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Mujer acusada de asalto al Capitolio de EE. UU. dijo que quería dispararle a Nancy Pelosi “en el maldito cerebro”
La mujer se encuentra entre al menos 160 personas que han sido acusadas a nivel federal de delitos relacionados con el motín que dejó cinco muertos.
Fiscales federales de Estados Unidos dieron a conocer en las últimas horas la noticia sobre el arresto de dos mujeres en Pensilvania por haber participado en los disturbios en el Capitolio, el pasado 6 de enero.
Se trata de Dawn Bancroft y Diana Santos-Smith quienes, según informó The Washington Post, fueron arrestadas luego de que las autoridades federales conocieran el video en el que se les ve participando del asalto. Bancroft dijo: “Irrumpimos en el Capitolio (...), entramos, hicimos nuestra parte”. Y agregó: “Estábamos buscando a Nancy (Pelosi) para dispararle en el maldito cerebro pero no la encontramos”.
Según la publicación, el FBI aseguró que cuando las mujeres fueron entrevistadas, inicialmente negaron haber ingresado al Capitolio. Sin embargo, cuando les enseñaron el video de Bancroft, Santos-Smith admitió que mintió y dijo que ingresó al Capitolio para protestar, pero que no lo había planeado con anticipación. Asimismo aceptaron haber intentado deshacerse de los videos para tratar de evitar ser descubiertas por la Policía.
Las dos mujeres se encuentran entre al menos 160 personas que han sido acusadas a nivel federal de delitos relacionados con el motín que dejó cinco muertos. Entre ellos también se encuentran el partidario de QAnon, Jacob Anthony Chansley, también conocido como Jake Angeli o Q Shaman, y Dominic Pezzola, un conocido miembro del grupo nacionalista de extrema derecha Proud Boys.
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Varias agencias federales trabajan en una investigación a fondo de los sucesos del día 6 liderada por la oficina del FBI en Washington DC y el Departamento de Justicia y de la que se van conociendo más detalles a medida que pasan los días.
Sobre el caso, el fiscal interino de EE.UU. para el distrito de Columbia, Michael Sherwin, reveló el pasado 15 de enero que la investigación apunta a que el objetivo de la turba era “secuestrar y asesinar a legisladores”.
El diario The Washington Post ya había informado que un grupo de asaltantes llegó muy cerca de la oficina del vicepresidente Mike Pence, apenas un minuto después de que las fuerzas de seguridad lo hubieran trasladado a un lugar seguro.