MUNDO
Papa Francisco asegura que el mundo atraviesa la “tercera guerra mundial a trozos”
El mundo es testigo de varias guerras, entre estas, la de Israel y Hamás, así como entre Rusia y Ucrania.
En medio de un discurso durante la entrega de las cartas credenciales a embajadores de los nuevos embajadores de Kuwait, Nueva Zelanda, Malawi, Guinea, Suecia y Chad, el papa Francisco dijo este jueves, 7 de diciembre, que se hace necesaria la “reconfiguración urgente de la diplomacia multilateral”.
“Comienza su misión en un momento especialmente conflictivo, marcado por la multiplicación de los conflictos armados, en lo que durante mucho tiempo he llamado una tercera guerra mundial que se libra a trozos”, dijo el sumo pontífice.
Por lo tanto, el papa Francisco fue enfático en decir que la comunidad internacional debe unir esfuerzos en busca de soluciones, ante lo que llamó “graves injusticias”.
“La comunidad internacional se ve obligada a enfrentar, a través de las herramientas pacíficas de la diplomacia, el desafío de encontrar soluciones generales a las graves injusticias que con tanta frecuencia los causan”, aseveró el papa Francisco.
Lo más leído
A propósito, desde El Vaticano, el papa Francisco urgió recientemente a Israel y al grupo terrorista Hamás a implementar un nuevo cese el fuego lo más pronto posible.
Por otra parte, el papa aseguró este miércoles que se encuentra “mucho mejor” de la inflamación que sufre en sus pulmones.
Así se hizo saber ante el público presente en la audiencia general de este 6 de diciembre, donde también explicó que se fatiga si habla demasiado.
Como viene siendo habitual estos últimos días, ha confiado la lectura de la catequesis de la audiencia general en el Aula Pablo VI, la primera del tiempo de Adviento, a Filippo Ciampanelli.
En el texto, destacó el don del Espíritu Santo que, según ha expuesto, “debe animar todo celo apostólico”.
“Sin el Espíritu Santo todo celo es vano y falsamente apostólico: sería solo nuestro y no traería fruto (...). El Espíritu es el protagonista, precede siempre a los misionarios y hace brotar los frutos. ¡Esta conciencia nos consuela mucho! Y nos ayuda a especificar otra, igualmente decisiva: es decir, que en su celo apostólico la Iglesia no se anuncia a sí misma, sino una gracia, un don, y el Espíritu Santo es precisamente el don de Dios, como dijo Jesús a la mujer samaritana”, señaló.
No obstante, en su mensaje recalcó que este reconocimiento, sin embargo, no puede conciliarse con una actitud de pereza e indolencia por parte del hombre, sino que, según añadió, se debe cooperar de manera “consciente, adulta, valiente y dinámica”.
El papa también destacó la importancia de la creatividad para el anuncio del Evangelio y ha admitido que esta época “no ayuda a tener una visión religiosa de la vida”.
“Quizá nos refugiamos en zonas de seguridad, como la repetición habitual de cosas que se hacen siempre, o en las tentadoras llamadas de una espiritualidad intimista, o incluso en un sentimiento mal comprendido de la centralidad de la liturgia. Son tentaciones que se disfrazan de fidelidad a la tradición, pero a menudo, más que respuestas al Espíritu, son reacciones a las insatisfacciones personales”, explicó el líder de la Iglesia católica.
*Con información de Europa Press.