Polémica por líder estudiantil en Bolivia que lleva 33 años en la universidad y con calificaciones de cero

Un nuevo escándalo de corrupción se destapó en Bolivia, luego de que un legislador de ese país decidiera llevar ante los tribunales judiciales a un líder estudiantil de ese país, señalado de haber convertido la representación universitaria en “un negocio”, pues, pese a ser en efecto miembro de la comunidad de una universidad de ese país, en calidad de alumno, mantiene tal estatus desde hace 33 años, sin que hasta el momento hubiese obtenido algún título profesional de alguna de las carreras que ha emprendido para mantenerse vigente en la institución.

El estudiante en referencia es un hombre de 52 años identificado como Max Mendoza, quien actualmente ostenta el cargo de presidente de la Confederación Universitaria Boliviana (CUB), posición por la que actualmente percibe un sueldo, pagado por el Estado, el mismo que aporta a su formación, pues aparece matriculado como miembro de una institución pública de ese país desde hace más de tres décadas.

Según el reporte presentado a las autoridades, Mendoza ha iniciado varias carreras para mantenerse vinculado a la universidad; no obstante, no logra responder con éxito a sus obligaciones estudiantiles, a las que se encuentra adscrito desde finales de los años 80.

La noticia de la denuncia fue revelada por el legislador boliviano Héctor Arce, quien en rueda de prensa entregó algunos de los detalles de la investigación previa en la que sustentó su denuncia penal contra Mendoza.

El legislador acusa a Mendoza de defraudar al Estado y de beneficiarse indebidamente de él con fines de enriquecimiento ilícito, pues, como presidente de la referida asociación de representantes estudiantiles, devenga un sueldo mensual aproximado de 22.000 bolivianos, una cifra que traducida a pesos colombianos se acerca a los 12,8 millones.

Una larga ‘carrera’ de corrupción

Según la denuncia interpuesta por el legislador, el estudiante, que se ha amañado en el cargo, lleva al menos cuatro años ostentando el actual cargo de presidente de referida agremiación estudiantil; no obstante, en el pasado también ha estado vinculado a otros cargos dentro de la representación universitaria.

En cuanto a su desempeño académico, el legislador que interpuso la denuncia, en declaraciones recogidas por medios internacionales, afirmó que el señalado ha reprobado más de 200 materias en su recorrido universitario, de las cuales, cerca de 100 han sido con una calificación de cero.

El señalado inició en 1989 como estudiante de la carrera de administración de empresas, la cual abandonó para inscribirse posteriormente en la facultad de derecho, a la cual lleva vinculado al menos 25 años, un tiempo que traduce en cinco veces la duración total de la carrera para obtener el título como abogado en ese país.

El escándalo en Bolivia ha tomado importantes dimensiones, pues si bien hasta el momento se sabía que el Estado entregaba importantes recursos a las organizaciones estudiantiles, según precisan medios internacionales como la AFP, era poco conocido que sus líderes devengaran sueldos y menos de las magnitudes reveladas.

En Bolivia, al igual que en otros países de la región, existen múltiples casos de estudiantes que se “eternizan” en la universidad pública, pero el caso de este líder estudiantil marca sin duda un hito sin precedentes.

Dentro de la denuncia, además de señalar a Mendoza de enriquecimiento ilícito, el legislador acusador argumentó otros cargos como “beneficio en razón de cargo, conducta antieconómica y peculado”, según recogen medios internacionales.

El referido caso prende las alarmas en ese país, pues no habría salido a la luz si no es por una reciente tragedia ocurrida al interior de una universidad boliviana, donde el estallido de un artefacto tipo bomba lacrimógena en el marco de una asamblea estudiantil, derivó en una estampida que dejó decenas de heridos y cuatro personas muertas.

Precisamente, en dicho espacio, desarrollado en el polideportivo de la Universidad Tomás Frías, en la ciudad de Potosí, se encontraba presente el referido estudiante, quien había llegado para respaldar la elección local de uno de sus simpatizantes y amigos como delegados estudiantiles.

Como consecuencia de dicha tragedia, las autoridades detuvieron como responsables a cuatro personas entre las que se cuentan los citantes al espacio de participación, y el joven que, en medio de una acalorada discusión, activó la bomba lacrimógena que desencadenó el hecho que además quedó consignado en video.

Por esta tragedia, decenas de estudiantes tuvieron que ser llevados a los centros asistenciales, al presentar afectaciones por asfixia y por golpes en medio de la estampida.

Luego del anuncio de la demanda en contra de Mendoza, se conoció el siguiente pronunciamiento de la confederación que preside.

*Con información de la AFP.