MUNDO

Los McCann reviven la esperanza de encontrar a Maddie 13 años después

Gerry y Kate McCann quieren dar con el paradero de su hija, quien desapareció el 3 de mayo de 2007 cuando dormía en un hotel del Algarve, zona turística de Portugal.

4 de junio de 2020
"No han perdido la esperanza de encontrarla viva, a pesar del paso del tiempo", sin embargo "son realistas", afirmó el vocero de la familia. | Foto: Francisco Leong, AFP / Policía Portugal

Maddie McCann volvió a escena tras la publicación de un documental de Netflix que narra la búsqueda incansable de sus padres por encontrar a la pequeña de 3 años que desapareció en Praia da Luz, en la región de Algarve (Portugal), el 3 de mayo de 2007.

El caso ha dado interminables vueltas a lo largo de los últimos 13 años, pasando por la acusación de sus padres como presuntos homicidas de la niña, la descripción de un hombre que se la habría llevado de la cama en la que dormía y hasta la posibilidad de haber sido raptada para tráfico de personas con fines de prostitución.

Aunque cada hilo de la investigación ha sido infructuoso, los padres de Maddie, Gerry y Kate McCann, no pierden la esperanza de encontrarla con vida en algún momento. 

Este miércoles se conoció que la policía alemana tiene un nuevo sospechoso en la mira. Se trata de un delincuente sexual de 43 años que ya ha sido condenado por abuso de menores. Pese a no ser revelada su identidad, las autoridades habrían encontrado a este hombre gracias a la colaboración de Reino Unido, Portugal y particularmente a la información recibida por Scotland Yard, diez años después de la desaparición.

El hombre vivió y trabajó entre 1996 y 2007 en el sur de Portugal, donde habría cometido varios delitos, en particular robos en hoteles y apartamentos.

La policía alemana pidió la colaboración de testigos, con la esperanza de lograr avances que lleven a la resolución de la desaparición que mantuvo a Europa en vilo en el verano de 2007. 

Aquel año, con la ayuda de celebridades como el futbolista inglés David Beckham y el portugués Cristiano Ronaldo, los padres de la niña, lanzaron una muy mediática campaña de petición de ayuda internacional. La difusión fue tal, que el mismo papa Benedicto XVI recibió a Gerry y Kate en su despacho para bendecir la foto de Maddie.

"Esperanza de encontrarla viva" 

Después de tanto tiempo, esta pista en Alemania abre una nueva luz. Gerry y Kate McCann "están agradecidos y se congratulan por este llamamiento a testigos", dijo su portavoz, Clarence Mitchell, el jueves a la BBC.

"Solo quieren saber qué le pasó a su hija, averiguar la verdad y llevar a los responsables ante la justicia", agregó.

"No han perdido la esperanza de encontrarla viva, a pesar del paso del tiempo", sin embargo son realistas", afirmó.

"De las miles de pistas y potenciales sospechosos mencionados en el pasado o discutidos en los medios, nunca ha habido nada tan claro, procedente no de una fuerza policial, sino de tres", subrayó Mitchell.

Hace 13 años, los McCann habían recaudado cuantiosos fondos, ofrecieron millonarias recompensas a cambio de información, contrataron a detectives privados y dieron incontables ruedas de prensa.

Hubo reproches a la eficiencia de la policía portuguesa, uno de cuyos inspectores jefes acabó siendo despedido. Y el caso, que dio mil giros, se acabó volviendo contra la pareja, a la que se acusó de haber sedado a su hija para salir a cenar con unos amigos en los alrededores. 

Fueron detenidos e investigados por homicidio, pero finalmente exonerados.

En 2009, unos detectives privados afirmaron que buscaban a una mujer "un poco parecida a Victoria Beckham", con acento australiano, que habló con un hombre británico fuera de un bar en Barcelona tres días después de la desaparición de la pequeña en Portugal. Una extraña línea de investigación que también cayó en saco roto.

La policía británica inició asimismo su propia investigación en 2013.  Cientos de personas han sido interrogadas a lo largo de los años, tanto por la policía portuguesa como por Scotland Yard. 

Ahora, la fiscalía de la localidad de Faro, en el sur de Portugal, aseguró el miércoles que "la investigación continúa, concretamente interrogando a testigos".

*Con información de AFP