Mujer resultó herida en Sudáfrica al ser confundida con un hipopótamo

Un particular e inesperado hecho violento tuvo lugar en días pasados en una localidad ubicada en el norte de Sudáfrica, conocida como Lephalale, donde una mujer de 38 años, y de origen afro, resultó herida de bala, cuando se convirtió en el blanco de los disparos de un granjero, adulto mayor, quien, al ser requerido por la Policía, explicó que accionó su arma en contra de la mujer ‘porque la confundió con un hipopótamo’.

Según las declaraciones de las autoridades sudafricanas, recogidas a su vez por el diario británico The Guardian, el granjero, de 77 años, explicó que el hecho sucedió cuando se encontraba en su vivienda, y vio una sombra que se aproximaba hacia su residencia, proveniente del río, lo que le hizo pensar que se trataba de un robusto animal, más aún cuando en ocasiones anteriores ya había sido objeto de invasiones por parte de hipopótamos, y porque, al ser una propiedad privada, no tendría porque haber personas desconocidas, o sin autorización, merodeando por el lugar.

El granjero también apuntó que la sombra que él alcanzaba a divisar se encontraba a una distancia considerable, en una noche de baja visibilidad, por lo cual le hubiese sido imposible identificar que no se trataba de un hipopótamo, sino que por el contrario, quien estaba merodeando por su finca era la mujer de 38 años.

De acuerdo con la reconstrucción de los hechos, la mujer, quien en efecto se encontraría al interior de esos terrenos sin permiso, estaba acompañada por un hombre, su pareja, quien al percatarse de los disparos, alcanzó a esconderse para evitar también resultar herido, y para dar parte a las autoridades y cuerpos de emergencia, para que la mujer herida pudiese ser auxiliada.

Según recogen medios internacionales, tras acudir al lugar, la mujer pudo ser auxiliada, y trasladada posteriormente a un centro de atención, donde fue atendida en pro de evitar la complicación de la herida infringida por el impacto del arma de fuego.

A su vez, las autoridades requirieron al granjero, quien refirió que pensó que se trataba del animal de gran tamaño, proveniente del río Mogol, una de las principales fuentes hídricas de la zona, admitiendo que la invasión de animales salvajes era recurrente en su finca, por lo que ha optado por espantarlos o neutralizarlos empleando su rifle.

Pese a que se evidenció que el granjero, identificado como Paul van Zyl, tenía una argumentación firme sobre los hechos que llevaran a activar su arma, además de que la persona herida y su acompañante estaban incurriendo en una invasión de propiedad, el hombre fue detenido, y posteriormente puesto en libertad, previo pago de una fianza, mientras que sigue avanzando un proceso en su contra.

El curioso hecho también despertó polémica en su país, pues fue retomado por colectivos políticos, que pretendieron volver el caso un escándalo racial, argumentando que el agresor era un hombre blanco, mientras que la mujer agredida era de origen afro.

Según recoge el medio The Guardian, el partido que pretendió dar ese giro al caso, fue el movimiento de izquierda EFF, conocido en su país por luchar por la reivindicación racial, y defensa de los derechos de las poblaciones afro desde la época del apartheid.

Pese a los reclamos de referida agrupación política, esa arista del caso fue rápidamente desestimada por las autoridades judiciales, quienes dieron mayor validez a la explicación del granjero, reconociendo que los accidentes con armas de fuego en ese país son un tema recurrente.