Mundo
Papa Francisco no asistirá a la ceremonia de Viacrucis del Viernes Santo
El sumo pontífice había tenido duros quebrantos de salud desde la semana pasada.
En las últimas horas se conoció que el papa Francisco no asistirá a la ceremonia del Viacrucis que se realiza este Viernes Santo en el Vaticano.
“Debido al intenso frío de estos días, el papa Francisco seguirá esta noche el Viacrucis desde la Casa Santa Marta”, advirtió la oficina de prensa de la Santa Sede, citada por el medio especializado Vatican News.
Asimismo, indicaron que el sumo pontífice se unirá “a la oración de quienes se reunirán con la diócesis de Roma en el Coliseo”.
La noticia de que no asistirá a la ceremonia llegó después de los múltiples quebrantos de salud que ha tenido en los últimos días y que lo obligaron a ser internado en un hospital.
“En el marco de los controles clínicos (...) se detectó una bronquitis infecciosa que requirió la administración de una terapia antibiótica a base de infusión que produjo los efectos esperados, con una clara mejoría del estado de salud”, sostuvo la oficina de prensa de la Santa Sede durante la semana pasada.
Además de su difícil estado de salud por cuenta de la bronquitis, el papa Francisco también ha enfrentado otras enfermedades que han limitado su movilidad. De hecho, lleva varios años padeciendo de artritis en una de sus rodillas, lo cual ha impedido que pueda caminar de forma autónoma y lo ha obligado a usar una silla de ruedas.
En 2021, además, tuvo que someterse a una operación de colon. La intervención quirúrgica hizo que estuviera internado en un hospital de Roma durante diez días. La anestesia que le aplicaron le dejó “secuelas”, según les contó él mismo a los periodistas. Por ello, ha preferido no someterse a una nueva cirugía en su rodilla.
Ofició un lavatorio de pies con presos durante el Jueves Santo
Esto, sin embargo, no le impidió al papa Francisco lavar los pies a doce jóvenes detenidos de una cárcel de menores de Roma, al cumplir con los ritos de Jueves Santo. Conforme a la tradición católica, Francisco representó el gesto de humildad que tuvo Cristo con sus apóstoles antes de ser arrestado, condenado a muerte y crucificado un viernes en Jerusalén.
El pontífice argentino acudió a la prisión de Casal del Marmo, en el norte de la capital italiana, donde ya había realizado ese rito en 2013 tras su elección al trono de Pedro. Apoyado en un bastón, Jorge Mario Bergoglio apareció sonriente y se paró frente a cada uno de los 12 jóvenes detenidos (entre ellos dos mujeres) para lavarles los pies e inclusive se agachó para besarlos.
Algunos de ellos le devolvieron el gesto con un beso en la mano, otros intercambiaron algunas palabras con él.
“Voy a cumplir con este ritual. No es folclor. Espero salir de esta porque no puedo caminar muy bien”, explicó el papa, que estuvo varios minutos de pie, en alusión a sus problemas para caminar por los dolores en su rodilla.
Entre los jóvenes había inclusive un musulmán, además de católicos de varias partes del mundo, según precisó el Vaticano, que transmitió por primera vez en directo la ceremonia.
Desde el inicio de su pontificado en 2013, el papa Francisco decidió llevar esta celebración fuera del Vaticano.
Este Jueves Santo por la mañana, el papa Francisco también presidió la tradicional misa crismal en la basílica de San Pedro. Por tradición, allí se bendice el aceite santo que servirá para otros sacramentos durante el año.
El próximo domingo con ocasión de la Pascua, que conmemora la resurrección de Cristo según el relato de los Evangelios, se espera que el papa imparta la bendición Urbi et orbi –a la ciudad y al mundo– y lea el mensaje sobre los problemas del mundo.
*Con información de la AFP.