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La puerta a la paz parece abierta: presidente del Líbano a Israel

El presidente Michel Aoun vive momentos duros por cuenta del atentado a Beirut. En medio de estos, ha enviado un mensaje esperanzador para muchos: no ve con malos ojos el acuerdo de Emiratos Árabes con Israel.

16 de agosto de 2020
| Foto: Archivo

En la última semana, vientos de paz han llegado a Oriente Medio. El jueves, la normalización de las relaciones diplomáticas entre los Emiratos Árabes Unidos e Israel generó la reacción eufórica del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Es un "enorme avance", aseguró el presidente de Estados Unidos, quien luego describió la situación como un "Acuerdo de Paz Histórico entre nuestros dos grandes amigos".

 
"Acuerdo de Paz Histórico entre nuestros dos grandes amigos", escribió Trump. Foto: BRENDAN SMIALOWSKI / AFP.

Este sábado, en ese mismo camino hacia la estabilidad de las relaciones, sucedió un hecho que pocos esperaban. El presidente libanés, Michel Aoun, aliado del movimiento chiita Hezbolá hostil a Israel, pareció dejar la puerta abierta a la posibilidad de una paz con Israel, en una entrevista con la cadena de información francesa BFMTV.

Líbano y su vecino Israel están técnicamente en estado de guerra. El Hezbolá proiraní, que domina actualmente la vida política libanesa, e Israel, son enemigos jurados y han librado varios conflictos en las últimas décadas. 

Por eso, las parcas palabras de Aoun generaron esperanza. Los periodistas franceses le preguntaron sobre si Líbano estaría dispuesto a sellar la paz con Israel y Michel Aoun respondió: "Depende. Tenemos problemas con Israel que primero debemos resolver". Sobre el acuerdo de normalización de relaciones entre Emiratos Árabes Unidos e Israel anunciado el jueves, el presidente libanés reaccionó diciendo que Emiratos era un "país independiente".

La razón de que esa sencilla respuesta generara un impacto político es que Aoun no criticó el acuerdo, como lo hizo su aliado el Hezbolá, que lo calificó el viernes de "traición" al pueblo palestino. Uno de los puntos que enfrenta a Líbano e Israel es la exploración de hidrocarburos en el Mediterráneo oriental. Una parte de los bloques de exploración se encontraban en una zona marítima disputada con Israel. En 2019, Estados Unidos lideró una mediación inédita para resolver el litigio.

Además, Aoun, quien vive momentos muy duros en su mandato, descartó abandonar el poder. Este ha sido un reclamo de la población libanesa tras la explosión del 4 de agosto en el puerto de Beirut. "Es imposible, habría un vacío. Si dimito, ¿quién va a garantizar la continuidad del poder?", dijo en BFMTV.

Un acuerdo histórico

La semana pasada, en una declaración conjunta, Trump, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y el príncipe heredero de Abu Dabi, Mohamed bin Zayed Al-Nahyan, aseguraron haber "acordado la plena normalización de las relaciones entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos".

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente estadounidense, Donald Trump.


Con Trump, Netanyahu tiene un fuerte aliado en la Casa Blanca. Foto: GETTY-BBC.

Las delegaciones de Israel y EE. UU. se reunirán en las próximas semanas para firmar acuerdos bilaterales sobre inversión, turismo, vuelos directos, seguridad y embajadas respectivas, agregaron.

"A pedido del presidente Trump, con el apoyo de los Emiratos Árabes Unidos, Israel suspenderá la declaración de soberanía sobre las áreas descritas en la Visión para la Paz del presidente y ahora enfocará sus esfuerzos en ampliar los lazos con otros países del mundo árabe y musulmán", agregó la declaración.

"Estados Unidos, Israel y los Emiratos Árabes Unidos confían en avances diplomáticos adicionales con otras naciones son posibles, y trabajarán juntos para lograr este objetivo", indicó.

El anuncio ha sido aplaudido por aliados y criticado por rivales. Los líderes palestinos calificaron el acuerdo de "traición". Emiratos Árabes Unidos se ha convertido en el primer país del Golfo en establecer relaciones con Israel, en una dividida región que necesita unir fuerzas contra Irán.

Según Emiratos, el acuerdo incluía un compromiso para detener cualquier anexión adicional por parte de Israel de territorios palestinos, pero el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, precisó rápidamente que solo significaba un aplazamiento, no la cancelación de los planes.

Arabia Saudita, la principal potencia árabe y el guardián de los sitios santos del islam, aún no ha emitido ningún comentario oficial sobre la decisión de Emiratos, su cercano aliado. Aún queda por ver si Arabia Saudita adoptará una política similar. Analistas aseguran que incluso si se ha acercado a Israel en los últimos años, será prudente y esperará para ver la reacción del mundo árabe.

En contexto: el acuerdo histórico que Israel firmó con Emiratos Árabes

Baréin fue el primer estado del Golfo en dar la bienvenida el jueves al acuerdo, que se negoció con la ayuda de Estados Unidos, pero varios partidos de oposición emitieron un comunicado conjunto rechazando "cualquier normalización con la entidad sionista". Aliado de Estados Unidos en la región y particularmente hostil a Irán al igual que Israel y Emiratos, Baréin es considerado el próximo candidato probable en establecer relaciones con Israel.

Catar, que no respondió al anuncio del jueves, dejó de mantener relaciones diplomáticas en 2017 con Emiratos, Arabia Saudita, Baréin y Egipto, que le acusan de apoyar a movimientos islamistas y de convivencia con Irán. Doha, que al mismo tiempo es cercano a Estados Unidos, niega estas acusaciones. Mantiene una relación intermitente con Israel, tras albergar una oficina de intereses económicos israelí de 1996  hasta 2000.

Kuwait, otro aliado cercano de Washington, igualmente mantuvo silencio sobre el acuerdo con Israel. El emirato es el único país en el Golfo con una auténtica vida política y parlamentaria, y permite en ocasiones el debate público.