VENEZUELA

Moneda digital: la arriesgada promesa de Maduro para salvar la economía venezolana

Maduro sueña con una economía ciento por ciento digital. Pero enfrenta la hiperinflación, un índice de pobreza del 96 por ciento y la poca conectividad en parte del territorio venezolano.

9 de enero de 2021
Maduro quiere fortalecer el petro, su moneda digital. Sería la opción para que la digitalización no se realice en moneda extranjera.

En su lista de deseos para el año que comienza, Nicolás Maduro ha pedido convertir la economía venezolana en la primera ciento por ciento digital del planeta. El anuncio lo hizo en entrevista con el canal Telesur, pocos días antes de que se posesionara la nueva Asamblea Nacional, de mayoría chavista, que si bien no es reconocida por la comunidad internacional, en el ámbito local le permite al oficialismo retomar el poder del único órgano estatal que aún quedaba en manos de la oposición. “Nosotros vamos, este año 2021, hacia una economía digital más profunda, en expansión. He puesto la meta: ciento por ciento economía digital, que todo el mundo tenga sus métodos de pago en tarjeta de débito, de crédito” y añadió a su lista de pendientes que desaparezca del todo el dinero en efectivo, empezando por los bolívares, cada vez menos valiosos.

El plan del mandatario no tiene precedentes exitosos en el mundo, y para presentarlo acudió a una estrategia recurrente: acusar a otros países por sus problemas de hiperinflación, que han devaluado su moneda en 99 por ciento en los últimos tres años y que se habría disparado 5.790 por ciento en los últimos 12 meses, según la agencia de noticias Bloomberg. “Tienen una guerra contra nuestra moneda física”, dijo acusando de sus males a las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos y a la caída del precio del petróleo. Pero es justamente el dólar estadounidense el que ha permitido una solución a los venezolanos que, de acuerdo con el Gobierno, realizan el 18,6 por ciento de todas las transacciones en dólares, el 77,3 por ciento en bolívares con tarjetas de débito y el 3,4 por ciento con billetes de bolívares. Las fuentes no oficiales llegan a situar la cifra de pagos en efectivo con dólares en Venezuela en más del 65 por ciento.

En una movida bastante inusual, el mandatario también anunció que permitirá a los bancos abrir cuentas en divisas para pagar con ellas bienes y servicios, una oferta que funciona desde 2019, pero de manera muy reducida, ya que no existe un sistema de compensación que garantice las transacciones en dólares. Asimismo, aseguró que creará fórmulas para realizar transacciones con cuentas corrientes y de ahorro en dólares. Esta última medida podría significar la dolarización de la economía venezolana, lo cual rechazó Maduro en su aparición pública a principios de enero. “Venezuela tiene su moneda y la vamos a defender”, afirmó negando una dolarización formal de la economía.

La apuesta del Gobierno venezolano consiste en fortalecer el petro, su moneda digital, lanzada en 2017 y que espera cobre más fuerza en este 2021. El petro, que estaría respaldado por petróleo, gas, oro y diamantes, es también la solución que ofrece el oficialismo para que la digitalización no sea en divisa extranjera y los venezolanos más pobres tengan acceso a moneda. Incluso, crearon en los últimos meses la aplicación PetroApp, para guardar y usar el petro, y que permite convertirlo en bolívares o dólares, aunque lo que el chavismo espera es que sea usado en transacciones digitales de tal manera que el billete poco a poco desaparezca.

Venezuela tiene a su favor estar desarrollando la legislación que permitiría la digitalización de su economía con garantías legales. También favorece que las compras por internet ahora son más fáciles y familiares por cuenta de la pandemia. Sin embargo, el índice de pobreza, que llegó a un doloroso 96 por ciento, y la escasez de conectividad a internet harán que la tarea no sea fácil para Maduro. Corre el riesgo de que su lista de deseos para 2021, por lo menos en materia económica, quede en suspenso.