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Pilar Nores: la novela judicial que envolvía a la ex esposa de Alan García
La ex primera dama fue la primera en llegar a la clínica y acompañó al ex presidente en sus últimos minutos de vida. La trama de Odebrecht también la involucró a ella. Esta es su historia.
El inesperado final del ex presidente de Perú, Alan García, ha conmocionado a los peruanos. La prensa de ese país registró con asombro la reacción del ex mandatario que, ante una orden de arresto de 10 días, prefirió dispararse en la cabeza. Perdió la vida un par de horas después en el hospital Casimiro Ulloa.
En medio de ese drama, había otra protagonista. Su exesposa Pilar Nores Bodereau llegó a la clínica consternada. Las cámaras registraron el dolor de la mujer, quien además de haber sido su compañera de vida, había vivido con él en los últimos meses el enredo judicial por Odebrecht.
Nores terminó involucrada en ese proceso y las responsabilidades que la adjudicaba la justicia en ese entramado se habían convertido en un problema familiar. Una vez se destapó el escándalo de la multinacional brasilera, no solo el ex mandatario quedó en entredicho, sino que su ex mujer apareció como una de las receptoras de los dineros de esa trama.
El caso que la puso en el ojo del huracán tiene que ver con una donación por cerca de 35.000 dólares a una ONG que ella presidía llamada el Instituto Trabajo y Familia. La ex primera dama tuvo que salir a explicar en televisión lo que había sucedido y describió ese giro como “ridículo y hasta ofensivo”.
"En 2010, Odebrecht hizo llegar al instituto tres cheques de cinco mil dólares cada uno. En total, de 30 millones de dólares que ha ejecutado el Instituto Trabajo y Familia a lo largo de sus años, Odebrecht ha aportado 35 mil dólares, es decir casi el 0.1% de los aportes", aclaró al diario La República de Perú. “Todos se van a reír cuando sepan que son tres cheques de tan poco dinero”, concluyó en ese momento.
Nores intentó defenderse diciendo que recibió el dinero “en público, ante cámaras y con certificado de desgrabación de impuestos”, pero eso no ayudó a su defensa. Incluso, unos años después, el fantasma de Odebrecht se haría tan persistente que las relaciones con su exmarido comenzaron a enfriarse.
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En 2017, evidentemente hastiada, dijo en Ampliación de Noticias que “quieren encontrar un nexo entre Alan García, Odebrecht y yo y lo quieren hacer por cualquier lado. Pero él [García] deberá responder por sus acciones solo”. Unas declaraciones que sorprendieron a los peruanos que recordaban una de las frases que marcaron el inicio del segundo gobierno de García. “Siempre apoyaré a Alan, como esté y donde esté”, había dicho ella en una entrevista en 2006.
La historia de amor de ambos no fue enteramente feliz. De hecho, la relación entre la pareja se dañó en el su segundo mandato de García cuando él tuvo que salir públicamente a reconocer la paternidad extramatrimonial de un hijo. Con Nores, García tuvo cuatro hijos: Josefina, Gabriela, Luciana y Alan Raúl.
La mujer fue dos veces primera dama. La primera durante el periodo presidencial de 1985 a 1990 y la segunda, en 2006. En ese segundo mandato, García le pidió que se hiciera cargo de la ONG Instituto de Trabajo y Familia, que después le causó los enredos con Odebrecht.
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Como primera dama, Nores fue bastante discreta y manejaba un muy bajo perfil. “ Yo soy un poco tímida con la prensa. No es que me asuste, pero me da la idea de que a veces van más allá de lo público”, dijo en una entrevista a comienzos del segundo periodo de García.
La ex primera dama fue quien acompañó a García en sus últimos minutos de vida, en una decisión que representa uno de los giros más dramáticos del escándalo de Odebrecht que aún sacude al continente.