México
Motín en una cárcel de México deja 56 presos heridos
Los hechos se dieron en la prisión del estado de Nuevo León.
Al menos 56 internos han resultado heridos, ninguno de gravedad, durante los disturbios ocurridos este viernes en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Apodaca 1, en el estado mexicano de Nuevo León.
El secretario de Seguridad Pública estatal, Aldo Fasci Zuazua, ha asegurado que en el centro penitenciario no había armas de fuego y que la pelea entre dos grupos de internos fue a golpes. El incidente terminó tras el ingreso de agentes de la fuerza penitenciaria.
“No hubo armas de fuego, las lesiones en la cabeza que tuvieron algunas personas privadas de su libertad, fueron provocadas por piedras y por golpes contra el suelo, fue a mano limpia”, ha explicado Fasci, según informa el diario mexicano ‘El Economista’.
Fasci ha relatado que la pelea comenzó por una disputa entre dos internos por 70 pesos. Luego llegó un grupo numeroso de internos para agredir a otro grupo, entraron en el dormitorio del líder de los presuntos extorsionadores y quemaron su colchón. El incidente terminó con la entrada de la fuerza penitenciaria en la prisión.
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Familiares de los presos han protestado frente a la cárcel porque había rumores de un posible traslado de algunos internos a otro centro penitenciario. Los familiares derribaron el portón principal de la cárcel y resultaron heridos tres familiares y un periodista.
Cabe mencionar que en México existen 447 establecimientos penitenciarios, que se distribuyen de acuerdo con la autoridad a cargo: cinco federales, 330 estatales, 103 municipales y nueve del gobierno del Distrito Federal.
De acuerdo con un estudio realizado por la Organización Nueva Sociedad (Nuso), la población penitenciaria se divide en 95% de hombres y 5% de mujeres, porcentaje similar al registrado en otros países. Del total, 56% ha sido sentenciado, en tanto que el 44% restante está integrado por detenidos sin condena, proporción que se ha mantenido más o menos constante a lo largo de la última década. “En ese aspecto, México se diferencia de la mayoría de los países latinoamericanos, que presentan porcentajes más elevados de presos sin condena”, señalan.
Entre las conclusiones a las que llegó la investigación se determinó que el problema del hacinamiento es particularmente grave en las prisiones del Distrito Federal y de la zona metropolitana, donde algunos establecimientos albergan a más de 9.000 internos. Para ejemplificar, la organización dice que alcanza con señalar que la mitad de la población detenida en las cárceles analizadas duerme en espacios que rebasan, en ocasiones por más del doble, el cupo para el cual fueron diseñados.
Andrés Manuel López Obrador, presidente del país, desde su campaña electoral aseguró que trazaría una política penitenciaria para disminuir las violaciones en derechos humanos en las cárceles mexicanas. Fue por ello que dio instrucciones para que se redactara un documento legal para permitir la puesta en libertad de los presos torturados, mayores de 75, enfermos crónicos mayores de 65 o que lleven sin sentencia más de 10 años por delitos leves.
“Es importante que se tome en cuenta que hay muchos detenidos que no tienen sentencia y que no solo es por delitos de fuero federal, también es fuero común y es la mayoría”, resaltó el presidente.
Esta medida permitiría encarcelar a personas que no han tenido un juicio por el potencial riesgo para la sociedad que representa el delito que se les acusa
Con información de Europa Press.