participar en tres días de reuniones con miembros de la sociedad civil afgana y diplomáticos occidentales.
“De estos encuentros, estamos seguros de que obtendremos un apoyo en los sectores humanitario, sanitario y educativo en Afganistán”, comentó. Las discusiones se realizan a puerta cerrada en el hotel Soria Moria, en una colina cerca de Oslo, y giran en torno a la urgencia humanitaria en Afganistán, donde millones de personas se ven amenazadas por el hambre, tras la interrupción de la ayuda internacional y con el país golpeado por varias sequías.
Los talibanes esperan que los occidentales desbloqueen las ayudas y también obtener alguna forma de reconocimiento. Ningún Estado ha reconocido por ahora al gobierno de los talibanes, islamistas fundamentalistas que fueron expulsados del poder en 2001, pero que volvieron a tomar las riendas en agosto.
Noruega ha insistido en que estas negociaciones, criticadas por expertos y por una parte de la diáspora afgana, “no son ni una legitimación ni un reconocimiento”, pero que era necesario “hablar con las autoridades que dirigen de facto el país”.
“Con el ánimo de resolver la crisis humanitaria (...) continuamos una diplomacia lúcida con los talibanes, marcada por nuestro interés constante por un Afganistán estable, respetuoso con los derechos e inclusivo”, dijo en un mensaje en Twitter el representante especial estadounidense Thomas West.
Expertos y miembros de la diáspora afgana criticaron que Noruega invitase a los talibanes, y muchos expresaron su rechazo con manifestaciones frente al Ministerio de Relaciones Exteriores, en Oslo. Desde agosto, la ayuda internacional que financiaba un 80 % del presupuesto afgano fue suspendida y Estados Unidos congeló 9.500 millones de dólares de fondos del Banco Central afgano.
“Manos manchadas de sangre”
La comunidad internacional espera ver cómo gobiernan los fundamentalistas, tras haber cometido atrocidades durante su primer régimen, entre 1996 y 2001. Pese a sus promesas de ser más tolerantes, las mujeres siguen estando en gran parte excluidas del mundo laboral en el sector público, y muchas escuelas para niñas permanecen cerradas.
Antes de reunirse con los talibanes, los diplomáticos occidentales se entrevistaron con miembros de la sociedad civil afgana, sobre todo militantes feministas y periodistas, quienes habían mantenido conversaciones sobre los derechos humanos con los talibanes la víspera.
Según una de esas activistas, Mahbuba Seraj, los talibanes “[las] reconocieron y [las] escucharon”. “Tengo esperanza. Espero una forma de comprensión recíproca”, declaró a la prensa. En la delegación talibana de 15 miembros, todos hombres, figura Anas Haqqani, uno de los jefes de la red Haqqani, considerada por Estados Unidos como un grupo terrorista. Su presencia en Oslo ha sido especialmente criticada, pues su clan es responsable de varios atentados mortíferos en Afganistán.
Según la prensa noruega, se ha presentado en Oslo una denuncia contra Anas Haqqani por crímenes de guerra. “Esto duele. Es como si Anders Behring Breivik (el neonazi noruego que mató a 77 personas en 2011) fuera a un país” como delegado, dijo el autor de la demanda, Zahir Athari, a la radiotelevisón NRK.
Con información de la AFP.