Mundo
“No iba a matar a mi socio”, revelaciones en el juicio contra el expresidente hondureño en EE.UU.
“No estaba en mi pensamiento matar a mi socio”, declaró este miércoles ante la justicia de Estados Unidos un jefe narco hondureño al explicar que no participó en un plan para asesinar al entonces presidente Juan Orlando Hernández, juzgado por narcotráfico en Nueva York.
Este miércoles, Devis Leonel Rivera, cofundador junto a su hermano Javier del cartel hondureño Los Cachiros, ofreció detalles sobre los vínculos con la élite política hondureña, incluyendo al expresidente, a quien respaldaron financieramente para obtener cargos electos a cambio de protección en el tráfico de cocaína proveniente de Colombia. Rivera, quien ha confesado ser autor de 78 asesinatos, comenzó a colaborar con la DEA en 2013 y se entregó a las autoridades estadounidenses en enero de 2015.
Durante su testimonio, reveló que los hermanos Arnulfo y Luis Valle, pertenecientes al cartel de los Valle-Valle, tenían la intención de asesinar a Juan Orlando Hernández y a su hermano Tony Hernández debido a la confiscación de propiedades y la falta de respuesta a sus comunicaciones.
En su testimonio ante la fiscalía, el exdiputado Reynaldo Ekónomo, de Cortés, conversó con Devis Leonel Rivera sobre los intentos de los hermanos Valle de involucrarlo en un plan para asesinar al presidente Juan Orlando Hernández al inicio de su primer mandato.
Devis Leonel Rivera declaró que rechazó la propuesta de participar en el magnicidio propuesto por los hermanos Valle, ya que en ese momento ya colaboraba con la DEA y no tenía intenciones de perjudicar a su socio, a quien había sobornado para obtener protección.
Durante una conversación con Ekónomo, supuestamente en presencia del presidente, Rivera aseguró que no tenía intenciones de causar daño a Hernández. Como intermediario, Ekónomo habría recibido entre 40,000 y 60,000 dólares, una camioneta y una casa en Tegucigalpa. Este testimonio resalta los lazos del narcotraficante con la política hondureña.
Según la DEA, entre el 90 % y 95 % de la cocaína que se consume en Estados Unidos procede de Colombia y desde 2004 en torno al 92 % a 94 % pasa por Centroamérica (Costa Rica, Nicaragua, Honduras y Guatemala) antes de atravesar México.
San Pedro Sula, la capital económica de Honduras, destaca como el principal “hub” o centro de operaciones de la ruta del narcotráfico, según señaló Jennifer Taul, especialista en narcotráfico de la DEA, durante el juicio al expresidente de Honduras.
Juan Orlando Hernández, conocido por las iniciales JOH en Honduras, enfrenta acusaciones de conspirar con el narcotráfico, tráfico y posesión de armas, lo que podría resultar en una condena que lo lleve a pasar el resto de sus días en la cárcel, situación similar a la de su hermano Tony Hernández, quien también desempeñó un papel central en la red de crimen organizado y tráfico de drogas.