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Más de 50 muertos habría dejado un ataque contra una cárcel en Ucrania
El Gobierno de Ucrania responsabilizó a las fuerzas rusas del ataque, mientras prorrusos acusaron a tropas locales.
Las autoridades de la autoproclamada República Popular de Donetsk elevaron este viernes, 29 de julio, a más de 50 el número de muertos a causa de un ataque atribuido al Ejército de Ucrania a una cárcel en la localidad de Yelenovka, si bien las fuerzas armadas de ese país negaron haber llevado a cabo un ataque en la zona tras señalar a las fuerzas rusas como responsables.
“En Yelenovka, 53 personas murieron y otras 75 resultaron heridas”, informó el Centro de Defensa Territorial de la República Popular de Donetsk a través de un mensaje en su cuenta en Telegram. Indicó que la cárcel acogía a “presos de guerra ucranianos”.
Asimismo, señaló que el ataque habría sido llevado a cabo con un HIMARS, un sistema de cohetes de lanzamiento múltiple, e insistió que “el régimen criminal de Kiev destruye adrede a milicianos ucranianos que se han rendido para ocultar las trazas de los crímenes de guerra cometidos contra la población civil del Donbás”.
El organismo hizo énfasis en que las autoridades ucranianas “fuerzan al resto a continuar las hostilidades y no rendirse ante las tropas de la República Popular de Donetsk”.
El líder de la autoproclamada república, Denis Pushilin, señaló que en las instalaciones había más de 190 presos, tras negar que entre ellos hubiera ciudadanos extranjeros, según la agencia rusa de noticias Interfax.
Por su parte, el Ministerio ruso de Defensa precisó que la prisión albergaba, entre otros, a miembros del batallón de Azov, una división que ganó notoriedad por su defensa de la ciudad de Mariúpol frente al avance de las tropas rusas y que Moscú afirma se trata de una formación neonazi.
Afirmó que la “sangrienta provocación del régimen de Kiev” estaba destinada a disuadir a las tropas ucranianas de deponer las armas y rendirse.
“Esta atroz provocación se llevó a cabo para intimidar a los militares ucranianos”, dijo ese despacho en un comunicado.
Ucrania niega ser autor del ataque y acusa a Rusia
Por su parte, Ucrania acusó a Rusia de estar detrás del ataque al señalar que tropas de ese país “cometió otro horrendo crimen de guerra al bombardear un centro penitenciario en la región ocupada de Olenivka donde mantenía retenidos a prisioneros de guerra ucranianos”, según dijo el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba, en Twitter.
“Pido a todos los socios que condenen firmemente esta brutal violación del Derecho Humanitario y reconozcan a Rusia como un Estado terrorista”, sostuvo en concordancia con el pronunciamiento del asesor de la presidencia ucraniana, Mijailo Podoliak.
Este señaló que “las tropas rusas han llevado a cabo un ataque cuidadosamente planificado” y que “no hay objetivos militares operativos para el Ejército ucraniano” en esta localidad.
Aseguró que las fuerzas ucranianas “tienen todas las herramientas para una identificación precisa de los objetos que van a ser destruidos”; ha argumentado que “la escala y la velocidad de la campaña de información de los propagandistas rusos indican que fue una acción planificada y organizada”.
“Sabemos que algunos de los capturados fueron trasladados a las instalaciones unos días antes del crimen”, indicó.
Agregó que “se trata de una operación de falsa bandera clásica, cínica y elaborada”, al acusar a Rusia de “ocultar pruebas de la escala de los crímenes de guerra y las torturas de Rusia, afectar a los acuerdos para el intercambio (de presos) y desacreditar a las Fuerzas Armadas de Ucrania”.
“Los histéricos comunicados preventivos de Rusia, sobre que el golpe fue efectuado contra defensores ucranianos capturados, buscan crear una resonancia en Ucrania y volver a la población de varios países contra nuestras Fuerzas Armadas”, manifestó el funcionario al indicar que “las identidades reales de los muertos serán determinadas por los servicios de Inteligencia de Ucrania”.
Por último, manifestó que “los rusos han matado de forma deliberada, cínica y en masa a ciudadanos ucranianos capturados, lo que será investigado por la Fiscalía y equipos internacionales”.
“Es obvio que, ante la cercanía de derrotas tácticas, Rusia recurrirá a provocaciones caníbales para promoverlas en los mercados globales”, puntualizó, al reclamar una “respuesta firme” de Naciones Unidas para que “Rusia sea excluida de todas las instituciones internacionales”.
Entre tanto, el Estado Mayor ucraniano negó que tropas de ese país hayan sido las autoras del ataque al advertir que “las fuerzas armadas de Ucrania, que adhieren plenamente a los principios y normas del derecho internacional humanitario, nunca han llevado a cabo ni llevan a cabo bombardeos de infraestructuras civiles, especialmente en lugares donde es probable que se encuentren prisioneros de guerra”.
A través de un comunicado señaló que “las fuerzas armadas ucranianas no realizaron ningún ataque con misiles ni artillería en la zona de la prisión de Olenivka”.
También acusó al Ejército ruso de estar detrás del bombardeo de la prisión de Olenivka, donde se encontraban prisioneros de guerra ucranianos.
“De este modo, los ocupantes rusos persiguen sus objetivos criminales: acusar a Ucrania de haber cometido crímenes de guerra y encubrir las torturas de los prisioneros y las ejecuciones que llevaron a cabo allí”, aseguró el Estado Mayor ucraniano.
*Con información de Europa Press y AFP.
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