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Mujer fue a dar a luz y salió con mano amputada, ¿qué fue lo que pasó?
La joven ya emprendió acciones legales contra el hospital, mientras ella y su familia esperan respuestas.
Una mujer brasileña, de 24 años, busca reparación y respuestas después de que su salida del hospital se convirtiera en una pesadilla. La joven ingresó a un centro médico para tener a su bebé, pero nunca se imaginó que poco después terminaría con su mano y muñeca izquierda amputadas.
El insólito hecho se desarrolló en Río de Janeiro, concretamente en el Hospital da Mulher Intermédica de Jacarepaguá, en octubre de 2022. En ese momento la brasileña, identificada como Gleice Kelly Gomes había completado 39 semanas de gestación y aunque el parto se desarrolló con normalidad, las complicaciones vinieron después.
Mãe de outras duas crianças, Gleice Kelly Gomes diz estar se "readaptando"
— UOL Notícias (@UOLNoticias) January 17, 2023
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Luego de dar a luz, Gomes tuvo que ser atendida porque presentó una hemorragia. En medio del intento del personal médico por controlar el sangrado y estabilizar a la mujer, le aplicaron un medicamento, cuyo acceso venoso fue en la mano izquierda, de acuerdo con el relato de los familiares, citados por el medio G1. En ese punto la joven comenzó a percibir un dolor en esa parte de su cuerpo.
¿Una falla en el procedimiento?
Las molestias pasaron de ser un ‘simple’ dolor a percibirse en su apariencia, pues la mano se tornó de color morado y empezó a hincharse. Para intentar reducir la inflamación, le pusieron una bolsa sobre la mano, sin que los resultados hubiesen sido fructíferos.
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“La mano de mi hija se estaba poniendo morada y muy hinchada. Y luego les pregunté qué iban a hacer con eso. Lo único que estaban haciendo es una bolsita de gel, metiéndola en el microondas, calentándola y dándosela. Y mi hija quejándose de que se quemaba”, señaló Kelly Cristina dos Santos, la mamá de la afectada.
El panorama no auguraba un desenlace sin complicaciones, al punto que tuvo que ser llevada a otro hospital en el municipio de São Gonçalo. Menos de una semana después de haber tenido a su bebé (de 3 kilogramos) en brazos, recibió una que la devastó: no había más salida que amputar su mano.
Una familia sin respuestas
El calvario no concluyó con la intervención quirúrgica, sino con el hecho de, por lo mismo, haber estado separada de su bebé durante más de dos semanas. Entre tanto, tanto la mujer brasileña como su familia esperan tener respuestas sobre lo ocurrido y; de acuerdo con G1, el hospital aseguró que estaba investigando qué pudo pasar.
“Perdí la oportunidad de ver a mi hijo en los primeros días. Para amamantar. Mi pecho ha estado produciendo leche durante tres días, pero es como si hubiera tenido un aborto espontáneo”, comentó Gleice Kelly Gomes y recopiló el medio mencionado anteriormente.
Al dolor de la mujer se suma la dificultad para realizar labores que una madre normalmente haría como bañar y dar de comer al neonato. Para ella, se trata de prácticas que le hubiese gustado llevar cabo con su nuevo bebé, así como tuvo la oportunidad de hacer con sus otros dos hijos. Sobre la unidad hospitalaria reposa ahora un proceso legal.
“Esta fue una secuencia de errores que deben ser todos investigados, en el ámbito penal, administrativo y civil. Vamos a pedir las reparaciones de las que eres civilmente responsable, daños estéticos, daños morales y materiales (...). Vamos a hacer un relevamiento de la parte de imprudencia, negligencia y mala praxis”, apuntó, por su parte, la representante legal Monalisa Gagno.
Este hecho evoca uno similar ocurrido hace tres años en Marsella, Francia, cuando un hombre acudió a su oftalmólogo para que hiciera una revisión de sus gafas; sin embargo, y por una razón que no pudo explicar, se usó un láser que terminó dejándolo prácticamente ciego.