No encuentran al niño que cayó por un pozo de 110 metros

El accidente que puso al niño dentro del agujero ocurrió este domingo, a las dos de la tarde, cuando la familia disfrutaba de un día de campo en la finca de un matrimonio amigo, ubicada al sur de España. Sin percatarse, el pequeño Julen se alejó unos metros de sus padres y según la versión que dieron a las autoridades, uno de los familiares vio cómo el niño caía por el túnel artesanal que se construyó en la propiedad para captar agua en la zona de Dolmen del Cerro de la Corona, en la sierra de Totalán.

De inmediato, Victoria y Jose, los papás de Julen, se comunicaron con la Guardia Civil española para que iniciara la búsqueda del menor, en horas de la tarde. La hipótesis que maneja el equipo de rescate es que el pozo estaba cubierto, hasta que al parecer, unos niños quitaron la tapa mientras jugaban; lo que habría puesto en peligro la vida de Julen, quien seguramente no vio el pozo.

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Lo preocupante ahora, es que las acciones de rescate no han surgido efecto. Los bomberos, ingenieros y el personal de la Guardia Civil llevan 30 horas de intenso trabajo sin llegar a la ubicación de Julen. El principal reto al que se enfrentan es el diámetro de la perforación que solo tiene 25 centímetros de ancho por 110 metros de profundidad, por lo que nadie ha podido ingresar al túnel a excepción de un robot con minicámara que bajó 78 metros hasta toparse con un tapón de tierra que impidió su paso.

Algún experto en geotecnia debería analizar el terreno y averiguar datos importantes a la hora de actuar como son su naturaleza, cohesión y capacidad portante. En base a eso se podrá establecer la distancia a la que se podrá perforar el túnel de rescate.#Totalán pic.twitter.com/mIQNolUFqj

— Jesus Maria Flores (@JMFloresVila) 13 de enero de 2019

Sin embargo, la grabación del robot reveló que en el túnel hay una bolsa de ‘chucherías’ y un vaso con el que jugaba Julen minutos antes de caer. Evidencia que da un poco de esperanza a los padres que están desesperados al no ver resultados satisfactorios.

"Muchos tuits de apoyo, muchos votos, pero medios ninguno. ¿Sabe usted lo que es llevar aquí 30 horas esperando a que saquen a su hijo de un pozo? Estamos muriendo”, dijo José Rosello, padre de Julen, al Programa de Ana Rosa, en una entrevista que concedió por teléfono para la televisión español.

Esta reacción es entendible porque desafortunadamente, en mayo de 2017, el hermano mayor de Julen, Oliver, falleció. Miguel Sánchez, abuelo paterno de ambos, contó al diario ABC que “el mayor se fue de una muerte súbita”, y por ende, la angustia de la familia en esta ocasión es peor.

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Pese a la impotencia que sienten los familiares de Julen, las acciones para rescatarlo no han parado. La Guardia Civil, en cabeza de su portavoz Bernardo Molto, resaltó que el operativo está “sobrepasado” ante la cantidad de personas y empresas que han ofrecido su ayuda. “No hacemos otra cosa que no sea buscar soluciones al rescate”, añadió.

Entre las opciones planteadas hay tres que podrían funcionar. La primera consiste en extraer el material del pozo que taponó la entrada del robot utilizando un vehículo que absorba la tierra. La segunda, es construir un pozo paralelo, de mayor diámetro, que permita que una persona ingrese para sacar al niño. Y la tercera, es excavar a cielo abierto hasta llegar al túnel donde cayó Julen.

Pero teniendo en cuenta que las horas pasan y se reduce la posibilidad de hallarlo con vida, el equipo de rescate decidió optar por la segunda opción. Esta mañana comenzó la perforación de un túnel alterno de aproximadamente 80 metros de longitud. Y según los expertos, el procedimiento fue antecedido por la entubación del orificio principal para proteger las paredes y evitar desprendimientos. En la labor, colaboró un equipo de salvamento minero que se desplazó desde el Principado de Asturias a Totalán para ayudar. Dentro de pocas horas se sabrá qué sucedió con Julen.