Entrevista
“Pedro Sánchez no tendrá más remedio que dimitir”: Miguel Bernad, denunciante de la esposa del presidente español, habla con SEMANA
Miguel Bernad, director de Manos Limpias, organización que denunció por corrupción a Begoña Gómez, esposa del presidente español, Pedro Sánchez, habla en SEMANA sobre el llamado a declarar de la mujer.
SEMANA: ¿Cómo ha visto el caso de Begoña Gómez después de que Manos Limpias revelara las denuncias contra ella?
Miguel Bernad: Se ha producido un tsunami como nunca en España. Nosotros también imputamos a la hija del rey emérito, Cristina de Borbón, que la sentamos en el banquillo juntamente con su esposo Iñaki Urdangarin. Pero la repercusión de esta denuncia ha tenido una trascendencia muy intensa aquí en España y con una repercusión en el ámbito internacional, increíble. Yo creo que ha sido uno de los acontecimientos más importantes desde la democracia aquí en España, porque creo que teníamos el deber de que cuando existe un delito, lo cometa quien lo cometa, que sea un ciudadano de a pie, que sea la hija del rey o la esposa del presidente del Gobierno, teníamos nosotros la obligación de denunciar ante la pasividad de un Ministerio Público que en España tiene una obligación de defender la legalidad vigente.
SEMANA: Y ahora es llamada a interrogatorio...
M.B.: Nosotros hemos denunciado algo que la sociedad española estaba reclamando, pero que era un escándalo que estaba haciendo día tras día los negocios ilícitos de la esposa del presidente del Gobierno, y alguien tenía que denunciarlo. El juez que lleva el caso ha visto indudablemente indicios de delito y sienta en el banquillo el día 5 de julio a la esposa del presidente del Gobierno, que tendrá que comparecer como cualquier otro ciudadano de a pie.
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SEMANA: ¿Qué espera que pase después de esta audiencia judicial?
M.B.: Yo espero que después de esa declaración ya se convierta de imputada en un escrito de acusación y donde se le pedirá las responsabilidades pertinentes por los dos presuntos delitos de tráfico de influencias y de negociaciones entre particulares. Va a salir indudablemente acusada de estos delitos, se verá en su momento en un juicio oral. Estoy totalmente convencido, con las pruebas que hemos aportado, de que Begoña Gómez será condenada, y será el primer caso en la historia de España que la esposa de un jefe de Gobierno se sienta en el banquillo y que será finalmente no solo procesada, sino también condenada.
SEMANA: ¿Y qué piensa de Pedro Sánchez?
M.B.: Nos lamentamos aquí en España que a estas alturas todavía el presidente del Gobierno no haya ido a la Zarzuela a presentar su dimisión y convocar nuevas elecciones generales. En cualquier país de la Unión Europea, un presidente en una situación similar hubiera ido a presentar ya la renuncia. Pongo, por ejemplo, a la república francesa, si su mujer hubiera estado imputada, le hubiera faltado tiempo, en una o dos horas se hubiera presentado en el palacio del Elíseo y hubiera presentado ante el presidente la dimisión.
Aquí, desgraciadamente, tenemos un presidente del Gobierno que es un ególatra, que lo único que quiere es conservar su puesto a costa de quien sea. La prueba es que formó Gobierno con el apoyo de los independentistas, con el apoyo de antiguos miembros de la organización terrorista ETA, con personajes adscritos a un partido comunista que está condenado a nivel nacional y europeo. Por lo tanto, creo que estamos pasando uno de los momentos más delicados y más graves de la historia de la democracia española.
SEMANA: ¿Qué es lo que pasa con el hermano de Pedro Sánchez? ¿Perjudicará el caso?
M.B.: Todo este caso se completa cuando seguramente sea imputado el hermano del presidente del Gobierno en unos negocios también ilícitos de presunto fraude a la hacienda pública. Yo creo que después de este segundo acontecimiento y después de las elecciones al Parlamento Europeo, que se celebran este domingo, a más tardar la próxima semana, Pedro Sánchez no tendrá más remedio que dimitir y llamar al adelanto de elecciones.
SEMANA: El Gobierno de Pedro Sánchez lo primero que hace es declararse extrañado por la decisión tomada por el juez. ¿Qué piensa de esta actitud de la administración de hacerse desentendida de todo el caso judicial?
M.B.: Ellos pensaban que la denuncia inicial de Manos Limpias no iba a tener ningún recorrido, ni ninguna posibilidad, pero la denuncia iba perfectamente fundamentada con unas pruebas evidentes y contundentes, y el juez que maneja esta denuncia, pues resulta que es un juez que no está politizado, de los pocos que hay todavía en España, porque la justicia está tremendamente politizada, que ha aplicado la Constitución, que dice que todos los españoles somos iguales ante la ley y no le ha dolido, bajo ningún conflicto, que fuera la esposa del presidente del Gobierno para sentarla en el banquillo. Pedro Sánchez y el ejecutivo alentaron al fiscal del caso para que pusieran un muro al pedir de inmediato el archivo de la causa, lo cual no ha prosperado. La Fiscalía nunca tenía que haberse convertido en defensor de una imputada, sino todo lo contrario. Pero en vez de acusar y defender el interés político general, se pone de lado de los imputados.
SEMANA: ¿Qué repercusión está teniendo en España el manejo que ha hecho el presidente Sánchez?
M.B.: Lo que está haciendo Pedro Sánchez es una huida hacia adelante. Están tratando por todos los medios de ver cómo se puede paralizar este proceso. Pero este proceso ya es imparable. La sociedad española está clamando a gritos que dimita, no se puede tener un presidente que es conocedor, encubridor, cómplice y beneficiario, además al título lucrativo de los negocios ilícitos de su esposa. Es un escándalo monumental. Comprendo que efectivamente los incondicionales del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) pues traten de defenderle, pero prácticamente se puede decir que el 80 por ciento de la sociedad española, incluso militantes y afiliados honestos del partido socialista, están indignados porque el daño que está haciendo a su propio partido, a la sociedad española y a nivel internacional es tremendo.
SEMANA: ¿La ciudadanía cómo está tomando todo este escándalo?
M.B.: Cada día están saliendo más y más actuaciones ilícitas de su mujer, y cada vez es mayor la indignación, no solamente de los medios de comunicación y de la sociedad, es que estamos sorprendidos de cómo a estas alturas todavía el presidente del Gobierno no esté tratando de justificar los negocios de su esposa, y decir “no, esto no es verdad por esto o lo otro”. Lo único que hace es atacar, insultar y calumniar a los medios, hasta el propio juez, a las organizaciones, en este caso Manos Limpias, soltando verdaderas injurias y calumnias diciendo que todo es una mentira, que todo es una trama de la derecha y de la extrema derecha.
SEMANA: ¿Cómo están manejando los ataques que están recibiendo usted y la organización que dirige, Manos Limpias?
M.B.: Nosotros en Manos Limpias no somos ni de derechas, ni de izquierdas, ni de centro. Somos una organización que lucha contra la corrupción, venga de donde venga, de la derecha como de la izquierda, como si es de la extrema derecha, como si es la extrema izquierda, como si es de los independentistas. Pero para descalificarnos se nos está diciendo que somos un sindicato y una organización ultraderechista. Si saben nuestros estatutos y nuestros comportamientos, somos totalmente apolíticos y no dependemos de ningún partido político, no recibimos ninguna subvención pública, lo cual nos hace ser libres para decir la verdad, venga de donde venga. Y te califican con epítetos de fascista, de ultraderechistas.
Eso ya no cuela porque la gente sabe cómo es la organización Manos Limpias, y que tenemos una victoria donde hemos denunciado a miembros de la Casa Real, hemos denunciado al dirigente del Partido Popular que es de derecha, hemos denunciado al dirigente del Partido Socialista Obrero Español, hemos denunciado a los independentistas. Por lo tanto, ahí está nuestro bagaje y, con eso, no puedes inventarte que somos unos fascistas y unos ultraderechistas.