MODERNAS MATA HARI
La famosa espía Mata Hari, que usaba sus encantos para extraer secretos de los franceses
de la Primera Guerra Mundial, tuvo más influencia de la que jamás se hubiera imaginado. La prueba está en un
memorando del departamento de energía de Estados Unidos a su personal, según el cual deben ser
reportados a los superiores los contactos sexuales sostenidos con personas provenientes de países que
puedan tener armas nucleares. Pero aunque advierte que "contactos ocasionales de una sola vez no deben
incluirse", deben ser tenidas en cuenta las amistades no sexuales luego de haber compartido información
personal como problemas familiares o maritales, dificultades financieras o frustraciones profesionales. Nadie
sabe si esa estrategia servirá para controlar la confiabilidad de los 67.000 empleados de la entidad.