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Para Amnistía Internacional, orden de arresto contra Putin significa que criminales son juzgados “sin importar su poder”
Este viernes, la Corte Penal Internacional emitió una orden de captura contra Vladimir Putin por crímenes de guerra en Ucrania.
La secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, celebró la orden de arresto emitida por el Tribunal Penal Internacional (TPI) contra el presidente ruso, Vladimir Putin, que calificó de “importante señal –para Ucrania y para el resto del mundo– de que aquellos que sean presuntamente responsables de crímenes bajo la legislación internacional en Ucrania se enfrentarán a un arresto y un juicio, sin importar lo poderosos que sean”.
“El presidente Putin es oficialmente un hombre buscado por la ley”, anunció, recalcando que si bien este es un “impresionante primer paso”, el TPI está aún limitado en condenar únicamente la deportación ilegal de niños ucranianos a Rusia.
“Esto no refleja la gran cantidad de crímenes de guerra y contra la humanidad de los que la administración rusa es potencialmente responsable”, lamentó, añadiendo que espera que tanto el TPI como otros actores internacionales puedan pronto publicar más órdenes de arresto por crímenes en Ucrania, así como ver sus resultados.
En noviembre de 2022, AI publicó una investigación sobre estas deportaciones forzosas de menores, que han acabado con esta orden de arresto contra el presidente ruso, así como contra la comisaría presidencial de los derechos de la Infancia de la Federación de Rusia, Maria Alekseievna Lvova-Belova.
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“Si el presidente Putin o la señora Lvova-Belova abandonan Rusia, los estados deben negarles asilo, arrestarlos inmediatamente y entregarles al TPI”, sentenció la secretaria general. “La comunidad internacional no debe parar hasta que sean arrestados y llevados a juicio”.
También la organización Human Rights Watch (HRW) aplaudió este viernes la orden de arresto dictada por el TPI, en la medida en que “es un gran día para las muchas víctimas de los crímenes cometidos por las fuerzas rusas en Ucrania desde 2014″.
Una de las responsables de la oficina de justicia internacional de HRW, Balkees Jarrah, subrayó en un comunicado que desde este viernes Putin es “un hombre buscado” y ha visto en la orden “un primer paso para terminar con la impunidad” que durante años ha rodeado el conflicto ucraniano.
En tanto, numerosos líderes internacionales, como el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, o el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, han calificado la decisión del TPI de “justificada” y “el principio del proceso de rendición de cuentas”, respectivamente.
Las órdenes de arresto de este viernes representan los primeros cargos internacionales presentados desde el comienzo del conflicto y llegan después de meses de trabajo de un equipo especial de investigación a las órdenes del fiscal jefe del TPI, Karim Khan. Para su emisión ha sido necesario que un panel preliminar de jueces aceptara la validez de las pruebas presentadas.
Este mismo viernes, el primer mandatario de Estados Unidos, Joe Biden, dio a conocer su opinión sobre el hecho y afirmó que era una decisión “justificada”.
Pues bien, las declaraciones del estadounidense se dieron en medio de una conferencia luego de ser consultado acerca de la decisión de la corte contra su homólogo ruso bajo la presunción de crimen de guerra por la deportación forzada de niños ucranianos desde zonas capturadas durante la guerra de Ucrania a territorio ruso.
“Bueno, creo que está justificado. Pero la pregunta es que nosotros tampoco lo reconocemos internacionalmente. Pero creo que es un punto muy fuerte”, aseveró el mandatario estadounidense.
El Kremlin desmintió constantemente que esté deportando a niños ucranianos por la fuerza frente a las acusaciones vertidas por Kiev y sus aliados. Según el Gobierno ucraniano, al menos 16.000 niños han acabado desplazados contra su voluntad a territorio ruso desde el comienzo del conflicto, mientras que un reciente estudio presentado en febrero por la Universidad de Yale denunciaba al menos 6.000 niños ucranianos repartidos en 40 internados rusos.
*Con información de Europa Press.