Mundo
ONU denuncia que hay más de 423.000 personas desplazadas en la Franja de Gaza
Los desplazamientos masivos continúan. En la Franja de Gaza, el número acumulado de desplazados internos han crecido un 25 % en las últimas 24 horas.
El número de palestinos desplazados en la Franja de Gaza a causa de los bombardeos de Israel tras la ofensiva lanzada el sábado por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) desde el enclave ha ascendido a más de 423.000, según ha informado Naciones Unidas.
La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) ha especificado en su último balance que 423.378 personas se han visto desplazadas, de las cuales dos tercios se encuentran en escuelas de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA).
“Los desplazamientos masivos continúan. En la Franja de Gaza, el número acumulado de desplazados internos han crecido un 25 % en las últimas 24 horas”, ha indicado la agencia, que señala que ha habido también desplazamientos en el sur de Israel, principalmente en las localidades fronterizas con el enclave palestino.
Las agencias humanitarias están trabajando continuamente para “apoyar a los más vulnerables”, a pesar “de estas difíciles condiciones”. La principal operación implica acoger y cuidar a los desplazados internos en escuelas de la UNRWA y apoyar a aquellos alojados en otras instalaciones. También están distribuyendo ayuda alimentaria y combustible.
Lo más leído
“Los organismos y el personal humanitario se están enfrentando a importantes limitaciones a la hora de prestar asistencia humanitaria. La inseguridad reinante impide el acceso seguro a las personas necesitadas y a instalaciones esenciales, como los almacenes”, ha agregado la agencia.
Israel, que ha impuesto un cerco total a la Franja, ha confirmado hasta ahora más de 1.300 muertos y 3.700 heridos desde el inicio de la ofensiva de Hamás, lanzada el sábado y respaldada por Yihad Islámica, mientras que 1.500 palestinos han fallecido y unos 6.600 han resultado heridos a consecuencia de los bombardeos y ataques israelíes contra Gaza, a lo que se suman más de 30 muertos y 650 heridos en operaciones y enfrentamientos con las fuerzas israelíes en Cisjordania.
Por otra parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha alertado del riesgo de una escalada del conflicto en Oriente Medio tras los ataques perpetrados por Israel contra los aeropuertos sirios de Alepo y Damasco, en el marco del conflicto en curso entre el Movimiento de Resistencia Islámico (Hamás) y el Ejército israelí.
El portavoz de Guterres, que ha tildado de “extremadamente preocupantes” los hechos, ha pedido “a todas las partes que eviten ataques que puedan afectar a los civiles y dañar la infraestructura civil”, remarcando que el hecho de que dichos aeropuertos no estén funcionando provoca la suspensión temporal de la ayuda humanitaria de la ONU al país.
“Estamos en un momento en el que estas tensiones aumentan, en el que cualquier error de cálculo podría conducir a una violencia más amplia en una región que ya es, de por sí, volátil”, ha declarado en una rueda de prensa.
Dujarric ha aprovechado la ocasión para condenar “enérgicamente toda violencia en Siria” e instar “a todas las partes a respetar sus obligaciones”, recordando que los civiles y la infraestructura civil deben ser protegidos en virtud del Derecho Internacional Humanitario.
Las autoridades sirias denunciaron horas antes una serie de ataques contra los aeropuertos de Alepo y Damasco, cuya infraestructura ha quedado dañada, indicando que los vuelos programados serían trasladados al aeropuerto de Latakia.
La agresión del Ejército israelí se produce en un contexto marcado por las ofensivas llevadas a cabo desde la Franja de Gaza por las milicias palestinas, lideradas por el brazo armado de Hamás, las Brigadas Al Qassam, y por el partido-milicia chii Hezbolá desde Líbano.
Israel reconoce de forma genérica ataques en Siria argumentando que actúa para evitar el establecimiento de bases iraníes en el país y el envío de armas a Hezbolá por parte de las autoridades de Irán, que apoyan a Damasco en el marco de la guerra que estalló en 2011.
*Con información de Europa Press.