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“La gente está protestando contra una realidad diaria de miseria”: Moises Naim
El analista y escritor venezolano habló con Semana.com sobre la importancia de la marcha del 19 de abril y el presente que se vive en Venezuela.
Semana.com: La “mamá de las marchas” es el resultado de una serie de manifestaciones que se dieron en las últimas semanas y fue agendada en un día especial. ¿Cuál es la importancia de esta marcha?
Moisés Naím: El 19 de abril es una fecha patria en Venezuela que tiene que ver con la independencia del país, pero esto es solamente un símbolo. La realidad es que hay un pueblo desesperado, que está pasando hambre, que está siendo asesinado, que no encuentra medicinas, en donde no hay leche y los niños crecen con deficiencias terribles. Es un pueblo que ya no aguanta más.
Semana.com: ¿En qué se diferencian estas manifestaciones que se han dado en los últimos días con las que se llevaban a cabo hace uno o dos años?
M.N.: Todo esto es acumulativo. Cada marcha se alimenta de la otra y así una y otra vez. Lo bueno de esto, y que es importante resaltar, es el tesón de la gente. Que a pesar de que son apaleados y gaseados; de que les disparan e incluso los asesinan, siguen ahí. El pueblo, en paz y sin violencia, continúa caminando por las calles pidiendo libertad.
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Semana.com: Las manifestaciones de estas semanas han tenido un preocupante saldo negativo. ¿Por qué se ha recrudecido esta violencia?
M.N.: Mientras más desesperado está el gobierno más vamos a encontrar la represión recrudecida. Los gobiernos temen de la protesta civil y las protestas ciudadanas y cuando ven que sus bombas lacrimógenas no detienen a la gente y ven que la gente está en la calle, pues es cuando más van a recrudecer su represión y su violencia.
Semana.com: ¿Y a qué le teme Maduro?
M.N.: No hay nada a lo que un dictador como Nicolás Maduro le tenga más miedo que a las calles y a las redes. Porque la realidad es que para él es muy peligrosa la combinación de la gente en la calle que está organizada a través de las redes sociales. Eso es lo que está pasando y es una fuerza imparable. Ya estamos viendo que la están tratando de contener como sea.
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Semana.com: ¿Es este el peor momento de Nicolás Maduro desde que está en el gobierno?
M.N.: Sí, no hay duda. La imagen negativa de Maduro es de mas del 80% y hay un repudio universal de los venezolanos hacia él, inclusive de miembros de su mismo partido o corriente política, porque están pasando hambre y miseria. Pero igual que pasa con otros dictadores, ellos no dependen de la popularidad para mantenerse en el poder. Dependen de la fuerza y dependen de que los militares estén dispuestos a asesinar a sus compatriotas. Esto con tal de mantener en el poder a un presidente como Maduro.
Semana.com: Nicolás Maduro cuenta con una baja popularidad a pesar de ser el heredero designado por Hugo Chávez. ¿Esta situación en Venezuela es solo culpa de Maduro?
M.N.: No. Maduro no ha cambiado ni una sola política de las que impuso Chávez en Venezuela. Maduro es una extensión de Chávez pero con menos carisma y menos precios del petróleo. Es menos inteligente que Chávez, menos carismático, es peor político y tiene menos plata. La situación actual en el país no responde a decisiones que haya tomado o no Maduro, sino a las políticas que impuso Hugo Chávez y que fueron continuadas por Nicolas Maduro. Si Hugo Chávez estuviese en gobernando también sería mucho más impopular de lo que fue. La gente está protestando contra una realidad diaria de miseria, de hambre y de asesinatos. Eso lo afectaría sin duda.
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Semana.com: La decisión de armar a los milicianos ha generado un ambiente de tensión y de miedo a la protesta. ¿Es esto otra medida para neutralizar las protestas?
M.N.: Bueno, de hecho la situación está tan grave en el país que muchos de ellos están vendiendo los fusiles para comprar comida. Pero lo cierto es que estos movimientos son solo trucos y pataletas de ahogado de un régimen que se siente presionado por la realidad.
Semana.com: Esta serie de manifestaciones que comenzaron en los primeros días de abril han logrado unir a muchos opositores que estaban internamente divididos. ¿Cuál será el alcance de estas protestas?
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M.N.: Estas son quizás las marchas más grande que hemos visto en mucho tiempo y destaco que ninguna de las medidas de intimidación de represión y de amenazas que ha tratado de hacer el gobierno por todos los medios ha logrado parar a la gente. A pesar de que pararon el metro y el transporte público y de las intimidaciones de los motorizados y milicianos armados, la gente está en la calle y está marchando.
Semana.com: La decisión del Tribunal Supremo de asumir las competencias del Parlamento fue una decisión que mostró la vulnerabilidad del sistema venezolano. ¿Qué puede hacer desde adentro la oposición para seguir peleando?
M.N.: Hay que hacerlo todo, no hay que dejar ni una alternativa sin explorar. Hay que seguir luchando en la Asamblea, en los entes institucionales, en los ámbitos internacionales. Hay que pedir a los países de Latinoamérica que se preocupen y se ocupen por Venezuela. Toca seguir en la calle, en fin. Hay que hacerlo todo. No dejar ninguna tecla sin tocar.