MUNDO
Para los cubanos en la isla, cualquier presidente es mejor que Trump
Después de la histórica política de apertura con Cuba propiciada por Barack Obama, la administración Trump cayó como balde de agua fría para el país socialista.
Para la mayoría de los cubanos que viven en la isla, el demócrata Joe Biden es un desconocido, una incógnita, pero están seguros de que cualquier presidente de Estados Unidos será mejor que Donald Trump.
“No soy de confiar en ningún presidente norteamericano, pero bueno, como están las cosas prefiero al otro y no a Trump”, dijo a Pablo Zaldívar, un parqueador de carros de 57 años.
Después de la histórica política de apertura con Cuba propiciada por Barack Obama, la administración Trump cayó como balde de agua fría para el país socialista.
Su reelección hubiera sido “un desastre o una amenaza de Armagedón” para Cuba, asegura el politólogo Jorge Gómez Barata.
Tendencias
En cuatro años aplicó 130 medidas para reforzar el bloqueo, muchas de las cuales afectan directamente a la población y al emergente sector privado, como la restricción de las remesas familiares, la suspensión de los viajes de cruceros y de la mayoría de los vuelos directos, y el cierre del consulado en La Habana.
- Trump, “ni en pintura” -
“A Trump no lo quiero yo ni en pintura, como decimos nosotros los cubanos. Que gane él (Biden) para que nosotros mejoremos”, dijo Aidelvis Blanco, empleada del restaurante “El Mandarín”.
Según Oniel Díaz, directivo de la consultora privada Auge, la victoria de Biden es “una noticia sumamente bienvenida para la comunidad emprendedora de Cuba. El sector privado fue uno de los actores cubanos más golpeados por la política hacia Cuba de la administración Trump”.
Pero los cubanos no olvidan que desde el triunfo de Fidel Castro en 1959, su revolución se enfrentó a 12 mandatarios norteamericanos y fueron demócratas los de medidas mas fuertes contra la isla.
John F. Kennedy (1961-63) autorizó la invasión del Bahía de Cochinos, impuso el embargo en 1962 y protagonizó la crisis de los misiles que puso al mundo el borde de una guerra nuclear.
Bill Clinton (1993-2001) firmó la Ley Helms-Burton, endureciendo el embargo.
A pesar de ser poco conocido en la isla, Biden tiene un gran punto a su favor: fue el vice de Barack Obama, fomentó la colaboración en varios sectores a partir del restablecimiento de las relaciones en 2015 y contribuyó a la unificación familiar entre los cubanos a los dos lados del estrecho de Florida.
Su elección “significa un regreso al equilibrio en política exterior que principió con la política de Obama, en el que el compromiso con el apoyo a la democracia es compatible con el diálogo político, el no aislamiento y el flujo en las relaciones entre los dos países”, opina el opositor Manuel Cuesta Morúa.
También “la no supeditación del cambio necesario en Cuba al castigo de las familias y de los sectores más vulnerables, ya precarizados por la incompetencia política de la élite en el poder”, añade.
- Biden, “una posibilidad que aprovechar”-
El aparato oficial cubano se abstuvo de pronunciarse hasta el momento, pues si bien querían salir de Trump, evitaron poner grandes expectativas en Biden.
“Biden no insistirá en el levantamiento del embargo”, predice Jorge Duany, director del Instituto de Investigaciones Cubanas de la Universidad Internacional de Florida.
Su propósito sera más bien “'empoderar' al pueblo cubano y promover la democracia en la isla”, añade.
Pero lo “que no queda claro exactamente es qué compromisos o concesiones le exigirá (Biden) a ese gobierno para mejorar las relaciones entre Cuba y Estados Unidos”.
En una entrevista previa a la votación con el medio digital opositor CiberCuba, Biden anunció la pronta “eliminación de las restricciones de Trump a las remesas y los viajes, las cuales perjudican al pueblo cubano y mantienen a las familias separadas”.
“Exigiré la liberación de los presos políticos y defenderé los derechos humanos en Cuba”, dijo también.
Si las acusaciones de Trump de que Biden es socialista hicieron efecto en los hispanos de Florida que votaron por el republicano, en Cuba, con seis décadas de socialismo, nadie duda de las posiciones y los intereses del nuevo presidente.
Pero Biden es “una posibilidad que habría que saber aprovechar” sostiene Gómez Barata en referencia a los avances que puede hacer Cuba sobre todo en materia económica, con unas relaciones mas sosegadas.
“La llegada de Biden a la Casa Blanca, junto a las recientes medidas económicas anunciadas por el gobierno cubano donde le abre más espacio al sector privado en el país, tienen el potencial de generar una situación sumamente beneficiosa”, afirma el consultor Díaz.
AFP