México tendría más muertes por covid-19 que las reportadas por el Gobierno

De acuerdo con la información proporcionada por el Instituto Nacional de Estadística (Inegi), México registró 108.658 muertes por covid-19 hasta agosto de 2020, lo que representa un 68 % más decesos que los reportados hasta entonces por el Gobierno.

Al 31 de agosto pasado, la Secretaría de Salud (ministerio) había reportado 64.414 fallecimientos por el nuevo coronavirus, que de acuerdo con un comunicado del Inegi se convirtió en la segunda causa de muerte en el país el año pasado. La primera defunción fue informada el 18 de marzo.

Desde entonces, y hasta el martes, México, con 126 millones de habitantes, acumulaba 152.016 fallecimientos por covid-19, según el Gobierno, aunque su cifra estimada, que incluye casos sospechosos, se ubica en 171.378. Es el cuarto país más castigado por la pandemia en números absolutos. A ello se suman 1.788.905 contagios confirmados hasta el martes.

“Muchas personas no están muriendo en hospitales, están muriendo en sus casas. El 58 % muere fuera de los hospitales, lo cual puede explicar en parte esta diferencia”, le dijo Édgar Vielma, director general de Estadísticas Sociodemográficas del Inegi, a Radio Fórmula.

El gobierno y el Inegi aplican, además, metodologías distintas, por lo que las cifras definitivas de mortalidad de 2020 serán anunciadas en octubre próximo, tras un cotejo entre ambos registros.

La entidad precisó, en tanto, que el “exceso de mortalidad” en México en los primeros ocho meses de 2020 fue del 37,9 % con respecto al mismo periodo de 2019, con un total de 673.260 fallecimientos, cuando según la proyección estadística se esperaban 488.343.

“Por problemas de salud, las tres principales causas de muerte a nivel nacional son: enfermedades del corazón, con 141.873 casos (20,8 %); covid-19 (108.658, 15,9 %), y diabetes mellitus (99.733, 14,6 %)”, detalló la entidad.

El 24 de diciembre, México fue el primer país latinoamericano en comenzar a vacunar contra la covid-19, que incluso alcanzó al presidente Andrés Manuel López Obrador, aislado desde el domingo último. La primera vacuna utilizada en el país corresponde a la del dúo farmacéutico alemán-estadounidense Pfizer/BioNTech.

México también participa en la producción de la vacuna desarrollada por el laboratorio británico AstraZeneca y la Universidad de Oxford. Además, el lunes, López Obrador dijo que el país recibiría 24 millones de dosis de la vacuna rusa Sputnik V.

Mientras tanto, la situación no mejora en el resto del mundo. El coronavirus mató a más de 18.000 personas en el mundo en las últimas 24 horas, un récord, mientras que las nuevas cepas británica y sudafricana prosiguen su expansión imparable.

En el frente abierto por la vacuna, esperanza de muchos para atajar la epidemia, el británico AstraZeneca estaba sumido este miércoles en un tenso diferendo con la Unión Europea (UE).

Cada día, la situación empeora más: el número de contagios en el mundo ha superado los 100 millones y, según dijo este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS), las nuevas variantes del virus continúan propagándose. La británica está presente ya en 70 países y la sudafricana, en 31.

Además, el martes se registraron 18.109 decesos en el planeta, un récord desde que estalló la pandemia de covid-19, según un recuento realizado el miércoles por la AFP a partir de balances oficiales.

La cifra confirma una tendencia observada desde principios de mes: la mortalidad se está acelerando, los umbrales de fallecimientos diarios se superan más rápidamente y la curva se va aplanando en cifras cada vez más altas (de media, 14.000 decesos diarios desde el 22 de enero, contra los 10.000 de finales de noviembre).

En total, la covid-19 ha dejado 2,16 millones de muertos en el mundo. Europa y América Latina y el Caribe son las dos regiones del mundo más afectadas, con 713.000 y 580.000 fallecidos, respectivamente.

A nivel nacional, Estados Unidos es el país que más muertos registró (425.227), seguido de Brasil (218.878), India (153.724), México (152.016) y Reino Unido (100.162). Esta situación tiene en jaque a los gobiernos de todo el globo.

En el Reino Unido, el Gobierno anunció la imposición de una cuarentena en hoteles para los residentes que lleguen al país procedentes de un país considerado de riesgo; una estancia que tendrán que pagarse de su bolsillo.