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“Oye, hay un tipo en el techo con un rifle”, la advertencia de asistentes al mitin de Trump, momentos antes de que fuera herido
El Daily Mail recogió testimonios de personas que participaron en la manifestación del expresidente, en la que fue víctima de un atentado. Aunque la azotea desde donde el atacante disparó se había identificado como un riesgo, no fue cubierta.
Dos días después del atentado contra el expresidente Donald Trump en un mitin en Pensilvania, en camino a las elecciones presidenciales de noviembre, se siguen conociendo detalles del ataque que mostraría falencias en el esquema de seguridad.
Según el medio Daily Mail, seguidores del expresidente que participaron en la manifestación advirtieron a la policía que Thomas Crooks, el atacante, se había ubicado en una azotea, a las afueras del sitio del mitin, pero las autoridades reaccionaron tardíamente.
“El sheriff del condado de Butler, Michael Slupe, confirmó que un oficial de policía local intentó confrontar a Crooks en la azotea, momentos antes de que se escucharan los disparos, pero que se agachó para cubrirse cuando el rifle lo apuntó. Slupe confirmó que Crooks, de 20 años, se puso en posición después de subir una escalera y gatear sobre el techo de un negocio a unos 100 pies de distancia de donde estaba hablando el presunto candidato presidencial republicano”, dice el medio, que recoge testimonios de asistentes al evento.
Greg Smith, un testigo del hecho, le dijo al Daily Mail que había visto al posible atacante subir a la cima de un edificio afuera del evento, ubicado en Butler, Pensilvania. “Me pregunto: ‘¿Por qué Trump sigue hablando en este escenario ahora mismo? ¿Por qué sigue ahí arriba hablando?’”, señaló el testigo, quien agregó: “Vi al Servicio Secreto volarle la cabeza”, y añadió que salió corriendo para buscar a su esposa y a sus tres hijos y ubicarse en un lugar seguro.
Su conclusión fue clara: “En este momento, y a medida que pienso más en ello, siento que es simplemente un enorme fallo de seguridad”, dijo a Daily Mail.
En su descripción, el testigo advierte que ese “no es un lugar grande, no hay muchos edificios por aquí, ¿por qué no está todo cubierto?” y dijo que había visto a un hombre subiendo al tejado de un edificio.
“Me di cuenta de que había un tipo trepando por el techo de ese edificio”, continuó en declaraciones a Daily Mail. “Y pensé: ‘Eso no parece correcto’”.
En su narración, el testigo asegura que el hombre no parecía del Servicio Secreto, vestía ropa de color canela y gris y no estaba uniformado. Se vieron agentes de policía corriendo alrededor del edificio, aparentemente buscando a alguien. “Señalé el techo y dije: ‘Oye, hay un tipo en el techo con un rifle’”.
Slupe, sheriff del condado de Butler, dijo que el oficial que inicialmente se enfrentó a Crooks estaba “agarrando el borde del techo” y por su posición, no tenía consigo un arma y tuvo que arrojarse al suelo, en el momento en que el atacante le apuntó.
Un informe de NBC News, citado por el Daily Mail asegura que los agentes que estuvieron a cargo de asegurar el área en la ciudad de Butler en los días previos a la manifestación de Trump, identificaron la azotea como un riesgo para la seguridad. Sin embargo, el portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, dijo que asegurar la azotea habría estado bajo la jurisdicción de la policía local. A pesar de esto, no había oficiales asignados a ese sitio.
Este ha sido calificado como uno de los peores fallos en materia de seguridad desde que el presidente Ronald Reagan fue baleado y herido en un hotel de Washington en 1981.
Los agentes mataron al tirador, identificado por el FBI como Thomas Matthew Crooks de Bethel Park, Pensilvania, y se recuperó un arma semiautomática estilo AR-15 cerca de su cuerpo, dijeron las autoridades.
Trump, fue víctima de un atentado mientras lideraba un evento proselitista en Pensilvania, en el marco de la campaña presidencial.
Cuando Trump intervenía se escucharon varias detonaciones y el pánico se apoderó del lugar. Trump fue evacuado del escenario y protegido por su grupo de seguridad. Luego se paró, con parte de su rostro ensangrentado por una herida en la oreja derecha, rodeado por sus guardaespaldas y levantó el puño de su mano derecha.
En una entrevista que dio el domingo a The New York Post, Trump dijo que está vivo de milagro. “El médico del hospital dijo que nunca había visto algo así, lo llamó un milagro”, agregó el exmandatario. Agregó que lo salvó haber girado a la derecha para leer una información, por lo que el disparo le dio en la oreja.
Por su parte, el presidente Joe Biden dijo: “La investigación está en los estadios iniciales. No tenemos ninguna información sobre los motivos del tirador. Sabemos quién es. Urjo a todo el mundo, que, por favor, no hagan especulaciones sobre los motivos y afiliaciones”.