Mujer incendia almacén de petróleo donde trabajaba porque su jefe le generaba “mucho estrés”

Una mujer tailandesa provocó un monumental incendio en un almacén de petróleo en el que trabajaba porque, supuestamente, su jefe le generaba “mucho estrés”.

De acuerdo con la mujer, identificada como Ann Sriya, decidió provocar el incendio a modo de venganza contra su jefe, pues asegura que este “todo el día se quejaba”.

Según el medio británico Daily Mail, Ann Sriya, de 38 años, ocasionó un daño material de 900.000 libras esterlinas.

Afirman que la mujer fue captada en videos prendiendo fuego a un trozo de papel, para después arrojarlo sobre un contenedor de combustible, lo cual provocó un incendio en el almacén de Prapakorn Oil, en la provincia de Nakhon Pathom.

Como era de esperarse, del almacén se vieron salir bolas de fuego y columnas de humo, donde Sriya trabajaba como jefa.

Tras haber confesado su responsabilidad en el hecho, la policía local la detuvo y ella insistió en que su empleador Pipat Ungprapakorn, de 65 años, hizo que ella perdiera el control y generara el incendio que obligó a que desalojaran diez casas cercanas al almacén y, además, una mujer fue ingresada al hospital luego de sufrir múltiples quemaduras graves.

Para apagar utilizaron más 40 camiones de bomberos; sin embargo, los servicios de emergencia tardaron cerca de cuatro horas en controlar el fuego.

El anterior hecho hizo recordar a uno acontecido el pasado 31 de diciembre en horas de la madrugada. Un exempleado de la fábrica de Mercedes en Vitoria, en el norte de España, destruyó por despecho hacia la empresa unas 50 furgonetas nuevas con una retroexcavadora, indicaron en ese momento fuentes policiales.

El hombre, de 38 años, robó primero la retroexcavadora en otra empresa, a 21 km de la fábrica de Mercedes. Una vez en esta, destruyó la puerta de entrada y luego “arremetió con el vehículo contra medio centenar de furgonetas estacionadas en el estacionamiento” del fabricante alemán, indicó la policía regional vasca, la Ertzaintza.

Iñaki Andrés Lozares, representante sindical en la fábrica de Mercedes, hizo un balance de 69 vehículos dañados en total. La dirección no quiso comentar los hechos por el momento.

En las fotos publicadas en la prensa local, podía verse una furgoneta volcada encima de otra, y algunas más completamente abolladas o con el capó destrozado.

El hombre, según la policía, era un exempleado de Mercedes. Su contrato había terminado a finales de 2017, según Iñaki Andrés Lozares.

Aparentemente sentía “frustración, no solo hacia la dirección, sino hacia los empleados”; incluso también “intentó entrar en las instalaciones de montaje de la fábrica”, explicó el representante sindical, uno de los 5.000 empleados de la usina.

Los daños causados ascendieron dos y cinco millones de euros, según fuentes de la empresa alemana citadas por la prensa local.