Luces, Kamala, acción: así arranca la candidata de la vicepresidenta en Estados Unidos, ¿podrá vencer a Trump?

Las últimas semanas en los Estados Unidos han estado más que agitadas en medio de un contexto polarizante no visto en décadas. A casi tres meses de las elecciones del 5 de noviembre, el país vive un ambiente en el que todos los días pasa algo distinto que sacude el mapa político. Los comicios de fin de año enfrentarán al expresidente republicano Donald Trump contra la que será la nueva candidata demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris.

Retrocediendo en el tiempo, todo el panorama cambió después del debate del 27 de junio entre el presidente Joe Biden y su archirrival, Donald Trump. En esta ocasión, el mandatario tuvo un desempeño muy deficiente. Tartamudeó, perdió el hilo de sus frases y se mostró distraído y cansado. Además, no pudo contrarrestar los ataques de su rival, quien lo criticó durante 90 minutos. Su nivel de confrontación no se acercó al que mostró hace cuatro años.

Biden, a sus 81 años, ya es el presidente más longevo en la historia de Estados Unidos, lo que hace que su intención de buscar otros cuatro años en el poder pareciera casi absurda. Originalmente, en 2020, se había planteado que él aspirara solo a un mandato para que, durante ese tiempo, el Partido Demócrata encontrara un sucesor. Pero ello nunca pasó, y el mandatario, más allá de su edad, refleja un gran deterioro físico y mental durante cada una de sus intervenciones públicas.

“Era inevitable que renunciara, de hecho, en alguna declaración que di a fines de año manifesté que la única opción para ganarle a Trump era con Kamala Harris o con Michelle Obama. En primer lugar, no había ni una sola encuesta que le diera la posibilidad del triunfo a Joe Biden. Segundo, a la presión política se sumaron todos los pesos pesados del partido demócrata, incluida Nancy Pelosi. Entiendo además que, en privado, incluso su gran amigo Barack Obama y su familia hicieron el mismo pedido; solo su esposa Jill lo estaba alentando a seguir en carrera”, dice el analista Javier Maza.

Pero la gota que derramó el vaso fue hace dos semanas, cuando un joven de 20 años intentó atentar contra la vida de Donald Trump, hiriéndolo en una oreja después de dispararle durante un discurso de campaña. El impactante hecho solo terminó impulsando al expresidente en las encuestas y hundiendo a Biden. El contraste era letal para el mandatario, mientras su rival asistía a conferencias después de ser herido de bala, él no asistía a sus eventos por estar resfriado.

“Hay un factor individual: la decisión de Biden de apartarse debido al diagnóstico de covid-19 que lo alejaba de sus votantes por la difícil situación de hacer campaña, pero también por honrar su palabra de retirarse si existiera un diagnóstico médico de gravedad. Creo que este último fue reforzado por el primero para obligar a Biden a salir de la contienda”, explica a SEMANA Manuel Camilo González, profesor de la Universidad Javeriana.

La presión de los mismos demócratas se convirtió en intolerable para Joe Biden, siete congresistas pidieron al mandatario dejar de lado su candidatura al ver que la carrera estaba casi perdida. Y, fruto de ello, terminó renunciando a lo que él calificó como “el honor de su vida”. Pero al pasar la antorcha no hubo duda alguna, la elegida fue Kamala Harris, su vicepresidenta.

“Biden prometió que sería un puente para que una nueva generación tomara el timón. Está bastante claro que sin el descontento que se extiende entre las filas demócratas, no se habría hecho a un lado. Sin embargo, creo que ha hecho lo correcto. Ha llegado la hora de un nuevo liderazgo, más joven”, dice el Dr. Dorian Kantor, profesor de Relaciones Internacionales y Ciencias Políticas de la Universidad Javeriana.

Al cierre de esta edición, Kamala Harris aún no es oficialmente candidata por el Partido Demócrata, pero esto parece ser solo cuestión de tiempo, dado que cuenta con un apoyo casi unánime dentro de su movimiento y más de tres cuartas partes de los delegados. Esto la posicionará como la elegida para intentar vencer a Donald Trump.

¿Cómo parte Kamala?

Una semana después de la renuncia de Biden, Kamala Harris es la nueva estrella del Partido Demócrata, ya que es la última esperanza de dicho movimiento para poder conservar la Casa Blanca. Si bien Trump parte con una gran ventaja, la esperanza es que ahora pueda remontar la ventaja en los meses que quedan. Algo que hasta ahora, parece que ha iniciado con el pie derecho a pesar de llevar apenas una semana en campaña.

Uno de los grandes desafíos es el económico; sin embargo, la vicepresidenta Kamala Harris logró recaudar 81 millones de dólares en las primeras 24 horas de su candidatura a la presidencia por el Partido Demócrata, según informó su campaña, algo que es una cifra récord. Además, reportaron que han sido un total de 888.000 donantes en el primer día, de los cuales el 60 por ciento era la primera vez que donaban para esta campaña.

Los medidores hasta ahora son las encuestas, que muestran cómo el aterrizaje de Kamala Harris en el panorama electoral ha sacudido el tablero político. Por ejemplo, el más reciente sondeo de Reuters pone a la vicepresidenta dos puntos por encima del magnate, teniendo ella 44 por ciento y su rival el 42. En las encuestas en las que peor la ponen está a apenas tres puntos de diferencia del republicano, algo destacable para una candidata que únicamente lleva una semana en campaña.

“Estamos hablando de una campaña de horas, donde ni siquiera ha tenido la posibilidad de hacer un evento grande. O sea, se está midiendo simplemente el entusiasmo ciudadano y eso es bien importante. Eso no lo teníamos con Biden, yo no exagero cuando digo que la elección que había con Biden terminó y comenzó una nueva elección, un nuevo proceso electoral con Kamala Harris”, asegura Maza a SEMANA.

“Las últimas grandes encuestas de opinión pública han mostrado que Trump ha perdido 5 puntos de ventaja sobre los demócratas. Sigue liderando Harris, pero dependiendo de la encuesta, su ventaja está dentro del margen de error”, explica Kantor.

Los analistas aseguran que muestra de las grandes posibilidades que tiene Harris para ganar la elección es el supuesto miedo que ha mostrado Donald Trump después del anuncio de la vicepresidenta de presentar su aspiración. Los republicanos han corrido a asegurar que el cambio de Biden por Kamala es ilegal y que el presidente debería seguir aspirando, un síntoma de que era más fácil ganarle al octogenario mandatario que a su mano derecha.

“Las posibilidades las tiene y creo que la adhesión de sus rivales dentro del partido demócrata, expresidentes y la disidencia republicana de Nikki Haley le dan margen para vencer a Trump. Ciertamente será un escenario muy polarizado, pero si logra mantener a los demócratas unidos tras la elección de su fórmula vicepresidencial tendría buenas opciones de vencer a Trump, quien debe lidiar no solo con rehacer su estrategia, sino con la disidencia republicana”, explica González a SEMANA.

Harris no es precisamente una política de larga carrera, ya que fue fiscal de San Francisco de 2004 a 2011, para luego ser fiscal de California desde 2011 a 2017. Luego fue senadora, prometiendo apaciguar las duras políticas migratorias de Donald Trump y se convirtió en una fuerte crítica del mandatario, a pesar de que este le había donado 5.000 dólares para su reelección como fiscal en 2014. En 2020 intentó ser candidata presidencial, pero naufragó en las primarias y terminó convirtiéndose en la fórmula vicepresidencial de Joe Biden.

En un eventual mandato de esta mujer, se podría esperar continuidad con respecto al Gobierno Biden, sabiendo que no es probable que el programa cambie mucho a tan solo meses de las elecciones. Los puntos claves podrían estar en torno a la creación de empleo, así como el control de la inflación, las mejoras de la seguridad social y más impuestos a las empresas más grandes. Pero para buscar votos, es probable que tenga que analizar posiciones en temas como la migración.

La carrera presidencial parece reiniciarse, y si Donald Trump no presta atención, podría perder una elección que hace solo unas semanas creía ganada.

Mientras tanto, Kamala Harris comienza su campaña con buen pie, aunque en desventaja. A esta contienda aún le quedan poco más de tres meses, y cualquier cosa podría suceder, considerando el contexto tan ambivalente que ha vivido Estados Unidos en los últimos meses, en los que ha registrado un proceso electoral altamente polarizado.