SEGURIDAD
Ataques a colonia cristiana y tribunal sacuden Pakistán
Al menos 10 muertos y 40 heridos dejaron los ataques suicidas. Los atentados se produjeron un día después de que el Ejército frustró un intento del Estado Islámico para ampliar su red en el país.
Dos ataques insurgentes sacudieron el viernes el noroeste de Pakistán, cuando hombres armados y con chalecos suicidas irrumpieron en una colonia cristiana cerca de Peshawar matando a un civil, y un suicida se inmoló en una corte de distrito de la localidad de Mardan causando 10 muertos y 41 heridos.
Insurgentes irrumpieron en el vecindario cristiano el viernes por la mañana y provocaron una balacera que acabó con la vida de los cuatro atacantes y un ciudadano cristiano, según la policía y el Ejército. Tres funcionarios de seguridad y dos guardas civiles sufrieron heridas.
El ataque fue repelido rápidamente y las fuerzas seguridad buscan a posibles cómplices de los autores, explicó el portavoz del Ejército, el teniente general Asim Saleem Bajwa, en un comunicado.
Los cuatro suicidas entraron a la colonia cristiana y uno de ellos se dirigió a una iglesia que estaba vacía en ese momento, dijo el oficial de la policía local Shaukat Khan. Los agresores mataron a uno de los cristianos de la comunidad, añadió. No estuvo claro de inmediato si alguno de los radicales hizo detonar sus explosivos.
La rápida respuesta de los guardas civiles locales y las fuerzas de seguridad evitaron más víctimas mortales, apuntó el funcionario.
Ahsanullah Ahsan, portavoz del grupo Jamaat-ul-Ahrar, una escisión del movimiento talibán, reivindico la autoría del atentado.
Por otra parte, en la localidad de Mardan, a unos 40 kilómetros (25 millas) de Peshawar, un suicida arrojó primero una granada y luego se inmoló ante una corte de distrito, explicó el vocero gubernamental, Mushtaq Ghani.
Entre los 10 muertos en el ataque había abogados, agentes de policía y peatones, señaló agregando que algunos de los heridos están en estado crítico.
Ningún grupo se atribuyó de inmediato la responsabilidad por este ataque.
Pakistán ha sido objeto de importantes ataques insurgentes en los últimos meses. En marzo, un suicida atacó a cristianos que celebraban la Pascua en un parque de la ciudad de Lahore y mató a unas 70 personas. Jamaat-ul-Ahrar reclamó el ataque y advirtió de nuevas acciones.
Los cristianos son una pequeña minoría en el país, de mayoría musulmana. Aunque algunos cristianos viven en zonas árabes, muchos optan por residir en vecindarios de su misma confesión.
Los atentados se produjeron un día después de que el Ejército anunció que frustró un intento del grupo extremista Estado Islámico para ampliar su red en el país. Autoridades detuvieron a 309 sospechosos, incluyendo militantes de EI de Siria, Irak y Afganistán.
El primer ministro del país, Nawaz Sharif, emitió comunicados el viernes condenando ambos incidentes. "Estos ataques cobardes no pueden hacer pedazos nuestra determinación inquebrantable en la guerra contra el terrorismo".