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Pobreza en Venezuela supera el 90%, según reciente encuesta nacional
El estudio les preguntó sobre calidad de vida a 17.402 familias en 22 de los 24 estados de Venezuela entre febrero y abril.
Un reciente estudio coordinado por la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) de Venezuela reveló este miércoles que tres de cada cuatro venezolanos viven en pobreza extrema, en el marco de una larga crisis económica agravada por los confinamientos derivados de la pandemia del coronavirus y la escasez de combustible.
El 76,6 % de los hogares en ese país sufre pobreza extrema, ya que sus ingresos no cubren sus necesidades alimenticias básicas. Además, un 94,5 % de los venezolanos viven en condición de pobreza, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida 2021, coordinada por la mencionada universidad.
“Llegamos a un techo de la pobreza”, aseguró el sociólogo Luis Pedro España durante la presentación de la encuesta en Caracas. Sin embargo, pudo quedarse corto, pues el informe advierte que la pobreza extrema sigue aumentando. Se estima que la población de Venezuela es actualmente de 28,7 millones de habitantes después de que más de cinco millones emigraran hacia otros países desde el año 2014.
La pobreza en Venezuela, país que sufre una severa hiperinflación y su octavo año de recesión, aumentó desde 91,5 % en el periodo 2019-2020 y la extrema desde 67,7 %. Las cifras de la encuesta distan de las ofrecidas por el presidente Nicolás Maduro, quien aseguró en una rendición de cuentas que 17 % de la población vivía en la pobreza en 2020 y solo 4 %, en pobreza extrema.
El sociólogo Luis Pedro España explicó que el 5,5 % de la población que se ubica por encima de la línea de pobreza ha podido “indexar” sus ingresos a la inflación y a la depreciación de la moneda local, el bolívar.
En medio de ese contexto, solo el 50 % de los venezolanos en edad de trabajar (7,6 millones) están activos, según la encuesta de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB). Las mujeres son las más perjudicadas por la precariedad del mercado laboral, con apenas 32,9 % de las trabajadoras en actividad.
Cabe resaltar que el salario mínimo mensual, complementado por un bono de alimentación obligatorio, apenas sobrepasa el equivalente a dos dólares mensuales, lo que es insuficiente para cubrir las necesidades mínimas. Ese valor se ha debilitado tanto que ya ha dejado de ser referencia en el sector privado, donde el ingreso promedio es de unos 50 dólares.
Ante el colapso de la economía y la productividad, 86,5 % de los hogares recibe ayudas gubernamentales y 20 % remesas de familiares en el extranjero. Sin embargo, la pandemia ha golpeado las remesas: 11 % de los hogares que las tenía en 2020 ha dejado de percibirlas y un 22 % ha visto que disminuyen en cantidad y frecuencia.
Cada vez menos niños y jóvenes estudian
De los 11 millones de personas en edad estudiantil (3 a 24 años), solo 65 % están inscritas en centros educativos de los distintos niveles escolares, lo que representa una caída de 5 % con respecto a 2020. La cifra entre los potenciales estudiantes universitarios (18 a 24 años) apenas llega a 17 %.
“Nos llegó la pandemia en un país que ya vivía una semiparalización” por la recesión, destacó por su parte Anitza Freites, coordinadora del estudio, quien destacó el impacto de la crisis en la educación.
El 90 % de quienes estudian lo han hecho en los últimos meses a distancia por la covid-19, afectados por las fallas de servicios públicos como electricidad y conectividad, mientras que el 70 % reportan necesidades de mejoras de acceso a internet.
*Con información de la AFP.