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Metida de pata: presidente de Turquía se molestó por ver “la bandera LGBTI” en la ONU, sin embargo, los colores reflejaban otra cosa. Esto fue lo que pasó
El jefe de Estado de la nación asiática es conocido por ser ultraconservador.
La 78° Asamblea General de Naciones Unidas ha estado marcada por varios episodios que involucran a varios miembros del cuerpo diplomático, como el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, quien se mostró incómodo luego de presenciar los colores de la bandera de la comunidad LGBTI en el recinto de la Organización de las Naciones Unidas, en Nueva York.
En declaraciones a medios turcos, el mandatario nacional expresó su molestia por el uso de “los colores LGBT” en los escalones y demás lugares del recinto del organismo. De igual manera, el turco declaró que esta clase de manifestaciones son “intentos de debilitar a la familia a través de movimientos perversos para hacer colapsar a la sociedad”.
Erdogan fue más allá al aseverar que quiere discutir ese asunto con el secretario general de la ONU, António Guterres, expresando que varios líderes se sintieron incómodos con la decoración LGBTI, señalando que “ahora mismo, algunos líderes están a favor de los LGBT y otros están en contra de los LGBT… Tienen tanto derecho en esas escaleras (de acceso a la ONU) como los que están en contra de los LGBT”.
Erdogan vs. colectivos LGBTI
El presidente turco no ha ocultado su férrea oposición a la comunidad LGBTI debido a su corriente conservadora y religiosa con la cual ha liderado a Türkiye desde el 2003. Durante su mandato, Erdogan ha endurecido su discurso frente al colectivo de diversidad sexual a tal punto de incentivar el cierre de organizaciones LGBTI en el país y dar garantía de proteger la “institución familiar” en la constitución nacional, indicó Canal 26.
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El mandatario está más que decidido a entablar una reunión con Guterres debido a que, según él, se trata de una “cuestión humanitaria”, ya que “hay gente que se siente molesta” por diversos actos que inducen a un apoyo desmesurado a la comunidad LGBTI desde el organismo de Naciones Unidas.
A pesar de que la homosexualidad en Türkiye es legal desde 1858 (cuando aún existía el imperio otomano) demostrando una secularidad política que permaneció en el territorio hasta la llegada de Erdogan, el actual presidente turco ordenó restricciones a la celebración del Orgullo Gay en Estambul en 2023, demostrando la radicalización de sus acciones en contra del libre desarrollo de esta comunidad. Asimismo, Erdogan indicó que en la nación no tendrán cabida movimientos “desviados” que atenten contra la familia tradicional y la juventud.
No todo es lo que parece
A pesar del malestar de Erdogan por ver, lo que él consideraba, la bandera de la comunidad LGBTI, lo que en realidad quería dar a la ONU a conocer por medio de una serie de colores, era la representación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), una idea dedicada para la promoción de este tipo de desarrollo a nivel mundial. Se desconoce si Erdogan se enteró del malentendido.
En total, son 17 los objetivos planteados por la ONU “para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que para el 2030 todas las personas disfruten de paz y prosperidad”, citó la página web del organismo, los cuales se adoptaron en el 2015 tales como:
- Fin de la pobreza.
- Hambre cero.
- Salud y bienestar.
- Educación de calidad.
- Igualdad de género.
- Agua limpia y saneamiento.
- Energía asequible y no contaminante.
- Trabajo decente y crecimiento económico.
- Industria, innovación e infraestructura.
- Reducción de las desigualdades.
- Ciudades y comunidades sostenibles.
- Producción y consumo responsables.
- Acción por el clima.
- Vida submarina.
- Vida de ecosistemas terrestres.
- Paz, justicia e instituciones sólidas.
- Alianza para lograr los objetivos.
Asimismo, el organismo internacional aboga para que, con estos 17 puntos clave, se acabe “con la pobreza, el hambre, el sida y la discriminación contra mujeres y niñas”.
