MUNDO
Macron llama “sediciosos” a críticos de la reforma pensional; en las calles no lo bajan de “mentiroso”
La tensión explotó cuando el presidente Macron y su primera ministra, Élisabeth Borne, anunciaron la puesta en marcha de la reforma por decreto.
El presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró este miércoles que quiere ver en vigor su impopular reforma de las pensiones “para finales de año” y calificó de “sediciosos” a los manifestantes que endurecieron las protestas desde su adopción por decreto.
“Esta reforma es necesaria. No me hace feliz. Hubiera preferido no hacerla”, aseguró el mandatario liberal en una entrevista en las principales cadenas de televisión, la privada TF1 y la pública France 2, asumiendo la “impopularidad” de la medida.
Francia vive un contexto social muy tenso, con una ola de protestas espontáneas, marcadas por la violencia, desde el jueves y su entrevista no parece que vaya a calmar los ánimos, la víspera de una nueva jornada de movilización ha llamado de los sindicatos.
Sus declaraciones son “un desprecio para los millones de personas que manifiestan”, dijo Philippe Martínez, líder del sindicato CGT. Macron “ha echado más brasas a un asador bien prendido”, estimó por su parte el jefe del Partido Socialista, Olivier Faure.
El gobierno enfrenta desde enero un fuerte rechazo a su plan de retrasar la edad de jubilación de 62 a 64 años para 2030 y de adelantar a 2027 la exigencia de cotizar 43 años, y no 42, para cobrar una pensión completa.
Pero la tensión explotó el jueves cuando Macron y su primera ministra Élisabeth Borne anunciaron su adopción por decreto, ya que temían perder la votación en la Asamblea Nacional (cámara baja), incluso con el apoyo de la oposición de derecha.
Desde ese día, París y otras ciudades registran cada noche protestas no declaradas, en las que manifestantes, en su mayoría jóvenes, queman contenedores y otros elementos en su pulso con la policía.
“No toleraremos ningún desbordamiento”, advirtió Macron, que calificó de “sediciosos” a estos manifestantes y los comparó con quienes asaltaron el Capitolio en Estados Unidos en 2021 y las instituciones en Brasil en enero.
La víspera, en una reunión con los legisladores oficialistas, el mandatario ya advirtió que la “muchedumbre” y los “disturbios” no tenían “legitimidad” sobre los representantes del pueblo, unas declaraciones criticadas incluso por sus aliados.
Las fuerzas de seguridad se encuentran no obstante en el punto de mira por los cientos de detenciones practicadas desde el jueves, que en la gran mayoría de los casos se saldan con una liberación sin cargos, y por los métodos usados para controlar las protestas.
Amnistía Internacional alertó este miércoles del “uso excesivo de la fuerza de forma generalizada” y de “las detenciones arbitrarias”, preocupaciones ya expresadas por la oposición de izquierdas, abogados, magistrados e incluso la defensora del pueblo.
🇫🇷 | AHORA: El presidente francés Macron sobre su reforma de pensiones: "Hemos trabajado en esta reforma desde hace tiempo. Ahora vamos a desarrollarla y aplicarla".
— Alerta News 24 (@AlertaNews24) March 22, 2023
pic.twitter.com/Nr3kgwIq96
¿Qué salida?
Más allá de la reforma, Emmanuel Macron se juega poder aplicar el programa de su segundo mandato que corre hasta 2027, por lo que su entrevista fue muy seguida para conocer sus intenciones y ver si admite algún error, como esperan los observadores.
El jefe de Estado reconoció que su único error fue “no conseguir convencer” sobre la reforma, que espera aplicar “para finales de año” y que busca evitar un futuro “déficit” en la caja de las pensiones. Ahora la examina el Consejo Constitucional.
Los observadores consideraron un fracaso la adopción por decreto de esta reforma crucial para Macron, que intentó en su primer mandato adoptar una, ya que dificultaría la aprobación de nuevos proyectos, en un contexto de falta de mayoría absoluta.
Una vez descartado disolver la Asamblea, someter a referendo la reforma o remodelar el gobierno, como pedía la oposición, Macron encargó a la primera ministra “construir un programa de gobierno” y “ampliar la mayoría”.
Símbolo de esta nueva situación, el gobierno paralizó una reforma migratoria que debía empezar a debatir el Senado y que dividirá ahora en varias partes para facilitar su adopción, ante el rechazo de la derecha a la regularización de trabajadores sin papeles.
Macron fue reelegido hace casi un año, gracias al cordón sanitario contra su rival ultraderechista Marine Le Pen, con un programa reformista y liberal con el que espera ahora pasar página del conflicto de las pensiones.
Pero la contestación está llamada a continuar. Las acciones se diversificaron en los últimos días con el corte puntual de los accesos a grandes ciudades, como este miércoles en Marsella, bloqueo de universidades y liceos, invasión de estaciones de trenes o basura acumulada en París, entre otras.
*Con información de AFP.