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Motín en cárcel de Guayaquil cobró la vida de dos colombianos

En este centro de reclusión están privadas de la libertad 389 personas de nacionalidad colombiana.

19 de noviembre de 2021
Cárcel en Ecuador
Familiares de reclusos esperan noticias fuera de la penitenciaría Litoral luego de un motín, en Guayaquil, Ecuador. (AP Foto/Angel DeJesus) | Foto: AP

La masacre interna que lleva más de un mes en la Penitenciaría del Litoral de Guayaquil (Ecuador), y que dejó en el último motín 69 presos fallecidos y 25 heridos, cobró la vida de dos detenidos de nacionalidad colombiana.

Así lo informó el embajador embajador de Colombia en Ecuador, Manuel Enríquez Rosero, al diario El Tiempo, quien extraoficialmente mencionó la identidad de los colombianos asesinados: Carlos Eduardo Medina Jaramillo y Jefferson Enrique Villarreal Guzmán.

Según afirmó el diplomático colombiano se espera que el Sistema de Atención Integral a Privados de Libertad (SNAI) confirme los datos que maneja este despacho.

Medios de Ecuador han reseñado que en esta cárcel hay una población colombiana detenida de 389 personas; y en todo el país se registran 1.935 colombianos pagando condenas por varios delitos.

Madres a las afueras de la cárcel de Guayaquil preguntan a militares por sus hijos
Madres a las afueras de la cárcel de Guayaquil preguntan a militares por sus hijos | Foto: AFP

En lo que va de 2021, van tres motines grandes que mantienen en jaque a las autoridades carcelarias de Ecuador y al Gobierno del presidente Guillermo Lasso. El pasado 1 de octubre, Guayaquil trascendió en los medios mundiales por la crisis sin precedentes que dejó el primer enfrentamiento entre reos en el Centro de Privación de Libertad Guayas N.° 1, conocido como Penitenciaría del Litoral. En ese momento contabilizaron 119 muertos.

El comandante de la Policía, general Tannya Varela, informó sobre el trágico resultado de los choques entre bandas vinculadas con el narcotráfico y que han sumido al país en un caos penitenciario, considerado el más grave de Latinoamérica. Los presos intentaron invadir un pabellón con disparos y explosivos.

En ese momento, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia informó a la colectividad colombiana que por instrucciones de la Vicepresidente y Canciller, Marta Lucía Ramírez, establecieron contacto permanente con el Consulado de Colombia en Guayaquil para determinar si en los enfrentamientos carcelarios resultaron afectados ciudadanos colombianos.

La Cancillería puso a disposición canales de contacto para prestar la debida asistencia a familiares de algunos presos en Ecuador, en caso de requerirse.

“Sin embargo, debido a la difícil situación que se atraviesa, las autoridades de Ecuador aún no suministran información sobre la nacionalidad de los fallecidos ni de las personas heridas. Es importante destacar que el consulado estará informando a las familias inmediatamente se tenga algún reporte”, indicó el comunicado de la Cancillería de Colombia.

Reiteraron que desde Colombia, el Ministerio de Relaciones Exteriores ofrece toda su colaboración y solidaridad al Gobierno de Ecuador y a sus ciudadanos en estos momentos de dificultad. De igual forma, se suma a las voces que condenan estos hechos los cuales no se deben repetir.

Los más recientes enfrentamientos entre presos duraron casi un día, al entrar en escena otras bandas, de los bloques 7 y 12 de la misma prisión de Guayaquil.

“En este momento están ocurriendo nuevos incidentes en el interior de la Penitenciaría del Litoral (Guayas 1), se están produciendo ataques de un pabellón a otro”, expresó el vocero presidencial, Carlos Jijón, en Guayaquil, el 12 de noviembre.

El portavoz agregó que el presidente del país, el conservador Guillermo Lasso, quien lidera un comité de crisis en ese puerto, invitó a “sectores de la sociedad civil para empezar a organizar un diálogo al interior de la cárcel y poder detener la barbarie que está ocurriendo”.

Previamente, Pablo Arosemena, gobernador de la provincia del Guayas, en cuya jurisdicción está Guayaquil (suroeste), describió que fueron “cruces de bala muy intensos” y una “situación de salvajismo”.

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